México: la Sagarpa favorece la importación de maíz transgénico pese a autosuficiencia

Idioma Español
País México

“Nuestra crisis agrícola no es productiva sino del mercado, porque somos autosuficientes en la producción de maíz blanco y excedente de frijol, pero 40 por ciento de los otros alimentos los importamos a pesar de que podríamos ser autosuficientes”, afirmó Francia Gutiérrez, integrante del Consejo Nacional de Organizaciones Campesinas.

La política pública agropecuaria de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) está más enfocada a la regulación del mercado y fomentar la competencia productiva de maíz amarillo nacional con el que importamos de Estados Unidos, que generar una política de soberanía alimentaria, “nuestra crisis agrícola no es productiva sino del mercado, porque somos autosuficientes en la producción de maíz blanco y excedente de frijol, pero 40 por ciento de los otros alimentos los importamos a pesar de que podríamos ser autosuficientes”, afirmó Francia Gutiérrez, integrante del Consejo Nacional de Organizaciones Campesinas.

Entrevistada en el foro “Derecho a Alimentación, Crisis Climática y Seguridad Alimentaria en Veracruz”, la especialista cuestionó que la falta de regulación alimentaria del estado en favor de la producción de la soberanía alimentaria genera más problemas que soluciones. A los económicos se agregan problemas de nutrición y cultura, pues en México, 27.4 millones de personas viven en pobreza alimentaria, de acuerdo con datos ofrecidos por las organizaciones sociales. Esta cifra también arroja que uno de cada cuatro mexicanos padece hambre, aunque paradójicamente México ocupe el segundo lugar mundial de obesidad.

En su análisis, la especialista afirmó que con la pequeña y mediana producción, nuestro país puede alcanzar la soberanía alimentaria produciendo para el autoconsumo y generando los excedentes para mandarlos al mercado, de lo local a lo nacional, compartiendo esta cadena de suministro de alimentos.

Sostuvo que desde el año 1992, “estamos pidiendo un giro a la política neoliberal que les dio entrada a estas empresas generadoras de productos alimentación calóricos y no nutritivos, y que le quita los insumos a los productores pequeños y medianos y los volvió pobres, y para atenderlos se les dio una política asistencial, con programas como Oportunidades en lugar de generar una salida productiva a la pobreza”.

La paradoja a que estamos expuestos, añadió, es que México es el primer productor de maíz blanco, que es el más balanceado y genera más rendimiento que el amarillo, el ocupado para el consumo de animales y en la industria, pero es la misma Sagarpa la que está fomentando esta política de cambiar la siembra del maíz blanco por el amarillo para beneficiar al mercado y nivelar los precios, en lugar de fomentar una política de abasto y consumo del maíz blanco.

“Con estas medidas no sólo afecta a los campesinos, sino a la nutrición de los mexicanos, pues las tortillas que consumimos se hacen de maíz blanco y a pesar de ello se está importando de Estados Unidos el maíz amarillo que tiene transgénicos, a pesar de que en 2013 hubo una sobreproducción de maíz y frijol, y finalmente eso se traduce en una crisis de precio por la oferta del mercado, así nos traducen en una crisis alimentaria, un problema de precios”, puntualizó.

La especialista calificó de absurdo que la Secretaría dice que se debe exportar el frijol excedente a Brasil para regular el precio, cuando hubo estados como Oaxaca, Guerrero y Veracruz que se vieron afectados por los fenómenos meteorológicos y se generó desabasto, es decir se busca compensar el mercado más que generar el abasto nacional de la población afectada, mientras que a los damnificados les dan comida en lata, sustitutos de leche, en lugar de generar una reserva de grano para luego sembrarlo estratégicamente, asegurando el abasto.

Finalmente agregó que del maíz blanco hay autosuficiencia y el amarillo se está importando en más de 30 por ciento, “en frijol exportamos el excedente, pero alrededor de 40 por ciento de los alimentos que consumimos son importados por la falta de una política pública dedicada más a regular el mercado que generar el abasto interno del alimento y de nutrición”.

Fuente: Red en Defensa del Maíz

Temas: Sistema alimentario mundial, Transgénicos

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