México: Greenpeace protesta vs transgénicos en Sagarpa
La organización ambientalista Greenpeace clausuró de manera simbólica la entrada principal de la Secretaría de Agricultura (Sagarpa), ante la falta de respuesta de esta dependencia para contener el caso de contaminación de cultivos de maíz convencional con maíz transgénico en el estado de Chihuahua
Greenpeace exigió la renuncia del titular de Sagarpa, Alberto Cárdenas por no enfrentar este problema en ese estado del país.
“Es inadmisible la incompetencia de Alberto Cárdenas, pues el secretario ha hecho caso omiso de las advertencias y hasta ahora ha ignorado los procedimientos que establece la propia ley de bioseguridad. Si como servidor publico no puede evitar que la contaminación detectada en Chihuahua se extienda a otras estados esto significa que no puede responder a las exigencias de su puesto, por ello es mejor que renuncie”.
Esto lo dijo Aleida Lara coordinadora de la Campaña de Agricultura Sustentable y Transgénicos de Grespace, quien dijo que la Sagarpa no ha dado respuesta desde hace 10 meses, fecha en la que la organización ambientalista advirtió a las autoridades acerca de la contaminación del maíz mexicano.
La organización denunció la actitud irresponsable de los funcionarios de la Sagarpa que pone en evidencia, señalan, su complicidad con la empresa transnacional Monsanto, ya que se ha dedicado a promocionar el cultivo de maíz transgénico en los estados productores de este grano avalando las mentiras de que sólo así se pueden mejorar las cosechas y no con mejores programas y apoyos al campo.
“Alberto Cárdenas titular de la Sagarpa, mantuvo una actitud irresponsable ante este tema. Hoy la contaminación es un hecho, y a pesar de que la Sagarpa reconoce 70 hectáreas con presencia de maíz transgénico antes del periodo de polinización, la realidad es mucho peor porque no se tiene certeza de qué tan extendida está la contaminación”, dijo Aleida Lara.
Greenpeace advirtió que a unas semanas de que se levante la cosecha de maíz, Chihuahua corre un grave riesgo de que sus variedades nativas de maíz ya estén contaminadas con el transgénico y el problema, dicen, puede escalar a nivel nacional.
También exigieron a la Sagarpa un monitoreo de las cosechas de ese estado del norte para que informe con exactitud de la extensión de la contaminación, así como la aplicación de las medidas de bioseguridad, inspección y vigilancia, y saber cuál será el destino de los granos contaminados.