Argentina: Salud en un estado plurinacional

Idioma Español
País Argentina

"Desde nuestra mirada como pueblo milenario, la salud es parte de todos los círculos de vida... Entendemos la salud-enfermedad como un proceso, micro, familiar comunitario y global. Ligado totalmente a nuestra relación con las demás vidas existentes en nuestro medio ambiente o Territorio. Al cumplimiento o transgresión de los principios y valores que nos rigen como miembros de una gran cadena de vidas."

Somos del pueblo mapuche de Neuquén. Vengo como werken, autoridad de la Confederación Mapuce de Neuquén.

Queremos expresar que desde nuestra mirada como pueblo milenario, la salud es parte de todos los círculos de vida. Desde nuestro Kimvn/conocimiento, la Tierra está ligada a todos los planetas, al sol, a la luna, en una forma holística. Entonces entendemos la salud - enfermedad como un proceso, micro, familiar comunitario y global. Ligado totalmente a nuestra relación con las demás vidas existentes en nuestro medio ambiente o Territorio. Al cumplimiento o transgresión de los principios y valores que nos rigen como miembros de una gran cadena de vidas.

Por ello también somos concientes de que la contaminación del agua en Japón por ejemplo, nos afecta a todos porque nos llega a través de lluvias, de los peces que llegan por el Océano Pacifico, etc.

Entonces no podemos cometer el error de la gran mayoría de los científicos occidentales, políticos, jueces, periodistas, de ver la realidad como un montón de sucesos separados o hacernos creer que no tienen ninguna relación.

Vamos a la realidad concreta que nos golpea en vivo y en nuestros cuerpos: la contaminación de todos los rincones de nuestra casa común la Tierra, Waj Mapu, en nuestro Idioma. La vieja o actual política extractivista, que no es nada más y nada menos que la explotación irracional de los bienes comunes de la humanidad, a favor de unos pocos, es una política sistemática y deliberada genocida y ecocida.

Los pueblos tenemos el derecho de exigir que los estados provinciales y nacionales unifiquen políticas concretas para fijar parámetros de contaminación de la tierra, las aguas, el aire, para vivir en un ambiente sano, como dice la Constitución.

La justicia debe tipificar penas concretas a los crímenes ecológicos que generan enfermedades en las personas de todos los orígenes. Ponemos como ejemplo a los vecinos de la Unión de Asamblea ambientales de Santa Fe, quiénes denuncian que se han lanzado al aire indiscriminadamente, más toneladas de agente naranja que en la guerra contra el pueblo heroico de Vietnam. Aclaramos que los agentes naranja hoy se llaman glifosato, arma de exterminio actual en manos de Monsanto.

¿Qué técnico en medio ambiente o en ciencias del ambiente medirá la cantidad de venenos utilizados? ¿Quién le va a poner cifras? ¿Cómo se va a remediar? ¿Cuánto va a costar en dinero y fundamentalmente cómo va a afectar a las futuras generaciones?

Es difícil hacer realidad la interculturalidad cuando nos siguen matando. Ya no con el rémington como en los tiempos de la mal llamada “Conquista del Desierto” o al Gran Chaco o como en la última sangrienta dictadura militar. Ahora la contaminación es una bala invisible.

Damos a conocer a ustedes que desde nuestra cosmovisión, la naturaleza nos entrega conocimientos de cómo podemos equilibrarnos con toda la organización circular de la naturaleza. Para nuestro Pueblo todo newen/vida de la naturaleza tiene una propia familia protectora. Por ello siempre pedimos permiso para tomar lo justo y necesario para nuestra existencia a esos diferentes círculos de vida recordando a kuse/anciana, fvca/anciano, wece wenxu/jóven masculino y vjca/jóven femenino, dualidad en género y generación de cada ser en Waj Mapu, organización circular de la naturaleza

Esta organización posee ley ancestral no escrita que llamamos Az Mapu. Cuando se desequilibra cualquiera de estos círculos de vida termina afectando a las personas porque somos parte, miembros de esta gran organización.

A la luz de los resultados de 200 años de modelos económicos impuestos y aún imperantes sea capitalismo o socialismo sin distinciones ideológicas, han permitido la contaminación, envenenamiento del planeta.

No estamos de acuerdo con la actual matriz energética, sea convencional o no convencional; termina finalmente matando la organización circular de la naturaleza y a las personas de todos los orígenes

En la provincia de Neuquén no llueve hace 6 años. Pero esta sequía prolongada que deja sin producción a campesinos y comunidades mapuce no preocupa al partido político gobernante. Sin embargo planifica obras de acueducto para abastecer a la explotación hidrocarburífera mediante el método fracking.

Cada pozo requiere 40 millones de litros de agua dulce. Mientras a los vecinos pobres del barrio colonia Nueva Esperanza ubicadas en las mesetas y a las comunidades mapuce de Neuquén, el gobierno lleva agua en camiones que apenas alcanza para consumo humano.

Nuestro tanque de agua es el lago Mari Menuko que abastece a más de 400 mil personas de Neuquén capital. Queremos denunciar que se están realizando perforaciones debajo y alrededor de este lago. Dudamos que los caños que se utilicen sean de la calidad del primer mundo. Tenemos sospechas fundamentadas que el Marimenuko que abastece a la ciudad de Neuquén y ciudades aledañas está en serios peligros de contaminación. Pero, ¿quién irá preso por este ecocidio y genocidio premeditado?

¿Quién irá preso por producir y comercializar alimentos modificados genéticamente? La mayoría de la población inocente está siendo envenenada sin posibilidades de conocer todos los riesgos a estas nuevas formas de comer monoculturalmente.

Los pueblos originarios, campesinos, los afrodescendientes, criollos tenemos que ser consultados y ser partícipes con decisión en nuestros territorios.

Necesitamos urgente una reforma agraria integral para todos los pueblos. Queremos otro modelo económico de baja entropía. Queremos otro modelo energético que no ponga en riesgo todas las vidas.

Tenemos como ejemplo concreto el de la provincia de Chubut. Tiene la mala suerte de tener una veta gigante de uranio.

Después de Fukushima queda claro que esa energía deja residuos eternos.

Habiendo diferentes formas de energías: solar, eólica, hidrogeno que pueden ayudar a salvar el mundo.

En la provincia de Santa Cruz fabricaron un primer auto nacional que utiliza hidrógeno pero nadie le dio la real importancia. Esto nos demuestra que las definiciones políticas de quiénes nos gobiernan no priorizan un desarrollo equilibrado para el bienestar común. De todas las vidas. Los Pueblos originarios tenemos la alternativa a este modelo porque nuestro BUEN VIVIR se sustentó por miles de años en este parte del mundo sin destruir nuestro medio ambiente.

ra.moc.oohay@vyupumel

WERKEN CMN Y

DEL EQUIPO DE SALUD MAPUCE

“BAWEHTUWVH ZUGU”
CONFEDERACIÓN MAPUCE DE NEUQUÉN

Temas: Pueblos indígenas, Salud

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