El G8 y la crisis climática: ¿coincidirán los hechos con las palabras? - Boletín 144 de WRM

Por WRM
Idioma Español

Los gobiernos de algunos de los países más poderosos del mundo se reunieron recientemente en Italia y produjeron un documento titulado “Un Liderazgo Responsable para un Futuro Sostenible”. En su declaración, informan al mundo que están “decididos a asegurar el crecimiento sostenible y a enfrentar los desafíos interrelacionados de la crisis económica, la pobreza y el cambio climático”.

Boletín N° 144 de WRM

En este número:

NUESTRA OPINIÓN

* El G8 y la crisis climática: ¿coincidirán los hechos con las palabras?

DÍA INTERNACIONAL POR LOS MANGLARES

* 26 de julio, Día de la Defensa del Manglar
* Ecuador: las mujeres del manglar construyen memoria y futuro con su lucha
* Los manglares de África están desapareciendo y con ellos los medios de vida de su gente
* Bangladesh: la destrucción de los manglares por las granjas camaroneras genera inseguridad ambiental y alimentaria

COMUNIDADES Y BOSQUES

* Brasil: ley permite avance del agronegocio en la Amazonía
* República Dominicana: el pueblo dice ¡No a la cementera en Los Haitises!
* India: Declaración de Dehradun de los pueblos del bosque

COMUNIDADES Y PLANTACIONES DE ÁRBOLES

* Brasil: duro cuestionamiento al maquillaje FSC de plantaciones de eucaliptos y advertencia frente a su avance en Piauí
* Laos: la empresa china Sun Paper planea establecer monocultivos de eucaliptos
* México: el negocio de la palma a costa de los más pobres
* Forest Movement Europe emite Declaración sobre Plantaciones de Árboles
* Árboles transgénicos: cuando los científicos se convierten en publicistas

NUESTRA OPINIÓN

- El G8 y la crisis climática: ¿coincidirán los hechos con las palabras?

Los gobiernos de algunos de los países más poderosos del mundo se reunieron recientemente en Italia y produjeron un documento titulado “Un Liderazgo Responsable para un Futuro Sostenible”. En su declaración, informan al mundo que están “decididos a asegurar el crecimiento sostenible y a enfrentar los desafíos interrelacionados de la crisis económica, la pobreza y el cambio climático”.

Podría ser divertido, si no fuera porque la situación actual es tan trágica.

El mundo enfrenta una grave crisis económica, la pobreza aumenta en todas partes – y también en esos 8 países – y la crisis climática está cercana al desastre. Todo como consecuencia directa del liderazgo “responsable” de los gobiernos de esos y otros pocos países durante muchas décadas.

Obviamente, nadie puede culpar a países como Tuvalu, Fiji, Laos, Camboya, Papúa Nueva Guinea, Gambia, Namibia, Uruguay, Cuba o la mayoría de los 192 estados miembro de las Naciones Unidas de haber creado dichos problemas. Sin embargo, la mayoría de ellos ya están impactando gravemente sobre sus pueblos.

El G8 ahora promete que “encabezará la lucha contra el cambio climático”, pero la realidad muestra que están haciendo exactamente lo opuesto: en el Reino Unido se criminaliza a militantes que intentan impedir el uso de carbón, se planea abrir Alaska a la explotación petrolera, las empresas petroleras y gaseras de los países del G8 continúan lucrando con los combustibles fósiles, al tiempo que el consumo en dichos países acelera la destrucción de bosques tropicales.

Los países que ya sufren a causa del cambio climático nunca manifestaron el deseo de ser “liderados” por el G8. Al contrario, están exigiendo que ellos y otros gobiernos poderosos acepten su responsabilidad por los problemas que han creado y hagan algo al respecto. No para el 2050 sino ahora mismo. No con declaraciones sino con acciones concretas. No a través de “mecanismos de mercado” sino a través de estrictos mecanismos legales.

El mundo – sus pueblos y ecosistemas – ya no puede tolerar un sistema donde unos pocos gobiernos, en base a su poder económico, político y militar, usan y destruyen el planeta en beneficio propio. En tal sentido, los países del G8 deben recordar el significado de la palabra democracia y aceptar que constituyen una pequeña minoría que no ha recibido de nadie, salvo de ellos mismos, el mandato de liderar a los demás.

El mundo no quiere ni necesita su “liderazgo”, pero sí necesita que actúen de manera “responsable” para enfrentar el desastre climático que han creado. El mundo necesita que hagan coincidir sus palabras con hechos.

DÍA INTERNACIONAL POR LOS MANGLARES

- 26 de julio, Día de la Defensa del Manglar

La organización MAP (Mangrove Action Project) trabaja desde 1992 para detener la destrucción desenfrenada de los manglares del mundo, amenazados por un modelo de desarrollo insustentable. Hoy en día, industrias como la producción de carbón y petróleo, el turismo y el desarrollo urbano, las canchas de golf y las marinas representan una amenaza para los manglares. Aún así, el mayor peligro proviene del cultivo industrial del camarón, que es el que más contribuye hoy en día a la desaparición de los manglares. Las granjas camaroneras se ubican a lo largo de las zonas costeras para conveniencia de los inversores pero en detrimento de los humedales costeros, donde se talan los mangles para abrir el paso a miles de hectáreas de estanques de cría. En la mayoría de los casos los camarones están destinados a la exportación; en cuanto a los estanques, dejan de utilizarse a los pocos años debido a problemas de contaminación y enfermedades que afectan al camarón de criadero. Como un testamento revelador de esta industria anti-económica, actualmente hay más de 250.000 ha de granjas camaroneras abandonadas en todo el mundo, y más de 1 millón de hectáreas de importantes humedales costeros productivos, incluidos los manglares, fueron devastadas con el propósito de obtener un marisco de lujo para el disfrute de las naciones ricas. Pero ¿a qué costo?

Más de la mitad de los manglares del mundo se han perdido a causa de estas presiones de un “desarrollo” corto de miras. Sólo quedan alrededor de 15 millones de ha de manglares, de los 36 millones que se calcula existían originalmente, y la mayor parte de ellos están degradados y en malas condiciones. Cada año se talan unas 150.000 ha de manglares, o más. Esta pérdida representa una amenaza seria para el futuro de la vida en este planeta por varias razones importantes.

Por ejemplo, los bosques de mangles desempeñan un papel vital para la biodiversidad costera, actuando como vivero para los peces jóvenes y proporcionando gran parte del detrito que pasa a integrar la cadena alimenticia costera de la cual se nutre un gran número de seres vivos. Los pantanos de mangle cumplen una función importante como puntos de descanso y alimentación para las aves migratorias. Los manglares también ayudan a mantener los suelos costeros en su lugar, evitando la erosión y la sedimentación que pueden sofocar las praderas de hierba marina y los arrecifes de coral, ya amenazados por la contaminación y el calentamiento global. También filtran los contaminantes de las tierras altas, manteniendo así más pura el agua de mar. Los propios manglares almacenan enormes cantidades de carbono en sus hojas y ramas, así como en los suelos bajo sus raíces. Cuando se talan los manglares, grandes cantidades de carbono pasan a la atmósfera, contribuyendo aún más al calentamiento global.

Los bosques de mangle también protegen a las comunidades locales de los vientos huracanados y del fuerte oleaje. Muchos científicos creen que los manglares proporcionaron una protección importante contra el tsunami de 2004 del Océano Índico, que golpeó las costas de Asia y África Oriental. Quienes vivían detrás de manglares saludables tuvieron muchas más posibilidades de sobrevivir al embate de las olas del tsunami.

Por estas y muchas otras razones, MAP se unió en 2003 a otras organizaciones del Sur global para promover el 26 de julio como el Día de la Defensa del Manglar.

Antecedentes del Día de la Defensa del Manglar

La idea de realizar este llamado a la acción surgió durante el taller “En manos de los pescadores” (In the Hands of the Fishers – IHOF), que tuvo lugar a comienzos de 2003 en Fortaleza, Brasil. Los participantes provenían de Brasil, Ecuador, Honduras, Colombia y Guatemala. El IHOF se enfocó principalmente en los temas relativos a los manglares y las lagunas saladas amenazados por la expansión de la industria camaronera, así como en las estrategias necesarias para detener el avance sostenido de dichos emprendimientos. Durante el taller se propuso la organización de una campaña internacional que involucrara a los pescadores locales, donde representantes de diversas ONG y comunidades locales organizarían sus propios eventos el mismo día, vinculando de esta forma esos eventos locales entre sí para lograr un movimiento o acción internacional.

El 26 de julio fue el día elegido por el significado que ya tiene gracias al movimiento latinoamericano dirigido por Red Manglar. Esta fecha fue denominada el “Día del Manglar”, conmemorando el día de 1998 en que un activista de Greenpeace de Micronesia, Hayhow Daniel Nanoto, murió de un paro cardíaco mientras participaba en una protesta masiva organizada por FUNDECOL y Greenpeace Internacional. Durante esta acción, la comunidad de Muisne se unió a las ONG para desmantelar un estanque de cría de camarones establecido ilegalmente, en un intento por volver esta zona de manglar a su estado anterior. Desde la muerte de Hayhow, FUNDECOL y otras organizaciones han conmemorado este día como una fecha para recordar y emprender nuevas iniciativas para salvar al manglar.

Sin un barco de Greenpeace en el horizonte, decidimos que los pescadores formaran flotillas para protestar contra la expansión destructora de las granjas camaroneras en sus regiones. Este llamado tuvo respuestas positivas de Bangladesh, India, Malasia, Ecuador, Brasil, Colombia, México, Honduras, Nigeria, Europa y EE.UU. Y parece que está tomando forma a nivel mundial la idea de una conmemoración anual del 26 de julio como Día de la Defensa del Manglar, donde algunos grupos organizarán talleres y otros la plantación de árboles del manglar, limpieza de humedales, protestas y redacción de cartas.

