Uruguay: Desmantelan centro de formación popular Bella Unión

"Se desmantela una experiencia de más de 10 años de trabajo conjunto de la universidad con organizaciones sociales de Bella Unión".

Las autoridades universitarias reafirman una orientación política de desarme:

Se confirma con la decisión del Consejo del Centro Universitario Regional Litoral Norte (CENUR LN-UdelaR) del 19 de setiembre acerca del cierre de los programas que estaban a cargo del Servicio Central de Extensión y Actividades en el Medio (SCEAM) en la ciudad de Bella Unión [1], y la no renovación del contrato de arrendamiento de la casa para las actividades de docentes, trabajadores y estudiantes.

Se trató de una resolución contradictoria, incoherente, apresurada y secreta, sin fundamentación expresa.

Contradictoria en la medida que el Consejo, al mismo tiempo que “resuelve el cierre de los programas que estaban a cargo del SCEAM en la ciudad”, plantea “mantener a la ciudad de Bella Unión en los programas de actividades de Extensión Universitaria a desarrollar por parte del CENUR LN”.

Llamativamente apresurada porque no esperó recibir la propuesta de la Comisión Ad-Hoc conformada por el mismo Consejo el 21 de julio, “para el estudio de la situación y trazado de lineamientos de las Unidades de Extensión” [2].

No parece una resolución coherente habiendo contratado a 5 docentes (con 110 horas semanales en total) del 1o de agosto al 31 de diciembre en consideración de la “la existencia de programas en curso y la necesidad de no cortar abruptamente con los procesos iniciados” [3].

Fue una resolución secreta y sin fundamentación expresa, pues el consejo sesionó bajo régimen de comisión general. El consejo no argumentó los motivos para sesionar a puerta cerrada, cuando de lo que se trata es de la continuidad de un programa de extensión. No sigue el principio de razonabilidad que debe acompañar toda decisión del Estado.

Antecedentes. Un trayecto de logros y cuestionamientos:

Se desmantela una experiencia de más de 10 años de trabajo conjunto de la universidad con organizaciones sociales de Bella Unión: sindicatos de trabajadores de la caña de azúcar, de viñedos y bodega, de la horticultura, de servicios, cooperativas de trabajo y producción, colonos y productores familiares.

No es para nada casual que esta experiencia enriquecedora, de la cual participaron centenares de estudiantes y decenas de docentes, haya recibido, en forma reiterada, duros cuestionamientos por parte de las patronales, directorio de ALUR y autoridades de ANCAP.

Valga solo como ejemplo, por su trascendencia pública, los duros cuestionamientos realizados durante el año 2013 por el entonces presidente de ANCAP, hoy vicepresidente de la República, cuando acusó, a través de la prensa, a los universitarios de extensión y del Centro de Formación Popular Bella Unión de “alentar el conflicto, la demanda y la exigencia” de los trabajadores. Dichas apreciaciones provocaron entonces una indignante respuesta de docentes, autoridades universitarias de aquel momento y trabajadores de Bella Unión.

Por el contrario, no hemos escuchado cuestionamiento alguno de ninguna autoridad universitaria acerca de que parte considerable del presupuesto universitario esté volcado desde siempre a alentar y reafirmar los vínculos de la Universidad con los empresarios para “generar innovación y desarrollo”. Por ejemplo, el “Centro de Extensionismo Industrial”, creado por la UdelaR junto con el Ministerio de Industria, Energía y Minería y la Cámara de Industria, desde 2014, ha atendido a más de 130 empresas4 que requirieron asesoramiento de grupos académicos.

La magnitud del desarme:

¿Qué significado tienen estas resoluciones y medidas de desmantelamiento definidas por el Consejo del CENUR LN en continuidad con la política de desarticulación de la extensión iniciada en el nuevo período rectoral?

1) Perjudican el trabajo de extensión de docentes y estudiantes en Bella Unión junto a organizaciones de trabajadores. Se dirigen contra el trabajo del Centro, uno de los pocos espacios integrado por trabajadores y universitarios.

2) Detienen el desarrollo de una experiencia que cumple con las funciones de la universidad: aporta a la formación de profesionales a partir de la relación estrecha con las problemáticas existentes, investiga temas de importancia social y aporta asistencia y formación a la sociedad que sustenta nuestra universidad.

3) Expresan una concepción de universidad y educación conservadoras, negadoras de las asimetrías y conflictos sociales que pretenden ocultarse en la engañosa definición de amplitud, neutralidad y rigurosidad académica. Y que, en los hechos, está conducida por los intereses conciliadores con el capital.

4) Se amparan en un discurso descentralizador, que traspasan recursos y decisiones de Montevideo al CENUR LN, sin que ello signifique una expansión de las actividades universitarias hacia territorios y sectores sociales vulnerables y más rezagados.

5) Bloquean la posibilidad de sostener, mejorar y profundizar la realización de una concepción de universidad crítica de cara a los intereses y el trabajo conjunto con sectores populares. De esta forma gana espacio la concepción de una universidad conservadora, elitista y acrítica con la reproducción de las desigualdades sociales.

6) Afianzan una concepción autoritaria y contraria a la participación plena y autónoma, reforzando el secretismo. Niegan el debate franco y directo con los actores involucrados, tanto universitarios como extra universitarios. Desconocen, desprecian y desoyen las instancias de construcción colectiva [5].

