Argentina: campesinos/as se unen ante avance de los agronegocios

Por RENACE
Idioma Español
País Argentina

"El 2 de octubre, Pablo Orellana, presidente de la central de campesinos de Los Juríes, integrante del MOCASE y de la mesa coordinadora del “Frente Nacional Campesino”, ha recibido una orden de desalojo. Este nuevo desalojo forma parte del avance de los agronegocios promovidos por el modelo agroexportador que va en contra de la permanencia de los campesinos en su tierra".

Orden de desalojo contra dirigente campesino del MOCASE-FNC

El 2 de octubre, Pablo Orellana, presidente de la central de campesinos de Los Juríes, integrante del MOCASE y de la mesa coordinadora del “Frente Nacional Campesino”, ha recibido una orden de desalojo de la tierra en la que vive y trabaja, emitida por la justicia santiagueña, dictaminada por el juez Darío Alarcón del juzgado de crimen de tercera nominación. Dicha orden constituye un acto de intimidación hacia quien lleva adelante la lucha por la tenencia de la tierra y por mejores condiciones de vida y trabajo en Santiago del Estero. Este nuevo desalojo forma parte del avance de los agronegocios promovidos por el modelo agroexportador que va en contra de la permanencia de los campesinos en su tierra.

Por este medio hacemos público este hecho y demandamos la inmediata suspensión de la medida así como de los desalojos y actos de persecución y represión que conllevan. Demandamos asimismo la intervención de los organismos públicos competentes en defensa de los campesinos que luchan por la tierra y anhelan trabajar y vivir dignamente, cuidando el medio ambiente y resistiendo el embate voraz e incesante de los agronegocios y sus excluyentes intereses de lucro y acumulación.

IMPENETRABLE CHAQUEÑO

Un equipo del FNC (Frente Nacional Campesino), esta acompañando el proceso de organización que llevan adelante pobladores de una gran cantidad de parajes del oeste de la provincia del Chaco, en esos lugares históricos de la Argentina profunda compartimos con los compañeros/as del campo pobre sus trabajos, sacrificios, preocupaciones, logros, alegrías, sueños, fe y esperanzas.

Estas familias campesinas del impenetrable chaqueño de los departamentos Gral. Güemes y Almirante Brown de la provincia del Chaco (Argentina), llevan adelante un meritorio trabajo de unión y organización por iniciativa propia; ellos se proponen defender sus derechos legítimos y constitucionales, especialmente lo referente a: la tierra, el monte, la producción y la cultura.

Grupos de criollos/as, de diferentes parajes, descendientes de los primeros ganaderos y hacheros que poblaron los montes chaqueños desde el siglo XIX se juntan y debaten sobre la situación de la tierra que poseen, los montes que los resguarda, las dificultades en la producción y las amenazas contra sus valores culturales. Uno de ellos expreso en una reunión que “la tierra, el monte, los ganados y el caballo son elementos esenciales que hacen a la existencia del ser criollo/a… en esta región sin tierra y sin monte no habrá producción ni habrá vida…”

Monte adentro del impenetrable chaqueño las viviendas en su gran mayoría son de palo, adobe y techo de tierra; se toma agua de madrejones, riachos o pozos; los caminos son polvorientos y en mal estado, a pesar de los esfuerzos de los consorcios camineros; son escasos los medios de transporte publico y son muy pocos los que cuentan con medios de movilidad; las distancias entre parajes y pueblos son muy extensos. Los criollos acostumbran a matear a las cinco de la mañana para iniciar la jornada de trabajo en el monte y regresar a casa después que se ponga el sol. En las fiestas populares se come empanadas y asados; se canta coplas; se baila chacarera, zamba y chamamé.

Tradicionalmente los chaqueños (campesinos del monte) producen la mayor parte de los alimentos que consumen, y fabrican buena parte de los elementos de trabajo (lazos, cabrestos, tambeador, coletos, guardamontes, ensillados, rebenques, etc.,) para la tarea de campo. Asimismo los campesinos de la región se destacan en los trabajos con el hacha en la elaboración de postes, horcones, tirantes, corrales, tranqueras, cercos y mangas.

