Ecuador: se oponen a construcción de una represa
En Patricia Pilar, parroquia de Los Ríos, el rechazo a la construcción de la represa Baba es tan grande que cualquier extraño que llegue es considerado funcionario de la Cedegé, hasta que pruebe lo contrario
Los propios habitantes han echado a empleados de la Comisión e incluso han intentado destruir los equipos utilizados para hacer las mediciones.
Están molestos por la negativa del Gobierno a detener la construcción de la represa, que según ellos significará la muerte de la zona. Para ellos, el ejemplo de la represa Daule Peripa, a 40 minutos, es la mejor prueba de los pocos beneficios del proyecto multipropósito Baba. En Los Guayacanes, los problemas de salubridad son muchos, sobre todo por la elevada cantidad de mosquitos, que transmiten enfermedades. "No queremos que nos pase lo mismo. Esa es una zona abandonada", dice Luis Mendoza, presidente de la Junta Parroquial de Patricia Pilar, al referirse a las comunidades separadas por el agua, infestadas de mosquitos, sin luz ni atención médica.
Mendoza se reúne con la gente de Patricia Pilar cada domingo para establecer las líneas a seguir sobre esta lucha. El proyecto Baba, para el cual se hizo un llamado público a concurso de selección de socio estratégico el pasado 24 de febrero, consiste en el embalse de los ríos Toachi y Baba en la parte alta de la cuenca del río Guayas, a dos km de Patricia Pilar, a través de la construcción de un dique que almacenará 600 millones de m3.
Además comprende la construcción de la presa de Baba, su central hidroeléctrica y el trasvase Baba-Daule Peripa. Con esta fuerza de agua que se depositará también en Daule Peripa se pretende generar 246 GWh anualmente y la irrigación controlada de aproximadamente 44 000 ha. "Con la construcción de la presa se conseguirá el desplazamiento de 12 000 personas del sector del embalse", dice Germán Jácome, principal de la Coordinadora por la Defensa de la Vida y la Naturaleza en la cuenca del río Guayas, que cuenta con el apoyo de Acción Ecológica y la Confederación del Seguro Social Campesino, entre otras. En Daule Peripa los perjudicados fueron 25 000.
Según los habitantes de la zona, las condiciones de salubridad empeorarán por el agua represada y por la destrucción de las plantaciones de esta región completamente agrícola conocida como El Valle del Vergel, que ofrece productos a mercados de Santo Domingo, Quevedo y a las comunidades cercanas.
Desde hace dos años, cuando la Coordinadora empezó a dar charlas y talleres a los habitantes, ante la inminente construcción de la presa, la lucha de Patricia Pilar para evitar esta obra es fuerte, porque consideran que los beneficios han sido exagerados y los costos, más que nada sociales y ambientales, serán peores.
"Según el proyecto, solo serán afectadas 3 500 ha, pero a esos informes hay que subirles el 25 por ciento", afirma Jácome, quien junto a Alfredo Chum se encarga de hacer estudios de los daños que causará la represa, entre cambios climáticos (debido a la gran acumulación de agua, su evaporación y consiguientes lluvias), y problemas en el agua, que dejaría de tener Ph neutro y no podrá consumirse porque la oxigenación diminuiría, especialmente de la que se encuentre en el fondo de la represa. Cedegé dejó de lado la construcción de la represa Abras de Mantequilla en otra zona ecológicamente frágil de Los Ríos.
Domingo, 13 de Marzo del 2005
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SOLIDARIDAD CON LOS PUEBLOS DE LA CUENCA DEL RÍO GUAYAS
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COORDINADORA POR LA DEFENSA DE LA VIDA Y LA NATURALEZA EN LA CUENCA DEL RIO GUAYAS, ECUADOR - E-mail: moc.oohay@auganedrooc