El territorio amazónico perdió más de 3.800 hectáreas boscosas entre julio y septiembre, con parches pelados y calcinados de hasta 50 hectáreas, de acuerdo con el tercer informe de Alertas Tempranas por Deforestación emitido por el Ideam. Meta, Putumayo, Norte de Santander, Córdoba, Sucre, Bolívar, Cauca y Chocó también registraron serios impactos.