Internacional

En los últimos años, el interés de las empresas por los agrocombustibles ha pasado de un trote suave a una estampida a toda velocidad. Para los grupos empresariales y los políticos, los agrocombustibles ciertamente son una de las formas de energía “renovable” más potables porque encajan fácilmente en la economía imperante basada en el petróleo. Pero también ofrecen oportunidades de lucro que los promotores del nuevo esquema de los negocios “ecológicos” captaron muy rápido. Cuantiosas cantidades de dinero se vuelcan ahora en todo el mundo a proyectos de agrocombustibles—con consecuencias trascendentes.

El poder corporativo: Los agrocombustibles y la expansión de las agroindustrias

Por GRAIN

La visión que subyace a la agricultura orgánica es que es central que cuide el ambiente y la salud, y que los agricultores logren un trato justo por sus esfuerzos. Pero la agricultura orgánica también se está convirtiendo en un negocio serio — con instrumentos para comercializarla como la certificación, que ocupa más y más espacio e influencia. Más de 30 millones de hectáreas de tierras de cultivo orgánico certificado producen ya bienes de consumo para un mercado que se valora en 30 mil millones de euros. Es más, este mercado crece rápido, mucho más rápido que el mercado global de productos alimenticios convencionales. Los mercados principales para alimentos orgánicos certificados pertenecen, en buena medida, todavía al Norte, pero la producción orgánica para exportación crece constante en el Sur, conforme crecen las nuevas estrategias de base para desarrollar sistemas locales de cultivos alimenticios orgánicos — la mayoría de los cuales rechazan la aproximación empresarial de certificación.

De quién es la cosecha: la política de la certificación de semillas orgánicas

Por GRAIN

¿Adónde va la agricultura? ¿Podemos alimentar a una población creciente y satisfacer la demanda de biocombustibles en el Norte Industrializado? Partidarios de la agricultura de biocombustibles, (compañías de granos y productos químicos, inversionistas de Wall Street, políticos y la mayoría de los investigadores en las Universidades) evitan mencionar el coste de los insumos, los combustibles fósiles, el daño al medio ambiente, el precio físico a pagar por animales y humanos, y el creciente problema de hambre que acompañará el paso de la producción de alimentos a los cultivos energéticos. Quieren que creamos que el cambio a cultivos energéticos será tan fácil y tan práctico

Pintando de verde los cultivos energéticos. Los biocombustibles, la mayor estafa de la actualidad

Se ha vuelto en el profeta del Medio Ambiente. Pero, no gratis. Ni mucho menos. Al Gore se ha embolsado más de 70 millones de euros en sólo siete años con sus libros, discursos y hábiles inversiones en tecnología y empresas ecológicas

El cambio climático calienta la fortuna de Al Gore multiplicándola por cincuenta

Somos millones de mujeres y hombres, organizaciones, redes, movimientos y sindicatos de cada rincón del planeta, aldeas y regiones, zonas rurales y centros urbanos de todas las edades, pueblos, culturas y creencias unidos y unidas por la firme convicción de que Otro mundo es posible

Llamado a un Día de Movilización y Acción Global: 26 de enero 2008

El desarrollo de las “ciudades del consumo” ha transformado la geografía urbana y los hábitos de consumo y de vida de los ciudadanos. En cualquier lugar del planeta es posible encontrar, con la misma arquitectura y distribución de espacios, grandes superficies y macrocentros de comercio y ocio. Es la manifestación más evidente de la globalización comercial. Por ello se considera que son las “catedrales” de la nueva “religión del consumo” que se extiende por todo el planeta

Las catedrales del consumo

A coluna de hoje começou a nascer com uma indicação do biólogo João Francisco Botelho (autor de uma instigante dissertação de mestrado à qual ainda voltarei). Era um editorial de Adam Wilkins no periódico "BioEssays" deste mês, sob o título "Cai a ficha (finalmente) para a indústria da biotecnologia: genes não são agentes autônomos, mas funcionam dentro de redes!"

A morte das espécies

Pese a que son ampliamente criticados desde muchos puntos de vista, los combustibles agroindustriales siguen en alza. No es extraño, ya que según estimaciones del Financial Times, sólo en los países de la OCDE reciben hasta 15 mil millones de dólares de subsidios anuales (FT, 30/10/2007). Subsidios públicos que van a engordar el lucro privado, a los que se suman los múltiples subsidios indirectos que reciben algunos cultivos destinados a ese fin, como el maíz en Estados Unidos

Agrocombustibles: lo que sigue