El desmantelamiento del Centro de Formación no se fundamenta en una evaluación seria de la experiencia de trabajo universitario acumulada. No permite sentar las bases para una propuesta programática de trabajo en la región. Las acciones de las autoridades universitarias fueron de falta de respeto y atropello hacia los docentes. La política aplicada es autoritaria y nada tiene que ver con una práctica de co-gobierno democrático:

- Desconocieron los acuerdos de trabajo que se construyeron en reuniones específicas.

- Tomaron decisiones de manera inconsulta y sin fundamentos político institucionales ni académicos.

- Redujeron la carga horaria del docente efectivo trasladado al CENUR y en los contratados por el CENUR con el presupuesto traspasado por el SCEAM. Solamente en 5 meses (agosto -diciembre 2016) se redujeron 36 horas semanales de trabajo docente, equivalente a $375.000 en el período.

- No otorgaron la compensación por radicación en el interior al docente efectivo trasladado del SCEAM al CENUR [6].

- Restringieron los pasajes a los docentes y no les autorizaron viáticos, obstaculizando que desarrollaran las tareas en Bella Unión para las que fueron contratados y cumplieran los compromisos asumidos.

- Retiraron el equipamiento del local que la UdelaR alquilaba en Bella Unión necesario para el desarrollo de las tareas (sin gestionar uso de otro local como oficina). Retiraron las computadoras con información confidencial sin dar tiempo a realizar respaldos. Retiraron el vehículo, fundamental en una tarea cuyas actividades principalmente se realizan en el medio rural-agroindustrial en un radio de 35 km.

Para seguir caminando:

Los abajo firmantes, docentes del Centro de Formación, asumimos el compromiso de seguir alentando, en el lugar donde nos encontremos, las reflexiones y criterios ético-metodológicos en defensa de una Universidad abierta.

Seguiremos rechazando el pensamiento único colaborando con la construcción de una universidad puesta al servicio de las necesidades de los sectores populares. La experiencia adquirida en Bella Unión, con todas sus contradicciones, nos refuerza este compromiso.

Continuamos reivindicando la necesidad de un proyecto de universidad crítica que requiere asumir el punto de vista de los sectores populares. Será necesaria la movilización y la demanda, para superar la coyuntura particular de la universidad, que no puede dar lo que ha optado por sepultar.

Serán los trabajadores y estudiantes, en sus luchas por la transformación, los que van a mover los cimientos más anquilosados y retrógrados del pensamiento universitario.

María Echeverriborda. Docente del Programa Centro de Formación Popular Bella Unión

Gonzalo Bandera. Docente del Programa Centro de Formación Popular Bella Unión

Álvaro Moraes. Docente del Programa Centro de Formación Popular Bella Unión

Damián Bentos. Docente del Programa Centro de Formación Popular Bella Unión

Daniel Bentos. Docente del Programa Centro de Formación Popular Bella Unión

Nancy Espasandín. Integrante honoraria del Programa Centro de Formación Popular Bella Unión

Magdalena Curbelo. Integrante honoraria del Programa Centro de Formación Popular Bella Unión.

Notas:

[1] Resolución Nº 25 del 29 de setiembre.

[2] Resolución Nº 40 del 21 de julio.

[3] Resolución Nº 11 del 3 de agosto.

[4]Pagina institución de la Udelar, publicación del 20/11/2016.

[5] Tales como: i) Presentación de evaluación y propuestas del equipo docente con tareas en Bella Unión al Consejo del CENUR (setiembre de 2016); ii) Reuniones mantenidas por la directora y consejeros del CENUR LN con docentes y organizaciones de Bella Unión (febrero y junio 2016); iii) III encuentro de extensión del CENUR LN organizado por las Unidades de Extensión de las sedes de Paysandú y Salto del CENUR LN (noviembre 2015); iv) Encuentro de estudiantes “Pablo Carlevaro” organizado por el CFPBU (noviembre 2015); v) Encuentro “Organizaciones sociales, trabajo alternativo y agroindustria” organizado por el núcleo interdisciplinario “Pensamiento crítico en América Latina y sujetos colectivos” con organizaciones sociales de la región del CENUR LN (noviembre 2013); vi) Variados encuentros de trabajadores y universitarios (campamentos de formación, jornadas, actividades temáticas entre 2010 y 2014).

[6] El 19/07/2015 el Consejo Delegado Académico decide la reelección del docente efectivo que cumple tareas en el CFPBU, encomendando al Pro Rector de Extensión y Actividades con el Medio a instrumentar su traslado al CENUR LN. El 6/05/2016 el Pro Rector dirige una nota a la Directora del CENUR LN en la cual solicita el traslado del docente desde el SCEAM al CENUR LN. En la misma “se solicita el pago de la partida por gastos para la instalación inicial y la compensación por residencia habitual en el interior prevista en la Ordenanza del Régimen de Estímulo para la Radicación de Docentes en el Interior” y comunica que “su cargo efectivo será financiado con fondos que este servicio traspasará al CENUR Litoral Norte”.

Fuente: El Muerto que habla

Temas: Comunicación y Educación

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