¡Un nuevo Llamado a la Acción el 26 de julio de 2009!

MAP desea brindar su apoyo total a los planes y acciones de todos los miembros de las redes para lograr una Acción Global el 26 de julio de 2009. Su equipo de trabajo y voluntarios del área de Seattle concurrirán a la 35ª edición del Annual Ballard Seafood Fest, el 25 y 26 de julio, aprovechando este evento popular de Seattle para hablar con los consumidores sobre los problemas del cultivo de camarones en el mundo. MAP promoverá nuestra Campaña de Conciencia Pública “Shrimp Less, Think More” (menos camarón, más reflexión).
Los invitamos a ustedes y/o a sus organizaciones a unirse a todos nosotros en una protesta mundial contra la desaparición de los ecosistemas de manglares y de las comunidades locales que dependen de ellos para su vida y su sustento. Les rogamos que envíen a MAP sus planes de acción, locales o regionales, que tengan como objetivo conmemorar este Día Internacional en Defensa del Manglar. MAP quisiera compartir nuevamente sus planes e ideas con la red global. ¡Esperamos recibir pronto sus noticias a este respecto!

Por más detalles, sírvase dirigirse a ten.supmylo@paevorgnam.

- Ecuador: las mujeres del manglar construyen memoria y futuro con su lucha

En mayo de este año, en el cantón Muisne, provincia de Esmeraldas, se celebró el encuentro denominado “Primer Encuentro: mujeres del ecosistema manglar del Ecuador, nuestros sueños, nuestros derechos, nuestros retos”.

Más de 80 mujeres compartieron este encuentro, en el que contaron sus historias como mujeres que enfrentan discriminación y violencia. Integrantes de la REDMANGLAR Internacional llegaron desde Colombia, Honduras, México y Brasil para reconstruir la memoria histórica de las mujeres que siempre han estado en el manglar.

Concheras, cangrejeras, pescadoras, ostioneras, almejeras, mujeres compañeras del manglar en su trabajo, en su lucha por sobrevivir, reflexionaron de dónde vienen y hacia dónde van. Pintaron sus historias y la biodiversidad del manglar, pintaron sus familias trabajando y jugando en el manglar. También pintaron la destrucción y la reforestación. Pintaron cómo querían que fuera la vida en el futuro. Conversaron, se hicieron más amigas, empezaron a encontrarse con otras mujeres como ellas y a encontrarse con ellas mismas.

Contaron que el manglar es la industria natural que les da todo, que cuando se pierde el ecosistema se va perdiendo la vida. “Tengo la certeza de que cuando León Febres Cordero era el presidente comenzó aquí la tala del manglar. Ahí vinieron los camaroneros a destruir el manglar. Presidente que entra, presidente que apoya a los camaroneros y se olvida de los pobres”, testimonió una de las participantes.

La memoria

Cada una dibujó su historia. Las mujeres de la provincia de Esmeraldas se retrataron con el cigarro en la boca, que lo fuman para ahuyentar a los mosquitos cuando están recolectando la concha en el manglar. Se retrataron en medio de la exuberancia del ecosistema manglar, pero también en medio de la devastación provocada por la acuacultura industrial del camarón. Contaron que ya casi no hay concha y que aunque la cuidan mucho, es necesario hacer más; que reforestaron junto con los compañeros de otras organizaciones, con estudiantes, con voluntarios y que derribaron los muros de las piscinas camaroneras que llegaron a invadir y a destruirles todo.

En la provincia de Manabí, las mujeres luchadoras del manglar están en dos zonas, en el estuario del río Portoviejo y en el estuario del río Chone. Con la llegada de las camaroneras se perdió el manglar. “Nosotras éramos pescadoras, también nos dedicábamos a la agricultura de ciclo corto. Cuando llegaron las camaroneras nos dedicamos a recolectar larva para los laboratorios, pronto se acabó todo. Ahora nosotras no tenemos trabajo, algunas se emplean descabezando el camarón de las piscinas, pero es duro, pagan poco y no es permanente”.

Recordaron que la presencia del Fenómeno del Niño antes era una bendición porque con él venía abundancia de la pesca y se renovaba la tierra. “Desde que se perdió el manglar cada Fenómeno del Niño es una desgracia que llega a nuestra comunidades, todo se inunda, se pierden las casas, la gente tiene que salir de su territorio”, lamentaron.

En Guayas aún existe una gran diversidad de peces, langostinos, moluscos; aún existe una gran extensión de manglar que está siendo protegido por las comunidades. Pero existen zonas como la isla Puna, donde las camaroneras acabaron con el manglar y muchas concheras y cangrejeras ya no tienen trabajo, ni de dónde sacar su alimento.

En la provincia de Santa Elena el manglar está casi exterminado, pero cuenta con arrecifes y bancos de peces que abastecen de forma exuberante la pesca. Sin embargo, estos recursos deben ser protegidos, ya que la pesca industrial está acabándolos y al no existir el manglar, que es “la maternidad” de los peces, esta riqueza pronto desaparecerá.

La lucha

“Hemos sido amenazadas, hemos sido agredidas, los camaroneros nos han disparado y nos han echado perros para sacarnos del manglar y quedarse con este patrimonio que es nuestro. Pero aquí estamos dispuestas a dar la vida si es necesario, porque aquí nacimos, aquí está nuestra historia, nuestros cuentos, nuestro trabajo, nuestra comida, nuestras familias y amigas”, expresaron las mujeres de Esmeraldas.

Y las mujeres cantaron:

Quisiera que el presidente me pudiera escuchar
Lo que yo en estos momentos le quiero manifestar
Oiga señor presidente tenga un poquito de piedad
Que los manglares son nuestros no son de la autoridad

Ay Hasta cuándo y hasta cuando
Hasta cuando por favor
Hasta cuando le hacen daño
A los pobres del Ecuador

“Nuestro sueño es ver el fruto de nuestros esfuerzos y recuperar el territorio perdido. Terminar las marchas, ganar esta lucha y gozar de lo que tenemos y de lo que recuperemos”, fue la expresión de las mujeres de Manabí.

El futuro

El sueño de las mujeres es que la concha vuelva. Que nuevamente existan esas 1.000 o 1.500 que existieron hace unos veinte años atrás. Quieren volver a trabajar recolectando la concha, recolectando el cangrejo. Sueñan que se recuperen muchas especies que les sirven para alimentarse, que los hombres sigan siendo mangleros, que hagan el carbón, que hagan las casas con la madera de mangle, que el manglar vuelva a ser lo que fue antes, y la vida de ellas también.

También es cierto que no todo son rosas, que la vida del manglar es dura. “Con mi trabajo de conchera yo les he dado a mis hijos estudio, para que ellos no sean lo que yo soy, sean algo mejor. Me siento orgullosa que mis hijos los saqué adelante. No los dejé como yo, que mi madre no me dio un estudio”, dijo Jacinta, delegada del cantón Muisne, provincia de Esmeraldas. Y este pensamiento desató una fuerte polémica entre las participantes.

Eso es “porque somos discriminadas, somos tratadas como cholas de forma despectiva, porque nuestro trabajo no es valorado. Una mujer que va al manglar no es respetada como una que tenga una profesión de la universidad y por eso pensamos que nuestros hijos tienen que estudiar para que sean respetados, para que no sean discriminados. Porque así es la sociedad, no entiende lo maravilloso que es el manglar, que nosotros les damos de comer con nuestro trabajo. No somos nosotras las que despreciamos y renegamos de nuestro manglar, son los presidentes del país, los poderosos, los que lo destruyen, lo que no entienden”, reflexionaron las mujeres de la provincia de El Oro.

“Queremos levantar la voz para que nos escuchen y respeten en cada uno de nuestros ideales. Conservar lo nuestro y que con el trabajo de las mujeres y los hombres podamos solventar la economía de nuestras familias. Queremos ser admiradas, por el esfuerzo que hacemos defendiendo nuestro territorio y que se acabe la discriminación para que nuestros hijos hereden el manglar y se sientan orgullosos y orgullosas de ser del manglar. Soñamos que se termine la violencia en nuestras comunidades, que nos dejen caminar y correr en nuestro manglar trabajando con dignidad”, afirmaron.

“Mi sueño del manglar es sembrarlo y que se cultive para que mis nietos y bisnietos produzcan y cuenten la misma historia que yo les estoy contando ahora. Que sean parte del manglar como yo soy parte ahora”, dijo Rosa, cangrejera de 52 años de edad, que ha enseñado a toda su generación a ganarse la vida cangrejeando en el manglar y a amarlo.

El encuentro terminó con una afirmación de la vida. En cincuenta hectáreas de manglar ocupadas y destruidas ilegalmente por el señor Ilario Patiño con piscinas camaroneras, las mujeres reforestaron dos hectáreas de manglar en el sitio Casa Vieja, en la parroquia Bolívar.

Se solicitó al Ministerio del Ambiente que procediera a registrar el área y se espera que en esta ocasión se garantice la reforestación realizada por las mujeres y que el área vuelva a vivir.

Extractado y editado de la narración del encuentro, enviado por C-CONDEM - Corporación Coordinadora Nacional para la Defensa del Ecosistema Manglar, ce.gro.mednocc@seralgnam, www.ccondem.org.ec

– Los manglares de África están desapareciendo y con ellos los medios de vida de su gente

Los manglares constituyen “un medio original y un entorno de vida específico” compuesto por árboles con raíces aéreas que se hunden en el fango pero también por otros arbustos y especies arbóreas que se distinguen por sus características propias de adaptación al medio, principalmente a la salinidad del agua. Estas explican la ubicación particular de cada especie dentro del ecosistema, denominada zonación.

