El Día Internacional de los Humedales y su sentencia a muerte en Honduras

Idioma Español
País Honduras

En nuestro país, mientras la elite de poder se dedica a maquinar la destrucción de los humedales más importantes del país. la Laguna de Micos (RAMSAR 722), se encuentra amenazada por un grupúsculo de empresarios e inversionistas turísticos, que pretenden rellenar mas de 80 hectáreas dentro de la laguna, con el propósito de construir un campo de golf

El 2 de febrero se celebra el Día Internacional de los Humedales, declarado como tal por la Convención de Ramsar o la Convención Internacional para la Conservación de Humedales, llamada así por ser la ciudad donde fue firmada en 1971, en Irán. Entró en vigor en 1975 y actualmente cuenta con más de 100 países que comparten su preocupación y su interés en este tema.

Los humedales son ecosistemas que dependen de un régimen acuático, es decir, que pueden ser ecosistemas que dependen del agua (ya sea durante todo el año o solo durante una temporada; por ejemplo, lagos y manglares). Los pantanos son humedales permanentes. En Mesoamerica se ubican alrededor de veinte humedales de importancia internacional. Los humedales brindan recursos forestales, recursos de vida silvestre, pesquerías, recursos forrajeros para alimentar animales y facilidades para desarrollar algunas actividades agrícolas.

Al parecer en nuestro país, con algunas excepciones, el hecho pasa inadvertido, mientras la elite de poder se dedica a maquinar la destrucción de los humedales más importantes del país. la Laguna de Micos (RAMSAR 722), se encuentra amenazada por un grupúsculo de empresarios e inversionistas turísticos, que pretenden rellenar mas de 80 hectáreas dentro de la laguna, con el propósito de construir un campo de golf, con la intención de atraer la inversión para el megaproyecto de turismo de enclave denominado Los Micos Beach & Golf Resort.

La construcción de la represa del Patuca, la cual pretenden construir el Estado de Honduras con el apoyo de Taiwan, afectará de forma definitiva los humedales de Brus laguna, e Ibans, además de los otros humedales de la Moskitia Hondureña, los que se encuentran intercomunicados entre ellos. Los efectos que causará la construcción de la Represa del Patuca, afectarán a los pueblos indígenas Tawahkas y Miskitos que viven a lo largo del río y en los humedales costeros.

Al mismo tiempo la presa en el Río Sico al nivel de la Champas, causará estragos en el humedal de Bacalar (RAMSAR 1254). El Río Sico ha sido salvajemente deforestado, prueba de esa acción es la enorme catástrofe acontecida en su cuenca durante la tormenta tropical Gamma acontecida en noviembre del 2005.

Ante la apatía de los funcionarios del Estado de Honduras, encargados de velar por el medio ambiente, se ha venido efectuado un ecocidio sistemático, donde los bosques y rios han sido destruidos sin que se tomen medidas de prevención al desierto en que se esta convirtiendo Honduras.

Mientras el día de hoy en París los científicos señalan como es lamentable la intervención de los humanos en el proceso de calentamiento global, ratificando las futuras amenazas que representa para la sobrevivencia de la humanidad, en Honduras los funcionarios parecen comprometidos con la destrucción de humedales y rios en nombre de un desarrollo que parece más un saqueo institucionalizado. Los garífunas como habitantes de una zona de alto riesgo - la costa caribe de mesoamerica - hacemos un llamado a los funcionarios del Estado de Honduras para que frenen la destrucción ambiental y se finalice la persecución a los defensores del bosque y los opositores de las represes recetadas por el Plan Puebla Panamá y al servicio de la dictadura de las multinacionales energéticas.

Fuente: moc.abiecal@henarfo

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