Corte Suprema EEUU niega a los agricultores familiares derecho de autodefensa contra Monsanto

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La Corte Suprema de Estados Unidos emitió una decisión en la emblemática demanda federal, Organic Seed Growers and Trade Association (OSGATA) et al v. Monsanto. Se les negó a los agricultores el derecho de presentar su caso en la corte y ganar protección de abusos potenciales de parte del gigante agroquímico y de ingeniería genética, Monsanto, publicó Food Democracy Now!

Además, la decisión de la Corte frustra las esperanzas de agricultores familiares quienes buscaban la oportunidad de probar en la Corte que las patentes de semillas Genéticamente Modificadas (GM) de Monsanto eran inválidas.

Los agricultores habían buscado la protección de la Corte en el caso que fueran inocentes víctimas de la contaminación por medio de la tecnología patentada de Monsanto para que no pudieran ser demandados por infracción a la ley de patentes, pero su caso fue denegado por la Corte.

“Mientras que la decisión de la Corte Suprema de negar el derecho a agricultores orgánicos y no- GM de buscar protección preventiva de las patentes de Monsanto es decepcionante, no debiera ser mal interpretado como que significaría que Monsanto tiene el derecho a dichas demandas,” dijo el director ejecutivo de la Public Patent Foundation y consejero en jefe de los demandantes en OSGATA et al v. Monsanto, Daniel Ravicher.

“De hecho, a la luz de la decisión de la Corte de Apelaciones, Monsanto no puede demandar a un agricultor contaminado por violación de patente si el nivel de contaminación es menos del 1%,” explicó Ravicher. “Para los agricultores contaminados con más del 1%, a lo mejor llegará el día de abordar si las patentes de Monsanto puedan ser reivindicadas en su contra. Estamos confiados en que si las cortes llegan a oír dicho caso, sentenciarán a favor de los agricultores no GM.”

Los agricultores han buscado la protección de la Corte bajo la Declaratory Judgment Act, que postula que si se vuelven una inocente víctima de contaminación por tecnología de empalme de genes de Monsanto, no podrían perseverar en demandar por infracción a la ley de patentes.

“La Corte Suprema falla en captar el extremo dilema en que se encuentran los agricultores familiares,” dijo el agricultor de semillas orgánicas de Maine, Jim Gerritsen, presidente del demandante principal OSGATA. “La Corte de Apelaciones estuvo de acuerdo en que nuestro caso poseía mérito. Sin embargo, las salvaguardas que ordenaron son insuficientes para proteger nuestros predios y nuestras familias.”

“Esta alta corte quien dio a las corporaciones la habilidad de patentar formas de vida en 1980, y bajo Citizens United en 2010 otorgó a las corporaciones el poder de comprar su paso a victorias electorales, ahora en 2014 ha negado a los agricultores el derecho básico de protegerse del notorio matón de patentes, Monsanto,” dijo Gerritsen.

La demanda histórica fue introducida en 2011 en la Federal District Court de Manhattan. La larga lista de demandantes fue 83 agricultores familiares de USA y Canadá, compañías semilleras independientes y organizaciones agrícolas, cuyas membresías combinadas armaron un total de un millón de ciudadanos, incluyendo a muchos agricultores no GM y a más del 25% de los agricultores orgánicos certificados de Norte América.

“La decisión de la Corte de Apelaciones podría dejar a los agricultores canadienses a su suerte porque su protección no se extendería a Canadá,” dijo el agricultor de granos orgánico de Saskatchewan, Arnold Taylor, miembro de un miembro demandante de Canadian Organic Growers. “Como muchos agricultores canadienses, vendemos cosechas a USA y por lo tanto, tendríamos responsabilidad en reclamaciones de violación de patentes de parte de Monsanto.”

En una complicada decisión emitida en junio del 2013(2) de parte de la Corte de Apelaciones del Circuito Federal de Washington, D.C., se les entregó a los agricultores de USA una victoria parcial cuando tres jueces estuvieron de acuerdo con la aseveración de los agricultores que la contaminación de parte de Monsanto era inevitable. Los jueces ordenaron a Monsanto no demandar a los agricultores de USA cuyos predios fueran contaminados con trazas de material patentado, el cual la Corte definió como 1%.

En una situación relacionada, el agricultor de soya Stephen Webster de Ontario experimentó qué tan abusivo es el trato de Monsanto con las víctimas de contaminación inocentes. Sin ninguna intención, Webster, quien cría con su anciano padre, se le contaminó su cosecha de soya no GM del 2012 cuya identidad fue preservada con la semilla patentada GM de Monsanto. Su soya fue arruinada para exportación para mercado de especialidades de Japón.

“Primero, Monsanto reclamó que poseíamos muchas abejas y que la contaminación fue culpa nuestra,” dijo Webster. “Luego, amenazaron con producir hasta US$100,000 en facturas legales que tendríamos que pagar.” De forma trágica, la historia de Webster es la norma para el “país del campo”, en el cual Monsanto usa su poder económico extremo para silenciar a los agricultores familiares incluso antes de que puedan defenderse legalmente.

Notablemente, uno de los demandantes son clientes de Monsanto. Ninguno ha firmado acuerdos de licencia con ellos. Los demandantes no quieren las semillas de Monsanto y no quieren la tecnología de empalme de genes de Monsanto y han buscado protección legal para el inmenso daño económico a sus negocios y a sus formas de vida.

“Tenemos un campo de cuatro generaciones,” dijo la ganadera de lácteos orgánicos y demandante, Rose Marie Burroughs de California Cloverleaf Farms. “No se puede confiar en Monsanto. Su negativa a proveer un pacto de unión legal vinculante de no demandar a nuestros compañeros agricultores hace dudar de sus verdaderas motivaciones. Los niveles de contaminación de OGMs pueden fácilmente elevarse por sobre el 1% y entonces tendríamos cero protección contra una demanda costosa y atenuante.”

Los eventos de contaminación significativa, incluyendo el maíz Starlink y el arroz LibertyLink, ya le han costado a los agricultores y a las corporaciones de alimentos cerca de US$2 billones. Solo en el pasado año, el descubrimiento de trigo GM de Monsanto ilegal en un predio de Oregon(3) y la alfalfa OGM en el Estado de Washington(4) hicieron que se tambalearan los mercados extranjeros en donde no quieren OGMs. En ambas instancias los sustentos económicos de los agricultores estuvieron en riesgo, ya que los compradores en mercados extranjeros se rehusaron a comprar las cosechas contaminadas con OGMs.

“Si Monsanto puede patentar semillas para ganancia financiera, debieran ser forzados a pagar por contaminar el predio de un agricultor, no permitirles que los demanden,” dijo Dave Murphy, fundador y director ejecutivo de Food Democracy Now! “Una vez más, se les ha negado justicia a los agricultores de USA, mientras que al reino de intimidación de Monsanto se le permite continuar en USA rural.”

“Monsanto se ha salido efectivamente con la suya con el robo de la herencia semillera mundial y con abusar del agricultor por la naturaleza fallida de su tecnología de semillas patentadas,” dijo Murphy. “Este es un atropello de proporciones históricas, y no será duradero.”

Referencias (inglés):

1. Ver aquí.

2. Ver aquí.

3. Ver aquí.

4. Ver aquí.

Traducción: Ignacia Guzmán Zuloaga, IGZ

Fuente: El País

Temas: Corporaciones

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