Desde Mauritania hasta Angola, las raíces aéreas de las Rhizophora del manglar forman un refugio privilegiado para el desove de los peces y tienen una función importante en la vida económica de los pobladores de los alrededores, para quienes los manglares representan una importante fuente de ingresos y de medios de subsistencia: la pesca, la leña y la madera, diversos alimentos, mariscos, medicamentos, el turismo, etc. Además, el manglar regula las mareas y la sedimentación y constituye une barrera protectora contra las tormentas y la erosión de la costa.

Los científicos estiman que las tres cuartas partes de los peces que se pescan en el trópico dependen de los manglares para su alimentación o su hábitat. Los manglares sirven de desovaderos y criaderos tanto a peces costeros como a especies de alta mar.

La parte septentrional de Camerún se caracteriza por la abundancia de estuarios y manglares a través de los cuales los ríos desembocan en el mar. Estos manglares funcionan, entre otras cosas, como zonas de reproducción y desove de varias especies de peces y crustáceos.

En Senegal, el manglar contribuye en mucho al bienestar social, económico y cultural de los habitantes del delta del Saloum, y es también un lugar de tránsito importante para numerosas especies de aves migratorias. Estas riquezas le han valido el estatus internacional de Patrimonio mundial de la UNESCO y de sitio Ramsar. “Una diversidad biológica única, hoy amenazada por la desaparición de ese hábitat natural”, dice Abdoulaye Diamé, de la ONG WAAME (West African Association for Marine Environment).

En Kenya, los manglares cubren unas 54.000 hectáreas y se encuentran principalmente en los distritos de Lamu y Tana River. Son una fuente directa de numerosos productos leñosos y no leñosos. Los productos leñosos son la leña, la madera de construcción y el carbón, que se utilizan tanto en zonas urbanas como rurales. La madera de construcción se clasifica en diferentes categorías según su destino. También sirve para hacer mástiles de barcos y trampas para peces. Los troncos más grandes de los mangles se usan para construir los barcos tradicionales. Sus raíces aéreas sirven de flotadores en las redes de pesca. Los pobladores locales también hacen muebles con madera de mangle. Entre los múltiples productos no leñosos del manglar figuran la miel, los medicamentos, los cangrejos y los peces que allí se encuentran.

Nigeria posee la mayor superficie de manglares de África: 7.386 km2 (PNUMA-WCMC, 2007). Las ocho especies de mangles que existen en la zona están allí presentes. Los pobladores realizan varias actividades económicas: pesca, cría de camarones, producción de madera, turismo, etc. El manglar del delta del Níger está considerado como una zona de conservación sumamente importante de la costa occidental de África debido a su extraordinaria diversidad biológica. Los estudios han demostrado que casi el 60% de los peces del golfo de Guinea se reproducen allí.

A pesar de todo esto, la extensión de los manglares disminuye sin cesar. Se trata de un ecosistema bastante vulnerable que ya está muy degradado en las zonas más alejadas de la costa. Entre 1980 y 2006 desapareció la cuarta parte de los manglares del oeste de África, y se prevé que la pérdida será del 70% si no se toma ninguna medida.

La degradación de estos ecosistemas tiene un considerable impacto sobre la diversidad biológica y las actividades socioeconómicas que de ellos dependen: desaparición de especies animales y vegetales, pobreza, desempleo, conflictos, enfermedades nutricionales, etc.

Es importante señalar dos procesos diferentes que afectan a los manglares. En algunos casos se observa su destrucción total originada por la tala comercial, por su sustitución por piscinas para la cría del camarón o por su eliminación por parte de emprendimientos turísticos a gran escala. Sin embargo, en otros casos se produce la degradación del ecosistema manglar –aunque muchos mangles puedan permanecer en pie- debido a la explotación petrolera. Es decir, que la instalación de oleoductos y de sistemas de exploración sísmica provoca deforestación, mientras que los derrames de petróleo, los vertederos de residuos y la quema de gases contaminan el agua, el suelo y el aire, afectando gravemente al ecosistema en su conjunto.

En Kenya, por ejemplo, entre 1983 y 1993 el puerto de Mombasa y las aguas que lo rodean recibieron 391.680 toneladas de petróleo derramado, lo cual afectó a los manglares de Puerto Ritz y las ensenadas de Makupa. Algo similar ocurre en Camerún, donde la contaminación provocada por la industria petrolera amenaza la integridad de los manglares.

Sin embargo, el caso más grave de degradación del manglar a gran escala resultante de la explotación petrolera ocurre en el delta del Níger en Nigeria, donde gigantes petroleros como Shell y Chevron extraen del delta del Níger miles de millones de dólares en petróleo, dejando a cambio destrucción social y ambiental.

En cuanto al proceso de deforestación, la superficie de los manglares nigerianos pasó de 9.990 km2 a 7.386 km2 entre 1980 y 2006.

En materia de degradación, se han producido grandes derrames de petróleo, que han devastado los ríos, han matado los manglares y la vida costera, han afectado la salud y los medios de vida de millones de habitantes del delta del Níger. Como denuncia Amnesty Internacional, las comunidades locales sólo tienen “la tierra y los cursos de agua naturales para vivir y alimentarse. Hoy están obligadas a usar agua contaminada para beber, cocinar y lavarse, y a comer peces contaminados por toxinas. Han perdido sus tierras agrícolas y sus ingresos debido a los derrames de petróleo, y el aire que respiran apesta a petróleo, a gas y a otros contaminantes” ( http://www.amnesty.org.au/action/action/21246/).

Los países del Norte dicen estar preocupados por el hambre en África. Sin embargo, sus empresas petroleras continúan destruyendo las fuentes de alimentación de millones de africanos, cuyas vidas dependen de la salud de los manglares. Más que recibir sobrantes de alimentos, lo que las comunidades del manglar realmente necesitan es que esas empresas se vayan y que antes de hacerlo les restauren los manglares que destruyeron. Volverá así su verdadera riqueza y atrás quedará el hambre que hoy sufren.

Compilación de documentos enviados por Abdoulaye Diame, WAAME, correo electrónico moc.oohay@emaideyaluodba: « La mangrove, la sécheresse et le sacré” » Abdoulaye Diame ; « Article sur la situation des forêts au Cameroun », Moudingo E. Jean Hude, Cameroon Wildlife Conservation Society ; « Sénégal. Lutte contre la dégradation des écosystèmes de mangroves » ; “Conservation and management of mangrove forests in Kenya”, Joseph K. S. Lang’at y James G. Kairo, Mangrove Reforestation Program ; “One wrong step too many: FAO supports unsustainable shrimp farming and food insecurity investments in Nigeria”, Centre for Environment, Human Rights and Development (CEHRD) ; « Biodiversité du Parc marin des mangroves en République démocratique du Congo : faune ichtyologique », Réseau africain pour la conservation de la mangrove (RAM), y “Niger Delta's Mangrove Communities Threatened By Continued Gas Flaring”, Acción de Alerta del MAP.

– Bangladesh: la destrucción de los manglares por las granjas camaroneras genera inseguridad ambiental y alimentaria

La cría industrial de camarones ha sido una de las principales causas de la destrucción de los pantanos de mangles de Bangladesh – alrededor de un 45% – y ha provocado la pérdida de la diversidad biológica así como de los medios de vida de millones de personas que dependen del manglar.

En los años 90, el Banco Mundial promovió y financió la cría del camarón como parte del impulso a las políticas orientadas a la exportación. Un artículo de A. K. M. Enayet Kabir (1) analiza que “Con el propósito de ganar divisas, muchas personas ahora están asociadas a la cría del camarón, la cual desde los años 80 ha cubierto una vasta zona de los distritos costeros de Bangladesh.”

Y se pregunta: “¿Hemos evaluado hacia dónde van las valiosas divisas y quiénes son los beneficiarios? Las divisas generadas a expensas de la salud de la gente y de efectos adversos sobre nuestros Sunderbans no benefician al pueblo.”

En un país que tiene la tasa de desnutrición más alta de la región Asia-Pacífico, que afecta al 70-80% de los niños, y que registra un índice de mortalidad infantil muy alto, la pesca de subsistencia podría ser un recurso para paliar este problema. Sin embargo, el cultivo del camarón ha contaminado el ambiente dentro y en los alrededores de los Sunderbans, socavando la base misma de la cría del camarón al distorsionar el ciclo natural de los nutrientes.

La destrucción de los manglares también ha implicado la pérdida de protección contra los ciclones. Un estudio realizado por J. Martinez-Alier (2) comenta que “Es común en los hogares del Norte ver lo que pasa la televisión sobre las inundaciones y la pérdida de vidas en Bangladesh, pero en general no se las vincula con los manglares destruidos, las granjas camaroneras abandonadas y la débil defensa costera contra los ciclones. La deforestación ha dejado a esta zona muy vulnerable a la entrada del mar cuando azotan los ciclones. Por consiguiente, a la falta de seguridad alimentaria como consecuencia de que los manglares quedan cercados para producir productos de lujo para exportación, como los camarones, se agrega la inseguridad ambiental.”

Una investigación realizada por la Universidad de Delhi de la India y la Universidad de Duke de Estados Unidos estudió las muertes relacionadas con las tormentas del enorme ciclón que en 1999 borró pueblos enteros de la costa Este de la India. Dicho estudio (3) descubrió que las aldeas protegidas por los manglares sufrieron un número de muertes significativamente menor que las aldeas menos protegidas.

Los resultados de la investigación se hicieron públicos en abril de este año, justo un mes antes de que el ciclón Aila matara a unas 90 personas en los distritos del sudoeste de Bangladesh e inundara alrededor del 40 por ciento de las granjas camaroneras de la región de Khulna, el 26 de mayo. (4)

Trágicamente, se sustituyeron los manglares por la producción de camarones, en busca de un ingreso monetario, pero ahora la gente quedó en bancarrota y sin protección ni comida.