Los criollos junto a los originarios son únicos en el conocimiento del terreno de los extensos y variados montes chaqueño; nadie como el chaqueño esta capacitado para vivir y trabajar la ganadería en condiciones limites que impone el clima a sus habitantes. En verano las familias cosechan los frutos de la algarroba, vinal y mistol para conservar y disponer de ello en la época critica para la alimentación de los animales.

En cuanto a salud y educación es destacable la tarea que desarrollan en la profundidad de los montes chaqueños tanto docentes como personales de la salud pública, quienes ejercen sus vocaciones en medio de grandes adversidades. Es inmenso el aporte de los pobladores para mantener en pie la educación sistemática y la salud pública. Sin ninguna duda el estado hace su aporte pero claramente debería invertir mucho más para fortalecer la educación y la salud pública y gratuita.

Los pobladores valoran la asistencia social que han recibido en los últimos años, particularmente que, quienes reúnen los requisitos hoy estén percibiendo haberes de jubilaciones o pensiones sociales, viviendo ellos/as en sus lugares de orígenes del monte chaqueño. Dichos beneficios aportan en la capacidad adquisitiva y por ende en el mejoramiento de las condiciones de vida de muchas familias chaqueñas, después de tantos años de exclusión social.

Los ganaderos del impenetrable perciben con preocupación la expansión de la frontera agropecuaria de los agro-negocios, es inquietante la presión que ejerce el modelo agro-exportador contra pueblos originarios y criollos a través de las topadoras, pisamotes e incendios, destruyendo lo poco que queda de la flora y fauna de la región. Los criollos consideran que el modelo sojero es una gran amenaza para los últimos montes nativos donde habitan y producen miles de familias campesinas.

Los criollos/as, poseedores ancestrales de las tierras donde viven, producen y se desarrollan están intercambiando ideas para elaborar y elevar una propuesta, en el marco de las leyes vigentes, a los gobiernos: nacional, provincial y municipal, con el objeto de avanzar en la regularización definitiva de sus posesiones de tierras.

Además, están preocupados por la disminución y degradación de los bosques nativos; por ello se proponen asesorarse y actualizarse acerca de las legislaciones provinciales y nacionales para la restauración, conservación y mejoramiento del monte chaqueño.

En estos tiempos los productores están angustiados debido a la escasez de agua y alimentos (pasturas) para la ganadería: vacas, caballos, cabras y cerdos. Los campesinos redoblan sus esfuerzos con tal de salvar su producción; las pocas represas se están secando, los pozos de balde no abastecen la demanda de agua, los ganados pierden peso y en algunos casos mueren por falta de agua y alimentos. Las familias también tienen problemas de agua para el consumo humano.

Las dificultades más comunes que perjudican notablemente a la producción ganadera de los criollos son: falta de aguadas, bebederos, corrales y potreros; escasez de agua; falta de pasturas; pestes; abigeato; problemas genéticos y los precios irrisorios que se paga por el ganado vacuno; a todo ello se debe sumar la deforestación y la degradación medioambiental. Esta importante franja de productores precisa de mayor presencia del estado, con asistencia técnica y financiera para fortalecer las iniciativas de producción sustentable que pretenden la mayoría de los productores criollos del impenetrable chaqueño.

Ante la critica situación respecto a la falta de agua y pasturas los productores se proponen diseñar emprendimientos de corto, medio y largo plazo que tengan por objeto solucionar dichos inconvenientes; para la ejecución se recurrirá a la asistencia de organismos competentes del estado provincial y nacional. La construcción de represas, perforaciones y el cultivo de pasturas son pasos indispensables para que los ganaderos del impenetrable puedan seguir produciendo y aportando a la riqueza nacional.

Los pobladores de la zona proponen avanzar hacia la formalización de sus organizaciones de base a través de herramientas asociativas que facilite los trabajos con el estado como así también la planificación y ejecución de Programas de Desarrollo Rural Sustentable para los parajes de la sub-región semiárida de la provincia del Chaco.

En la actualidad los principales problemas de la región son:

El aumento de las áreas agrícolas en secano de medianas y grades empresas con producción y “tecnología de punta” incompatible con el bosque nativo y de escaso valor social y económico regional. Por este motivo se encuentra al borde de la perdida total de sus montes la subregión semiárida del parque chaqueño.