(1) “Ecological impact has to be assessed”, A. K. M Enayet Kabir, http://www.ecologyasia.com/news-archives/2002/may-02
(2) “The environmentalism of the poor”, J. Martinez-Alier, Reino Unido, http://www.wrm.org.uy/actors/WSSD/alier.pdf
(3) “Mangrove Forests Save Lives In Storms, Study Of 1999 Super Cyclone Finds”, ScienceDaily, 21 de abril de 2009, http://www.sciencedaily.com/releases
(4) “Blow to shrimp cultivation”, The New Nation, http://nation.ittefaq.com

COMUNIDADES Y BOSQUES

- Brasil: ley permite avance del agronegocio en la Amazonía

El 9 de julio de 2008 el Senado brasileño aprobó una disposición del Poder Ejecutivo denominada “medida provisoria”, sujeta a la aprobación posterior del Poder Legislativo. La disposición ha sido duramente cuestionada por ambientalistas y diversos sectores políticos y sociales de Brasil, incluida la ex ministra de Medio Ambiente y ahora senadora, Marina Silva.

En las décadas de 1970 y 1980, los gobiernos dictatoriales de la época brindaron incentivos para la ocupación de la Amazonía, beneficiando a grandes latifundistas que se consolidaron en la región y se apropiaron ilegalmente de tierras públicas. Esa situación generó conflictos con las poblaciones tradicionales de la zona.

Ahora, en una tercera tentativa, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva promulgó el pasado mes de junio la “medida provisoria” devenida en ley (Proyecto de Ley de Conversión 09 (PLV)), que había sido aprobada por la Cámara de Diputados y posteriormente la de Senadores. Con ello se regulariza la situación de los ocupantes de más de 67 millones de hectáreas de tierras estatales en la Amazonía Legal – que comprende un total de 508,8 millones de hectáreas en los estados de Acre, Amapá, Amazonas, Mato Grosso, Pará, Rondônia, Roraima y Tocantins y parte de Maranhão.

Hasta ahora la concesión de tierras públicas –del Instituto Nacional de Colonización y Reforma Agraria- a particulares, para uso rural y sin exigencias como la licitación, estaba limitada a unidades de 500 hectáreas. La medida legal amplía ese límite a 1.500 hectáreas. Esto implica que la regularización dejará un 72% de las tierras bajo el control de apenas un 7% de ocupantes, quienes podrán explotarlas en agricultura y ganadería y pasados tres años podrán ponerlas en venta.

Las denuncias apuntan a que la medida no distingue entre los ocupantes campesinos, generalmente familias que se han establecido para trabajar la tierra (“posseiros”) y los especuladores – tanto quienes tratan de conseguir la mayor cantidad de parcelas para luego revenderlas a mayor valor, como quienes se han adueñado de la tierra por medio de la violencia, generalmente grandes terratenientes (“grileiros”) que crean una verdadera mafia y fraguan documentos y títulos de propiedad en zonas signadas por los conflictos y la deforestación.

Para Marina Silva, la medida “va a significar un proceso de privatización de tierras, de legalización de áreas de las que se han apropiado ilegalmente [Grilagem: Escrituración y apropiación ilegal de tierras] y con graves perjuicios para el Plan de Combate a la Deforestación de la Amazonía”.

Ariovaldo Umbelino, Profesor de Geografía Agraria de la Universidad de São Paulo explica: “Otra parte de esta ingeniosa operación para legalizar la apropiación de tierras del Instituto Nacional de Colonización y Reforma Agraria (INCRA) en la Amazonía Legal, fue el aprovechamiento del aumento de la deforestación en aquella región para realizar el nuevo registro de los inmuebles. Éste va a permitir que los “grileiros” que todavía no tenían registradas las tierras públicas de las que se apropiaron hasta diciembre de 2004, pudiesen ahora hacerlo, y así habilitarse para ‘comprar’ las tierras de las que se apropiaron sin licitación. Además, la noticia en el sitio web del INCRA sobre el nuevo registro, de forma absurda ya reconoce a los “grileiros” como “posseiros”: ‘Los dueños o “posseiros” de áreas mayores a cuatro módulos fiscales [...] tendrán que llevar al Incra, entre el 3 de marzo y el 2 de abril, documentos que comprueben la titularidad o posesión pacífica de la tierra, plantas y memorias descriptivas con la correcta ubicación geográfica de los inmuebles rurales’ ( http://www.incra.gov.br). Es preciso aclarar que los predios de las familias campesinas en la Amazonía ocupan menos de 100 hectáreas y que los cambios previstos en la nueva legislación sirven para regularizar las apropiaciones de tierras públicas que corruptos funcionarios del INCRA ‘vendieron’ ilegalmente al agrobandolerismo.” (1)

Según Nilo D’Ávila, de Greenpeace, “La tendencia es que las mayores y mejores propiedades queden en manos de especuladores inmobiliarios y de personas que no viven de esta tierra. La puerta de especulación inmobiliaria de tierras en la Amazonía está totalmente abierta. Y el resultado de la suma de esas acciones que el gobierno está provocando va a ser igual a deforestación”.(2)

Vale la pena señalar que la presión de las organizaciones sociales y ambientales logró cierta mejora a la medida original. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva introdujo un veto al artículo 7 de la disposición, que permitía la transferencia de tierras a personas jurídicas o individuos que no habitaran en la región y administraran sus terrenos mediante testaferros. No obstante, las críticas apuntan a que puede no resultar significativo en la medida que los especuladores no suelen actuar como personas jurídicas.

La reforma agraria, que trabajosamente la movilización popular logró introducir en la constitución, está siendo “bloqueada”, según palabras del coordinador del Movimiento de Trabajadores Sin Tierra (MST), Joao Stedile. Denunció que "tierras que deberían ser utilizadas para la reforma agraria, se están destinando a empresas extranjeras para la producción de eucaliptus, soja, ganado y agrocombustibles". (3)

Según datos del MST “En 1992, había poco más de 19 mil latifundistas con más de 2 mil hectáreas, que en conjunto sumaban 121 millones de hectáreas. En 2003, el número de esas propiedades aumentó a 32 mil (casi duplicó), y el área total suma 132 millones de hectáreas. En 11 años, 12 millones de hectáreas fueron apropiadas por el latifundio”. (4)

Son momentos en que se está produciendo un peligroso proceso mundial de apropiación de tierras por parte del agronegocio, en respuesta a las crisis financiera y alimentaria. Gobiernos y empresas se han lanzado a la búsqueda de tierras agrícolas en Asia y África, pero también están llegando a América Latina. China y Arabia Saudita están interesadas en adquirir tierras agrícolas en Brasil. Según el INCRA hay cuatro millones de hectáreas brasileñas registradas a nombre de extranjeros y más de la mitad se encuentra en la Amazonía.

Por el momento la fiscal general de la república interpuso ante el Supremo Tribunal Federal del Brasil un recurso de inconstitucionalidad contra la nueva ley de regularización de las tierras invadidas en la región amazónica, por considerar que es violatoria del artículo 188 de la Constitución que dispone que “el destino de tierras públicas y fiscales será compatibilizado con la política agrícola y con el plan nacional de reforma agraria”. Y más, afirma también en su artículo 191 que “aquel que, no siendo propietario de inmueble rural o urbano, posea como suyo, por cinco años ininterrumpidos, sin oposición, área de tierra, en zona rural, no superior a cincuenta hectáreas, volviéndola productiva mediante su trabajo o el de su familia, teniendo en ella su vivienda, adquirirá su propiedad.

No todo está dicho. La resistencia continúa.

(1) “A farra da legalização da grilagem”, 03/04/2008, Ariovaldo Umbelino, http://www.mst.org.br/
(2) “MP da Grilagem beneficia poucos posseiros com muita terra na Amazônia”, 06/07/2009, Brasil de fato, http://www.brasildefato.com.br
(3) “MST denuncia que está “bloqueada” la Reforma Agraria en Brasil”, AMARC-ALC, http://www.agenciapulsar.org
(4) “MST evalúa Reforma Agraria en el país y critica al agro negocio”, 14/04/09, Adital, http://www.adital.com.br

- República Dominicana: el pueblo dice ¡No a la cementera en Los Haitises!

El Parque Nacional Los Haitises, ubicado entre las provincias Samaná, Monte Plata y Hato Mayor, ha sido área protegida desde 1976. Por sus características de bosque húmedo y muy húmedo subtropical no solo constituye un importante santuario para la flora y la fauna nativa del país sino que también es considerado como la muestra más importante de manglar caribeño.

Pero su importancia no solo se debe a sus cualidades como ecosistema que alberga una biodiversidad y recursos culturales extraordinarios y únicos – que lo convierten en hábitat de numerosas especies endémicas en peligro de extinción (como Plagiodontia aediu, Amazona ventralis, Solenodon paradoxu) – sino que tiene una condición muy especial por sus aguas subterráneas que se comunican entre sí, constituyendo una insustituible reserva de agua. En este lugar se encuentran los ríos Payabo, Los Cocos y Naranjo y es también donde desagua el Yuna.

Otro aspecto importante de Los Haitises es su sistema de cavernas donde se han hallado pictografías y petroglifos realizados por los remotos antepasados de la isla y que convierten a la zona en un patrimonio de la humanidad. Para mucha gente que la visita, la experiencia es la de un viaje a la prehistoria.

Pero en la actualidad todos esos valores están en riesgo ya que esa zona sería utilizada para la fabricación de cemento. En el lugar donde confluyen las principales fuentes acuíferas de la zona se está construyendo una cementera, patrocinada por el Consorcio Minero Dominicano.

El proyecto no solo arruinaría la zona de Los Haitises sino que afectaría la salud de los habitantes de los pueblos vecinos, contaminando los ríos Comate, Yabacao, Cambita, Brujuela (subterráneo), Almirante, Casuí, Boyá, Socoa y Sabita, que abastecen más del 50% del agua que se utiliza en el país.

Es por eso que los pobladores de la zona han manifestado su rechazo total al proyecto, cuyos impactos afectarían además la producción de alimentos agrícolas, principal fuente alimenticia de esos poblados. El Movimiento Campesino de la Comunidades Unidas (MCCU) inició una demanda judicial exigiendo que se revoque la licencia que permite la instalación de la cementera. Esto implicó la suspensión de las obras hasta tanto termine el conflicto judicial.

No obstante, por otro lado, el pasado 30 de junio la mayoría de los habitantes de Gonzalo que estuvieron dirigiendo y participando en la lucha por la preservación de Los Haitises y contra la instalación de la cementera, recibieron notificaciones de desalojo, con plazo de 10 días, de los solares que ocupan, alegando que son propiedad del Consejo Estatal del Azúcar (CEA). De acuerdo a las informaciones de las y los campesinos, estas tierras les fueron cedidas y muchos poseen los documentos de préstamo del CEA, mientras que otros iniciaron hace más de 8 años el proceso de solicitud con la institución para la obtención del titulo. Señalan que se trata de una clara actitud de represión por haber participado de manera activa en la lucha contra la cementera.

Además del movimiento campesino existe un movimiento de jóvenes que guitarras en mano acamparon el 16 de mayo en el Distrito Municipal Gonzalo, Provincia de Monte Plata. Desde entonces atraen la atención del país y del mundo cibernético. Desmienten el socorrido mito de que la juventud “no ta de na”. El próximo 19 de julio realizarán un concierto multitudinario con una veintena de los más importantes artistas del país.

El campamento de Gonzalo ha sido una campanada, una acción efervescente, un grito, una esperanza de mucho juego por jugar. Con guitarras y códigos cifrados, los movimientos juveniles contemporáneos practican nuevas formas de movilización social, otras estrategias para enfrentar los desmanes de quienes en nombre del progreso conducen el país al pasado.

El campamento de Gonzalo se convierte en lugar de resistencia, de encuentro y articulación libre para rechazar la cementera de quienes, creyéndose dueños del país, quieren instalarla a sangre y fuego en los Haitises.

Desde el Campamento en Solidaridad con Los Haitises, exigen la derogación de la concesión que permite al Consorcio Minero Dominicano la construcción de la cementera en las cercanías de Los Haitises y exigen que la tierra otorgada al Consorcio sea devuelta a l@s campesin@s que fueron desalojad@s.

Artículo elaborado en base al material enviado por Alexander Mundaray, integrante del movimiento campesino MCCU, e información disponible en la pagina web Ecolucha http://www.ecolucha.org/ y Clave Digital http://clavedigital.com.do/

- India: Declaración de Dehradun de los pueblos del bosque

Entre el 10 y el 12 de junio, adivasis, trabajadores forestales y otros moradores del bosque de 16 estados de la India realizaron una conferencia sobre “Resistir la mercantilización de los bosques; establecer el control comunitario sobre los Bosques”. Luego de discusiones y debates, se unieron en un fuerte mensaje llamado “Declaración de Dehradun 2009”.

Los bosques, sus pueblos y el mundo entero estamos inmersos en algo más que una crisis: “ Esto no es una crisis común. No es meramente una crisis climática ni eso que ustedes llaman el monstruo auto-engendrado y magnificado de la crisis financiera. Creemos que es una crisis de civilizaciones.” Por un lado está la civilización que “ se basa en ideas de poder, territorios, fronteras, ganancias, explotación y opresión”. Una civilización que intenta “ ser dueña de todo, incluso de la Madre Naturaleza. Esto es lo que mueve a su civilización. Necesitan este mundo de opresión y explotación para sobrevivir y sentirse bien.” Del otro lado encontramos la civilización del resto de la gente. Quienes no ven al mundo puramente en términos de mercancía. Gente como los pueblos de los bosques de todo el mundo que declaran: “Nosotros, los pueblos de los bosques del mundo – que vivimos en ellos, sobreviviendo gracias a sus frutos y plantas, cultivando los campos jhoom (1), recultivando las tierras boscosas, deambulando con nuestros rebaños – hemos ocupado estas tierras desde tiempos remotos. Por tanto anunciamos, de forma clara, unida y solidaria, que no hay duda alguna sobre el futuro: nosotros somos los bosques y los bosques son parte de nosotros, y nuestra existencia es mutuamente dependiente. La crisis que los bosques y el medio ambiente enfrentan hoy, no hará más que intensificarse sin nosotros.”

Se trata de un conflicto fundamental: “ Si quieren incluirnos en su mundo ‘civilizándonos’, elegiremos tranquilamente permanecer incivilizados. Llámennos salvajes, ¡no nos importa! Entre estos árboles, esta agua, este aire y los demás seres del bosque, hemos aprendido a vivir en libertad, sin fronteras, pero sin olvidar nunca las fronteras de la naturaleza.”

La Declaración de Dehradun se transforma en la voz de los pueblos indígenas del bosque que hablan fuerte: “ Nosotros, entonces, rechazamos sus leyes no naturales, su civilización de tiranía y crueldad. ¿Qué libertad? No vemos libertad alguna en ser desterrados de nuestros bosques, separados del agua, la tierra, los campos, los árboles, el aire y los animales, de los ecosistemas a los cuales pertenecemos. ¿Qué clase de libertad es esa que no deja de encadenar a sus hermanos y hermanas? ¡Falsa libertad! ¡No vemos verdad alguna en una sociedad que está obsesionada por la prosperidad de unos pocos capitalistas mientras continúa oprimiendo a los trabajadores, adivasis, dalits, mujeres y pobres del mundo! ¡Rechazamos eso!

Y advierten: “ Atravesamos una crisis climática y no hay libre comercio, capital ni tecnología que puedan eliminar las raíces de esta crisis. Se olvidan que las crisis han surgido por la forma en que se estructura su sociedad – un edificio basado en un deseo infinito de recursos y un modo de vida que ve la naturaleza como un objeto de explotación y extracción. ¡Tontos! Ustedes están condenados a sufrir las consecuencias de sus acciones pero, preguntamos, ¿por qué debemos sufrir nosotros? Ustedes se han entrometido en nuestra forma de vida, en el ritmo de la Madre Tierra. Han corrompido el ambiente con sus vehículos, industrias, armas y desarrollo, y sus acciones han traído la crisis a nuestros hogares. Ustedes han pecado contra la esencia de nuestro ser, y entre lágrimas y rabia, les decimos que rechazamos la base de su existencia: un pensamiento de desconfianza, de control, de egoísmo vicioso, de injusticia y de culpa.

¿Cómo se atreven a culparnos de la crisis climática? Esta crisis es el producto de prácticas no naturales y ha devastado nuestras vidas. ¿Cómo pueden cortar nuestros árboles sin pensar? La temperatura va en aumento, las lluvias disminuyen y los bosques se están quemando, consumiéndose de dolor. ¡Y ahora quieren que salgamos de nuestros hábitats para conservar nuestros bosques! ¡Ustedes matan incansablemente y encuentran placer en decorar sus chimeneas con cabezas de tigres “aterradores” – lo cual habla de su sensibilidad moral – y todavía se dan el lujo de decirnos que debemos abandonar el bosque para que puedan proteger a los tigres! ¿Qué leyes conocen? ¿Quiénes son ustedes para enseñarnos lo que es legal? Ustedes actúan ilegalmente al contradecir la propia ley de coexistencia de la naturaleza. No tienen soluciones; sólo destruyen.

Tal vez no les interesen los tiempos en que vivimos, pero deténganse a pensar en las generaciones futuras, en su herencia. ¿Quieren dejarles un mundo de caos y destrucción? ¿Están tan cegados por su codicia? Al menos ahora, en esta crisis, debemos unir a todas las civilizaciones y a los pueblos del bosque de todo el mundo para resolver la crisis y restaurar nuestra relación con la naturaleza.

Hoy, en Dehradun, apelamos y damos la bienvenida a la solidaridad y la armonía entre todos los pueblos de los bosques del mundo; trabajadores, adivasis y compañeros de viaje en esta ruta hacia la realización de nuestra existencia, en comunión con nuestros bosques. Advertimos a su civilización que somos un pueblo unido y en lucha contra la estructura del capitalismo, de la codicia, del robo y la especulación. Advertimos a las naciones del mundo que no deben olvidar el respeto por nuestra existencia; de lo contrario, desde el fondo de nuestro corazón, gritaremos con fuerza: ¡NO MÁS SILENCIO! ¡Nos levantaremos de las cenizas de su fuego devastador! para resistir su orden, sin dejarnos desalentar por sus trampas. ¡Nos levantaremos juntos, como un pueblo del bosque unido con fuerza y solidaridad, para desafiar a la estructura misma de su civilización y volver a ser uno con la naturaleza, una vez más!

¡Levántense! Pueblos del bosque del mundo, ¡uníos! ¡Zindabad! Foro Nacional de Pueblos del Bosque y Trabajadores del Bosque, India

(1) Una parcela de tierra arable en el bosque.

La declaración completa está disponible en inglés en http://www.wrm.org.uy/countries/India/Dehradun.html

COMUNIDADES Y PLANTACIONES DE ÁRBOLES

- Brasil: duro cuestionamiento al maquillaje FSC de plantaciones de eucaliptos y advertencia frente a su avance en Piauí

“El sur de Piauí está destruido, sus ríos y arroyos envenenados y secos para satisfacer la voracidad de algunas empresas que buscan las ganancias fáciles a través de la destrucción de los ecosistemas, con las actividades del carbón, la leña, la soja, el ricino y el eucalipto. La riqueza producida se concentra en manos de unos pocos y la gran mayoría de la población continúa viviendo sin usufructuar los bienes ofrecidos gratuitamente por la Madre Naturaleza. La agricultura familiar casi no existe. Ninguna ciudad donde esté presente la soja, el ricino, la leña o el carbón mostró cambios en su perfil social. Trabajadores rurales mueren envenenados y el Estado finge no ver, la actividad laboral tiene como base el trabajo esclavo, la biodiversidad es destruida implacablemente, las aguas del Cerrado (sabana brasileña) están desapareciendo y se están creando desiertos”, decía hace un año Judson Barros, Coordinador de la Red Ambiental de Piauí (1)

A este escenario llega la Companhia Suzano de Papel e Celulose, para agravar aun más los problemas. Avanza sobre la Mata Atlántica, a orillas del río Paranaíba y sobre el Cerrado, donde recibió autorización para establecer plantaciones de monocultivos de eucaliptos en 160 mil hectáreas. La empresa también trae muchas promesas de empleo, por supuesto: de 12 mil a 30 mil empleos indirectos, 3.500 directos...