La continua degradación de bosques y suelos en áreas del chaco semiárido con sistemas ganaderos extensivos. La tendencia es la perdida de posibilidad de renovación de las principales especies forestales nativas. El aumento de la salinizacion de los suelos por las malas practicas agrícolas y de riego.

La alta frecuencia de incendios por falta de prevención produce importantes pérdidas de bosques y pastizales. El aumento de colmatacion en esteros, bañados, lagunas, madrejones y ciénagas debido a la erosión hídrica y eólica como así también el incremento de inundaciones por causa del sobrepastoreo y sobre todo a las malas practicas agrícolas

Las causas de fondo están vinculadas generalmente con la especulación inmobiliaria, el relativo valor económico y ambiental actual de los bosques frente a las actividades agrícolas y ganaderas del modelo agroexportador, el afán de lucro a corto plazo que desprecia las consecuencias sociales y ambiéntales. Se suma a todo esto la falta de alternativas tecnológicas vinculadas al desarrollo sustentable y de planificación integral.

El FNC agradece la cooperación de las familias campesinas de los distintos parajes del impenetrable chaqueño.

Contacto para notas:
Benigno López Cel.: 03717 – 15401670
ra.moc.oohay@rofacom

ANEXO:

MORTANDAD DE GANADOS
(PRODUCTORES CRIOLLOS NECESITAN AUXILIO DEL ESTADO)

Hacemos este escueto informe con el ánimo de buscar auxilio para los productores, desde la localidad de Tte. Gral. Fraga, departamento Matacos, provincia de Formosa, sub-región Chaco Seco, donde a parte del caserío de las familias criollas sobresalen el destacamento de Gendarmería Nacional, la Capilla, la Escuela y la Sala de primeros auxilios. A veras de la ex-estación FRAGA del desmantelado ramal C25 del Ferrocarril Gral. M. Belgrano, el lugar da la sensación de haber sido destruido por algún bombardeo en el pasado, pero no, lo que casi borra del mapa a esta localidad fue la aplicación de las nefastas políticas neoliberales.

Los criollos resisten y siguen soñando con un mañana mejor, francamente son familias que han demostrado que se puede poblar, vivir, trabajar, producir contra cualquier pronóstico. Los gauchos Sando, Gringo, Gilberto y Ricardo, compañeros solidarios como hay pocos, con profundo valores humanos y principios de justicia nos dan una mano para conocer la región y especialmente lo que es la vida del chaqueño monte adentro del extremo oeste formoseño; donde la falta de agua y sol subtropical son simplemente implacable.

En conversaciones mantenidas con Productores Pecuarios de parajes del extremo oeste formoseño, ellos, expresaron estar sumamente preocupados por las importantes perdidas que están sufriendo en sus ganaderías. Perdida de peso y mortandad de vacunos, equinos, caprinos y cerdos; esto viene a sumarse a los precios irrisorios que se paga por el ganado en pie en esos lugares. Un productor nos ilustro la situación con estas palabras: “¡hermano, ya van 7 vaquitas que se me mueren por falta de agua, y usted sabe que pa un chaqueño pobre perder una vaquita… ya es mucho…!”.

Las perdidas consisten en mortandad de ganados debido a dos motivos diferentes según comentan los productores: primero y principal, la falta de pasturas y agua como consecuencia de la degradación ambiental y las escasas precipitaciones pluviales en esta zona de la Chaco Semiárido; segundo motivo una enfermedad que los productores desconocen con precisión las posibles causas.

Algunos comentarios irónicos dicen que solo tienen agua suficiente los ganaderos que andan bien con el “barba”. En el caso de la falta de agua los animales por lo general quedan empantanados en el barro de las viejas represas, madrejones, o en los bancos de arena del río, o simplemente caen en el monte y allí mueren…es muy triste ver con nuestros propios ojos como el sol y las aves de rapiña se devoran los animalitos de las humildes familias criollas.

En el caso de los animales que mueren por enfermedad, indican los gauchos, que los animales entristecen y agonizan un tiempo, no queda claro las causas reales, talvez sea simple.

Es sabido por todos que la vida de las familias chaqueñas (pequeños ganaderos del oeste formoseño) es muy sacrificada, viven y producen en condiciones absolutamente desfavorables, en su gran mayoría no cuentan con infraestructuras básicas para seguir produciendo, la pobreza les golpea con mucha crueldad, le ponen el pecho a la vida y no le tienen miedo al trabajo rudo, Hacen patria en los lugares mas difíciles donde muchos no trabajarían jamás de a pata o a caballo.