“Ese discurso fue utilizado con la venida de Bunge Alimentos y de Brasil Ecodiesel a Piauí”, reflexiona Barros, y agrega: “Hoy la realidad es cruel, no se está generando ningún empleo, la fábrica fue cerrada, ya que el gobierno descubrió que no se puede hacer marchar autos con aceite de ricino’. Pero después de haber puesto mucho dinero público en el negocio. El Gobernador regaló 100 mil hectáreas de tierras públicas a esa empresa, por un monto de 50 millones de reales brasileños aproximadamente. La justificativa de destruir el medio ambiente porque va a generar algún empleo ¿es aceptable? Intentan infundir a la gente que a causa de estos empleos, la sociedad debe pasivamente aceptar la destrucción de bosques enteros en los alrededores de Teresina [capital de Piauí], eliminando completamente la fauna y la flora, contribuyendo también para aumentar el calor y la falta de lluvias de la región y transformar al Parnaíba en una alcantarilla, peor de lo que ya está. Grave también será el abastecimiento en la capital en calidad y disponibilidad de agua.”

Es que abundan los ejemplos para saber qué ocurrirá, a pesar de las manidas promesas. Como se expresa en una carta abierta enviada a oficinas nacionales e internacional del FSC y la empresa certificadora IMAFLORA publicada el 10 de julio (2), “Hace una década que la Red Desierto Verde viene alertando a la sociedad brasileña e internacional sobre los profundos y negativos impactos económicos, sociales y ambientales de los monocultivos de eucalipto en la sociedad y el medio ambiente, sea en el extremo sur de Bahia, en el norte de Espírito Santo y Minas Gerais, denunciando la insustentabilidad de las plantaciones químicas e industriales de eucalipto. Más que eso, la Red Desierto Verde ha venido movilizando parte significativa de la sociedad regional, provocando un conjunto de audiencias públicas en los parlamentos a nivel municipal, del estado y federal, así como procesos judiciales, incluso en cortes internacionales, donde el Estado y el monocultivo son responsabilizados por la violación de derechos humanos económicos, sociales, culturales y ambientales.”

Los movimientos sociales, campesinos, sin tierras, pueblos tradicionales, sindicatos de trabajadores, iglesias, organizaciones no gubernamentales, técnicos, académicos, individuos, articulados en la Red Alerta contra el Desierto Verde denuncian que los agroquímicos de las plantaciones de eucaliptos “contaminan el suelo y el agua de una macro-región, sus tierras se sobreponen a territorios étnicos tradicionales, su mecanización genera desempleo en gran escala, su polución industrial afecta un enorme radio territorial, sus camiones e infraestructura trastornan caminos y comunidades rurales, su tercerización y degradación del trabajo mutilaron y envenenaron a trabajadores, desde los años 70 hasta hoy, sin que se hayan conquistado pensiones por invalidez. Su manejo del monocultivo genera inseguridad alimentaria y concentración de tierras, en un territorio de intenso éxodo rural, de carencia de Reforma Agraria, de políticas públicas y sin la titulación de territorios tradicionales.”

A pesar de todo esto, los monocultivos de eucaliptos de la Companhia Suzano de Papel e Celulose recibieron la certificación FSC, a través de la empresa certificadora Imaflora. El sello del FSC, dice la Red Alerta contra el Desierto Verde en su comunicado, “está certificando y maquillando como sustentable esta tragedia social y ambiental, en vez de contribuir con la disminución de las desigualdades sociales, económicas y ambientales de la región”.

El tema de la certificación de los nefastos monocultivos de árboles es un tema ya sufrido por las comunidades que los resisten. Se certificó a Veracel en el extremo Sur de Bahía, se certificó a Plantar S.A. en Minas Gerais, y ahora se vuelve a certificar a Suzano. Como dice la Red en su carta: “Infelizmente el principio 10 del FSC continua a contramano del debate ambiental, permitiendo la certificación de las plantaciones uniformes de árboles como bosques sustentables, desvirtuando el mensaje del sello verde frente a los consumidores del norte”.

Son justamente esos consumidores quienes deben saber que “Para nosotros, de la Red Desierto Verde, el FSC de la Cia. Suzano ha resultado ser un maquillaje verde, para una empresa que ni siquiera financieramente se sustentaría, si no fuese por las enormes y ventajosas cifras públicas invertidas por el Estado, sea en forma de inversión directa, crédito o concesión fiscal. El sello verde de la Cia. Suzano debe ser inmediatamente revisado y retirado, posibilitando la titulación de los territorios tradicionales, la agricultura campesina y la reforma agraria, promoviendo la agroecología, la soberanía alimentaria y la recuperación del clima y de la Mata Atlántica en la región”

Aunque en definitiva concluyen, “¡las empresas devastadoras merecen al FSC y el FSC merece a las empresas devastadoras! Quien no merece al FSC son las comunidades campesinas, sin tierras, los quilombolas (descendientes de esclavos), indígenas, ribereños y los pobladores de los alrededores, impactados por sus plantaciones. Tampoco merece al FSC el consumidor final del Norte que esté interesado en rever su consumo excesivo.

Todas las falsas promesas que Suzano está ahora haciendo en Piauí –como los 12 mil a 30 mil empleos indirectos y los 3.500 directos- ya las hizo antes en Espírito Santo y en Bahía, pero ahora se sabe que sus plantaciones de eucaliptos no solo no generaron esos empleos sino que resultaron en desempleo a gran escala. Como lo dice la Red Desierto Verde en su carta de 10 de julio,“Los conflictos socioambientales que laten en el norte de Espírito Santo y en el extremo sur de Bahia, a partir de la confección de millares de hectáreas de monocultivos, están cerca de suceder en los estados de Maranhão y de Piauí”.

Dado que las plantaciones de Suzano en Piauí están todavía en la etapa de estudio de impacto ambiental, es fundamental que las poblaciones locales sepan que todas sus promesas son falsas y que todavía se está a tiempo de evitar el desastre social y ambiental que resultará de su implantación.

(1) “O papelão da Suzano no Piauí”, Judson Barros - Coordinador de la “Rede Ambiental do Piauí”, http://www.portaldomeioambiente.org.br
(2) Comunicado de la Red Alerta contra el Desierto Verde, 10 de julio de 2009

- L aos: la empresa china Sun Paper planea establecer monocultivos de eucaliptos

Una empresa china llamada Shandong Sun Paper planea establecer 100.000 hectáreas de plantaciones de eucaliptos en la provincia de Savannakhet, en la región central de Laos. De este total, 30.000 hectáreas fueron otorgadas por el gobierno a Sun Paper en una concesión de 50 años de duración. Las restantes 70.000 hectáreas serán plantaciones realizadas por agricultores en sus propias tierras, en régimen de contrato con Sun Paper. El comienzo del proyecto de US$ 15 millones está previsto para principios de 2010.

“También planeamos construir plantas de celulosa en los distritos de Xepon o de Phin,” dijo Ying Guang Dong, Subgerente General de Sun Paper, al Vientiane Times. Sun Paper proyecta invertir entre 300 y 500 millones de dólares para construir una planta con una capacidad de 300.000 toneladas. “Luego invertiremos 1.800 millones de dólares en la segunda fase,” dijo Ying.

Ying sostiene que la planta dará empleo a 10.000 personas. Si fuera cierto, sería la mayor planta de celulosa o la más intensiva en mano de obra del planeta. Sun Paper es la empresa papelera más grande de China, con una capacidad anual de más de 2,2 millones de toneladas de papel y cartón, y emplea un total de 7.000 personas aproximadamente. La planta de US$ 1.200 millones que Botnia construyó en Uruguay, que tiene una capacidad anual de un millón de toneladas de celulosa, emplea un total de 300 personas.

Si bien Sun Paper exagera en cuanto al número de personas que empleará, al menos es honesta en cuanto al dinero que proporcionará a las comunidades locales: US$ 200.000. Se supone que este dinero servirá para edificar escuelas y dispensarios, y para construir y mantener las calles. Hay 44 aldeas en la zona de la concesión. Esto significa que serían unos US$ 4.500 para cada aldea, lo cual es quizás mejor que nada, pero apenas.

Sun Paper ni siquiera planea emplear a los lugareños en sus plantaciones. “Actualmente, apuntamos a utilizar mano de obra vietnamita para cortar la madera en las plantaciones,” anunció Ying a RISI, la empresa de información sobre la industria forestal, en febrero de 2009.

Antes de que se construya la planta de celulosa, la madera se exportará a través del puerto de Da Nang, en Vietnam. En marzo de 2009, Sun Paper anunció que invertiría US$ 15 millones en una planta de chips en Vietnam, para procesar la madera de Laos. Desde Vietnam, los chips serán embarcados hacia la planta de Sun Paper en la ciudad china de Yanzhou. Parte de las operaciones de Sun Paper en Yanzhou son realizadas por una empresa conjunta con International Paper.

El problema que tendrá Sun Paper es que no hay suficiente tierra disponible para otorgar grandes concesiones en la provincia de Savannakhet. En octubre de 2007, el Vientiane Times informaba que “Las autoridades de Savannakhet enfrentan dificultades para proveer de tierra suficiente a los inversores extranjeros que han solicitado miles de hectáreas para sus proyectos durante los últimos años.” Se ha informado que una empresa hindú, Birla Lao Pulp & Plantations Company Limited, está teniendo serios problemas para encontrar tierra suficiente para su proyecto de 50.000 hectáreas de plantaciones de eucaliptos en la provincia de Savannakhet.

Sun Paper realizó estudios de impacto ambiental y sostiene que involucrará a las personas que viven en el área de la concesión en los procesos de control y toma de decisiones. Dice que “empleará” a 50.000 personas para la plantación de árboles. Pero hay antecedentes de este tipo de proyecto en Laos, siendo el más notorio el Proyecto de Plantación Industrial de Árboles del Banco Asiático de Desarrollo. En diciembre de 2005, el Departamento de Evaluación de Operaciones del BAD concluyó que dicho proyecto “no logró mejorar las condiciones socioeconómicas de los supuestos beneficiarios, ya que la gente se sumió aun más en la pobreza al tener que pagar los préstamos que financiaron plantaciones malogradas.” Pongámoslo de otra forma: los agricultores que Sun Paper espera cultiven los árboles para la empresa, necesitan sus campos para producir alimentos.

En 2007, el gobierno de Laos suspendió el otorgamiento de nuevas concesiones de tierra “luego de saber que tales acuerdos estaban afectando de manera negativa a las comunidades locales”, según publicó el Vientiane Times. En mayo de 2009, el gobierno anunció un decreto del Primer Ministro sobre arrendamiento y concesión de tierras estatales, el cual, una vez más, permite las concesiones a gran escala. Pero muy poco ha cambiado en Savannakhet. No hay nuevas tierras en la provincia. Así que las preguntas siguen vigentes. ¿Dónde encontrará la tierra Sun Paper? ¿A quién beneficiará? Y ¿por qué diablos el gobierno de Laos aceptó este proyecto?

Chris Lang, http://chrislang.org

- México: el negocio de la palma a costa de los más pobres

Desde 2004 el gobierno mexicano impulsa la expansión de las plantaciones de palma africana. Actualmente existen 9 plantas extractoras de aceite de palma en cuatro estados, 6 de las cuales están ubicadas en Chiapas, que es el principal estado productor de palma aceitera en México. Para este año 2009, el gobierno del estado de Chiapas llegaría a un total de 44 mil hectáreas sembradas de palma africana y su gobernador anunció que para 2012 pretende llegar a las 100 mil hectáreas, proyectándose en un futuro a más de 900 mil hectáreas.

Lo que queda claro es que la producción de palma ha sido posible gracias a un fuerte apoyo del gobierno, que la ha vuelto rentable. Se ha brindado tanto apoyo directo al productor para la reconversión productiva, como programas de promoción comercial y fomento a las exportaciones, asesoría y capacitación, etc. También la Unión Europea, interesada en la palma africana para agrocombustible, ha impulsado desde 2005 las plantaciones en Chiapas, más específicamente en la zona de amortiguamiento de la Selva Lacandona y en la zona de amortiguamiento de la Reserva de la Biosfera Montes Azules, en la frontera con Guatemala.

El gobierno Federal y de Chiapas afirman que las plantaciones de palma se están instalando en áreas previamente deforestadas por la ganadería y otras actividades que ya no son rentables. No obstante, muchas actividades han dejado de ser “rentables” para el mercado empresarial porque la estrategia del gobierno para ganar terreno a la palma africana ha sido bajar los apoyos a otros sectores para orillarlos hacia estas plantaciones. El gobierno abandonó el campo, a los pequeños productores y, en la lógica de los Tratados de Libre Comercio, se ha enfocado no en la soberanía alimentaria sino en el mercado del agronegocio. El pequeño productor, el campesino y el indígena quedan desamparados y muchas veces se ven obligados a insertarse en esta nueva dinámica de entregar su mano de obra barata y su tierra, subsidiando así las ganancias del agronegocio. La palma africana tampoco sería rentable si no contara con los grandes subsidios gubernamentales, del Banco Mundial (BM) y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con sus financiamientos a programas como Procampo, destinado a la inversión en las plantaciones de palma africana.

Los monocultivos de palma “sustituyen bosques tropicales u otros ecosistemas, provocando una grave deforestación, que trae aparejada la pérdida de biodiversidad, inundaciones, el agravamiento de las sequías, la erosión de suelos, la consiguiente contaminación de los cursos de agua y la aparición de plagas por la ruptura del equilibrio ecológico y cambios en las cadenas alimentarias”. Además, los monocultivos de palma ponen en peligro “la conservación del agua, de los suelos, de la flora y de la fauna. La degradación de los bosques diminuye sus funciones en materia climática y su desaparición afecta a la humanidad en su conjunto”, tal como denunciara la Declaración internacional en contra de la ‘Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible’ (RSPO) ( http://www.wrm.org.uy)

El Panel Intergubernamental de las Naciones Unidas sobre Bosques identificó como causas de la deforestación y la degradación de los bosques las políticas gubernamentales de sustitución de bosques por plantaciones industriales de árboles –como la palma aceitera-, así como el avance de la frontera agrícola empujada por las plantaciones de monocultivos. Pese a ello, en la región de los Montes Azules -donde de 220 mil hectáreas de selva ya se ha deforestado el 80%- el gobierno habla de crear “cordones de protección mediante proyectos productivos de gran impacto como la palma africana”, entre otros.

Las plantaciones de palma no solo no han mejorado sino que han empeorado las condiciones de vida de la población. Uno de los problemas graves que ocasionan tiene que ver con el agua. Ante la falta de servicio de agua potable, las más de 11 mil personas que habitan el municipio de Marqués de Comillas, en la Reserva de la Biosfera Montes Azules, consumen agua en su mayoría de fuentes subterráneas, por medio de pozos. Las plantaciones de palma, grandes consumidoras de agua, agravan la disponibilidad de agua en la región. También utilizan grandes cantidades de agrotóxicos: insecticidas como el endosulfán y otros productos químicos, como rodenticidas, que terminan en los cursos de agua. Los huracanes agravan el problema cuando provocan que los ríos rebasen su corriente, como ocurre en la región de la Selva Lacandona con el río Lacantún, contaminando las plantaciones de subsistencia de los campesinos del lugar y dispersando los agrotóxicos en un área rica en biodiversidad.

Según estudios de la Fundación Produce Chiapas, los ingresos de "un productor promedio ejidal con siete hectáreas y una producción promedio de 19 toneladas por hectárea” equivaldrían a 274 pesos diarios (21 dólares), o sea menos del salario mínimo mexicano por hectárea. En la inversión anual para establecer una hectárea de palma, el paquete tecnológico le cuesta al productor alrededor de 6.500 pesos (17 pesos o 1,3 dólares diarios): incluye la siembra (preparación del terreno, compra de la plántula, control de malezas, limpieza de calle, aplicación de herbicidas, plantación manual), fertilización, control de plagas, podas, equipamiento y servicios. La tercera parte del costo se va en herbicidas, control de plagas, fertilizantes, rodenticidas. Por otro lado, durante los primeros tres años no hay producción ni cosecha, y recién al octavo año se cosecha al 100%.

Los productores que trabajan para una empresa procesadora de palma de aceite suelen quedar cautivos de esa situación: la Planta Extractora de la Empresa Palma Tica de México ofreció plántulas a los productores, a crédito, con la condición de que comercializaran sólo con ella su cosecha. En muchos casos los productores no cuentan con la capacitación y las herramientas adecuadas para la cosecha; en otros casos no cuentan tampoco con la capacitación ni la adecuada asesoría técnica para el cultivo, control y manejo integral de las plantaciones. Muchas veces los productores campesinos e indígenas que venden a las empresas procesadoras de aceite no están protegidos por contratos o convenios de compra, ni seguros, lo que implica que puede ocurrir que si la empresa no quiere, no les compra su producción. Tampoco existen diferencias en los precios por la calidad del producto que entregan.

En 2008, un grupo de trabajadores de la planta de aceite AGROIMSA, en el municipio de Mapastepec, fue reprimido por la fuerza pública, que detuvo a un asesor y a algunos dirigentes, varios de los cuales quedaron en prisión. También los despidieron, generando así un conflicto laboral.

Por otro lado, las plantaciones de palma resultan excluyentes de otras producciones. En el municipio de Villa Comaltitlán, una de las principales zonas de cría de ganado junto con otros municipios de la Costa, confirman que la caída de la ganadería “se debió no a la negligencia de los productores, si no más bien a la llegada de otro tipo de cultivos en donde no se puede combinar con la ganadería. Por ejemplo, el cultivo de plátano y de la palma africana le ha restado espacios, lo que implica la disminución de la cría de ganado.” En Chiapas los monocultivos de palma han tenido impactos desastrosos sobre la producción de miel, de la que dependen miles de apicultores, cuya crisis se agrava en la medida en que aumentan las plantaciones.

También causan otros estragos: en el municipio de Acapetahua, donde el señor Manuel Jiménez manifestó que “los principales culpables de destruir caminos y carreteras son los transportistas de carga pesada, ya que con sus camiones cargados de piedra, caña y fruta de palma africana causan los daños.” En la cabecera municipal de Mapastepec, “Por el zanjeo para introducir el drenaje se hundió el terreno (…) en el barrio 15 de septiembre y ahora dificulta el tránsito vehicular así como se levantan grandes polvaredas y afecta la salud de los vecinos”. Los habitantes del barrio, Gabriel Colón y Elio Ventura, exigieron al Ayuntamiento el arreglo de la calle que es muy transitada principalmente por camiones con carga de palma africana que van a la planta de la aceitera.

No cabe duda que los grandes negocios se hacen sobre las espaldas de los más pobres, sobre sus tierras y territorios y a costa de los bienes comunes de la humanidad. ¡Basta de monocultivos!