Se puede apreciar con orgullo que los últimos gauchos del monte chaqueño entregan todo por la patria y por alguna triste razón el estado todavía no a hecho lo suficiente por ellos. Son familias, son paisanos que han entregado demasiado, no se les puede exigir más, en realidad el estado ha sido muy injusto con ellos y se merecen, quizás, una reaparición histórica.

Todo ciudadano serio reconoce el progreso que significa el asfaltado de la ruta Nacional Nº 81, el mejoramiento de carreteras provinciales, el mantenimiento de canales de agua, la construcción de edificios públicos, el mejoramiento de las arterias urbanas y la posibilidad real de la mega-obra del gasoducto; como así también el impacto negativo de la destrucción del Ferrocarril Belgrano ramal C 25 que se llevo consigo importantes e históricas poblaciones; tampoco se puede dejar de advertir el desarraigo y las situaciones sociales criticas entre las poblaciones mas vulnerables.

Las obras viales, hídricas y de comunicación traen progreso y también facilitan la expansión del modelo agropecuario de los agro-negocios, las corporaciones denominadas “inversionistas” se quedan con grandes extensiones de campos, ayudados por sus gordas billeteras.

Es oportuno indicar que todo el Gran Chaco Argentino siempre estuvo poblado y produciendo desde hace siglos, solo que el estado estuvo de espaldas o ausente, si los criollos pudieron arraigarse y producir en condiciones adversas casi sin apoyo, ¿como no serian sujetos de desarrollo rural sustentable con la cooperación del estado? El avance del actual modelo agropecuario es posible a consta del desplazamiento de miles familias criollas y en detrimento de los últimos bosques nativos.

En los últimos tiempos se puede observar con dolor la descomunal transferencia de tierras pertenecientes a productores criollos a manos de capitales desconocidos; varias familias han decidido resistir y defienden sus posesiones como gato panza arriba, ya que es muy caro contar con abogados, escribanos, agrimensores, etc., por lo general no cabe dentro del poder adquisitivo del campesino contratar a estos profesionales.

Pero lo que nos ocupa en esta ocasión son hechos concretos de la pobreza rural de una zona puntual de la geografía argentina (extremo oeste formoseño), poblaciones rurales con mucha historia y con pobladores muy dignos que mas allá de los esfuerzos individuales o asociativos y la implementación de determinados programas en algunos campos, el clima, la alteración del ecosistema, el aislamiento y la pobreza les golpea sin piedad.

Las organizaciones del Frente Nacional Campesino son resistidas y perseguidas, particularmente por los terratenientes y empresarios ligados a los agro-negocios, como así también por funcionarios que no admiten que los tiempos cambian y que los niños crecen; el campo no es solo la pampa húmeda o los representados por la mesa de enlace, existe otro campo el de los Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios de la Argentina profunda.

Con lo que hacemos no buscamos congraciarnos con nadie solo pretendemos sumar nuestro grano de arena en la construcción de una Argentina que incluya todos. Somos concientes que es necesario una política de desarrollo rural integral que contemplen medidas a corto, medio y largo plazo para aportar soluciones de fondo al fuerte desequilibrio territorial y la pobreza rural.

En concreto estimados/as lectores cada día son menos las familias que quedan en el campo, por eso pedimos encarecidamente a las autoridades competentes arbitren los medios para ayudar a los productores que están en problemas, los productores criollos del oeste formoseño necesitan auxilio en forma urgente en lo que respecta a agua, forraje y sanidad para sus ganados.

En los últimos años el estado argentino ha diseñado innumerables programas y planes que apuntan a disminuir la pobreza e indigencia, sin ninguna duda mucho ya se hizo, pero falta mucho por hacer, la pobreza rural es uno de los desafíos. En este momento solo expresamos que necesitamos la ayuda de todas las instituciones competentes del estado para auxiliar a los productores.

De ser necesario, ampliaremos este informe respecto al presente problema de los ganaderos chaqueños, ofrecemos nuestra modesta colaboración para con las autoridades o personas que puedan aportar soluciones.

Fuente: RENACE

Temas: Agronegocio

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