Resumen y adaptación de: “La palma africana en México. Los monocultivos desastrosos”, Gustavo Castro Soto, Otros Mundos, AC/Amigos de la Tierra México, 12 de junio de 2009. Puede accederse al artículo completo en: http://www.wrm.org.uy

- Forest Movement Europe emite Declaración sobre Plantaciones de Árboles

El Forest Movement Europe (FME) es una red informal de más de 45 ONGs de 12 países europeos. Es un movimiento abierto, sin membresía ni secretaría formales, que desde hace casi diez años trabaja en temas forestales.

Fue principalmente gracias a las actividades de los grupos que participaron en dicho movimiento que comenzaron las campañas europeas en defensa de la selva tropical, bajaron las importaciones de madera tropical en varios países de Europa y la lucha de los pueblos del bosque, por ejemplo en Sarawak, Malasia, y en la Amazonia, adquirió notoriedad en los medios.

El FME se reúne una vez al año y en la reunión de junio del corriente realizó la siguiente declaración, apoyada por muchas ONG y algunas personas a título individual:

“Los participantes del Forest Movement Europe deseamos expresar nuestra preocupación por la expansión de las plantaciones de árboles de crecimiento rápido en el Sur, las cuales se están estableciendo con el apoyo de algunos gobiernos europeos y con la participación directa de una cantidad de empresas con sede en Europa.

A pesar de que dichas plantaciones están generando un gran número de impactos sociales y ambientales graves, siguen promoviéndose como ‘bosques plantados’ con el fin de ocultar su verdadera naturaleza destructora.

Las comunidades locales que sufren los efectos negativos de los monocultivos de árboles de madera rápida, como los eucaliptos y los pinos entre otros, declaran que ‘las plantaciones no son bosques’. Toda la evidencia disponible prueba que las comunidades locales tienen razón porque, mientras los bosques proveen una amplia gama de beneficios tanto para las personas como para el medio ambiente, las plantaciones generan:

· la apropiación de tierras boscosas que proveen de sustento a los pueblos,
· la destrucción de los bosques y otros ecosistemas igualmente valiosos,
· el agotamiento de los recursos hídricos,
· el empobrecimiento del suelo,
· la desaparición de la biodiversidad animal y vegetal.

Por tanto, exhortamos a los gobiernos europeos a detener toda clase de apoyo a la expansión de las plantaciones de árboles de crecimiento rápido y adoptar una clara definición de bosques que excluya las plantaciones de monocultivos de árboles a gran escala.”

El documento firmado está disponible en inglés en http://www.wrm.org.uy

– Árboles transgénicos: cuando los científicos se convierten en publicistas

El Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) tiene por mandato proteger la biodiversidad del mundo. Las fuertes campañas de un número cada vez mayor de ONGs y organizaciones de pueblos indígenas han planteado los peligros que representan los árboles genéticamente modificados para la diversidad biológica de los bosques. El Convenio se ocupó de este problema y, luego de discutirlo, decidió que era necesario tomar medidas precautorias antes de autorizar la introducción de dichos árboles en el ambiente.

La posición del CDB fue recibida con agrado por las organizaciones que se preocupan por la suerte de los bosques del mundo y de sus pobladores, pero está siendo fuertemente resistida por quienes ganarían con el negocio de los árboles transgénicos.

Un artículo recientemente publicado por cuatro científicos que están a favor de los árboles transgénicos muestra cuán anticientíficos pueden llegar a ser algunos con tal de defender sus argumentos. Los autores son Stephen Strauss, Huimin Tan, Wout Boerjan y Roger Sedjo y el título en inglés es “Strangled at birth? Forest biotech and the Convention on Biological Diversity Nature Biotechnology”.(1)

http://www.globaljusticeecology.org Se trata de un artículo bastante largo y detallado, lo cual muestra la importancia que concede el lobby de los árboles transgénicos a la posición del CDB a este respecto. Por otro lado, también muestra a qué extremos están dispuestos a llegar sus autores para defender su posición. Lo que sigue es sólo algunos ejemplos que ilustran este punto, pero invitamos a las personas interesadas en el tema a analizar el texto completo, que encontrarán en http://www.wrm.org.uy El título intenta hacer creer que los árboles transgénicos han sido “estrangulados al nacer” por el CDB. Sin embargo, los autores olvidan decir que al menos 20 países realizan investigaciones sobre este tema y que ya hay ensayos de campo en 11 países o más (por más información, ver ). Lo que está haciendo el CDB es simplemente aplicar el principio de precaución para evitar la posibilidad de que los árboles transgénicos tengan impactos irreversibles sobre la diversidad biológica. Es decir que el CDB se está limitando a cumplir con su misión.

En realidad, lo que dice el artículo refuerza la posición del CDB. Strauss y los demás le dan los argumentos necesarios.

Ellos dicen que “Las preocupaciones con base científica más creíbles referentes a los árboles transgénicos son quizás las relacionadas con su potencial de gran dispersión de semillas y polen cuando se les permite florecer”. Y agregan que “La mayoría de los científicos están de acuerdo en que, hasta tanto no se desarrollen genes que impidan la contaminación transgénica, que sean socialmente aceptables y de eficacia comprobada en el terreno, seguramente habrá cierto grado de dispersión de genes – ya sea a través del polen, de las semillas o de propágulos vegetativos – en la mayoría de las especies forestales. Además, la dispersión puede cubrir grandes distancias, del orden de varios kilómetros o más” (énfasis agregado). Para empeorar aún más las cosas, añaden que “El escaso nivel de domesticación de la mayoría de las especies arbóreas contribuye a este problema, dado que los propágulos suelen ser lo bastante aptos como para sobrevivir en entornos silvestres”.

Lo anterior bastaría a la mayor parte de los científicos para hacerlos desistir de una actividad tan peligrosa, pero no a Strauss y sus colegas.

Entre los muchos argumentos que utilizan para justificar su investigación y sus ensayos al aire libre, el siguiente es un buen ejemplo de su enfoque anticientífico. Dicen que “muy pocas de las especies transgénicas que se están desarrollando con fines comerciales son sexualmente compatibles con los bosques silvestres, o serán usadas en o cerca de bosques silvestres, por lo cual será muy excepcional que haya un grado significativo de introgresión de transgenes en los genomas de árboles silvestres, al punto de que se vuelvan comunes en los ecosistemas silvestres” (énfasis agregado).

Si bien estos cuatro hacen hincapié en que son científicos – y lo hacen de punta a punta del artículo – para probar que tienen razón en todo lo que dicen, el párrafo mencionado prueba exactamente lo contrario: una actitud totalmente anticientífica.

1) La diferencia entre hipótesis y hechos se desvanece y las primeras se muestran como sinónimos de los segundos. Pruebas:

– La ciencia no puede saber si las especies transgénicas “serán usadas en o cerca de bosques silvestres”, porque son los gobiernos y las empresas quienes lo decidirán.
– La ciencia no puede saber si “será muy excepcional que haya un grado significativo de introgresión de transgenes en los genomas de árboles silvestres”.
– No está cuantificado el significado de “muy excepcional” ni de “un grado significativo”.2) Existe una confusión entre especies y bosques.– Las especies transgénicas pueden ser sexualmente compatibles o incompatibles con las especies naturales, pero no con los “bosques silvestres”.
– El empleo del término indefinido “bosques silvestres” puede significar que se están refiriendo únicamente a la contaminación de especies que viven en bosques “primarios”, y no a las especies mismas.3) Se esconden las pruebas existentes

– El género más comúnmente manipulado genéticamente es el álamo (varias especies). Sin embargo, el artículo no menciona que ya hay pruebas de contaminación transgénica de álamos “silvestres” (nativos) en China.
– El artículo no menciona que los otros dos árboles principales que son objeto de manipulación genética son el pino (que crece en muchos bosques “silvestres” del mundo entero) y el eucalipto (nativo de Australia y plantado en muchísimos países del mundo). En los dos casos, la dispersión de polen y semillas sería inevitable y ningún científico puede probar que los bosques de eucaliptos de Australia estarían a salvo de la contaminación transgénica.
– Los autores dicen que “es probable que la superficie plantada con especies forestales transgénicas sea relativamente pequeña; las plantaciones forestales comprenden sólo alrededor del 5% de la cubierta forestal mundial”. Olvidan mencionar que, según la FAO, las plantaciones cubren un total de... ¡270 millones de hectáreas! Describir esta superficie como “relativamente pequeña” es anticientífico, por no decir más.

Ejemplos de este tipo abundan en el artículo, aunque el siguiente es quizás uno de los más ilustrativos: “... las especies de árboles silvestres podrían sacar provecho de algunos tipos de árboles transgénicos, por ejemplo, un árbol silvestre podría adquirir un rasgo que mejore su resistencia al estrés y, de este modo, volverse resistente a nuevas formas de estrés biótico o abiótico, quizás provocadas por un rápido cambio climático”.

Obviamente, lo anterior equivale a reconocer que, si se autoriza la plantación de árboles transgénicos, habrá contaminación. Pero, al mismo tiempo, es difícil comprender – a menos que los autores cuenten con un doctorado en futurología – cómo puede determinar la ciencia si los árboles “silvestres” se beneficiarán o no con la adquisición de nuevos rasgos, o si acaso las especies con “mejor resistencia” no pondrán en peligro la diversidad biológica, precisamente a causa de ese nuevo rasgo.

Resumiendo, el artículo termina demostrando que los argumentos de las ONG para pedir la prohibición de los árboles transgénicos son científicamente correctos, y contribuye a justificar el enfoque precautorio solicitado por el CDB.

Ricardo Carrere

(1) Strangled at birth? Forest biotech and the Convention on Biological Diversity
Nature Biotechnology 27, 519 - 527 (2009). Steven H. Strauss, Huimin Tan, Wout Boerjan & Roger Sedjo.

Temas: Crisis climática, Monocultivos forestales y agroalimentarios

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