Gripe aviaria: ¡No todos nuestros huevos se ponen en la cesta de la avicultura industrial!
¿Puede la gripe aviaria que procede de las ganaderías industriales destruir lo que permanece de la avicultura campesina en Europa? Las organizaciones campesinas de la CPE piden a las autoridades públicas que no se equivoquen de objetivo estableciendo ayudas que beneficien esencialmente al sector industrial. La UE debe en primer lugar apoyar la agricultura campesina ya suficientemente amenazada. La agricultura es la encargada de alimentar al pueblo
COMUNICADO DE PRENSA
CPE - Coordination Paysanne Européenne
Bruselas, 8 de febrero de 2006.
Las primeras formas muy patógenas del virus H5N1 aparecieron en crías hiperintensivas de Asia. El transporte por barco o avión de pollitos proviniendo de estas ganaderías industriales infectadas contaminó a continuación a otros países. En un informe reciente[1], la ONG Grain denuncia estos intercambios de crías, legales o ilegales, como el principal vector de proliferación del virus. Ahora que toda la atención se centra sobre las aves migratorias, deseamos recordar que al principio son los animales domésticos, cuando criados en condiciones intensivas, los que contaminaron a la fauna salvaje y no al revés.
El confinamiento decidido como medida de seguridad sanitaria penaliza en primer lugar a las crías al aire libre y no aporta ninguna solución a largo plazo. La concentración de los animales y la homogeneización de las razas impuestas por la avicultura industrial crean un caldo de cultivo más favorable a una propagación rápida del virus que las granjas de pequeño tamaño. Dispersados en el espacio, recurriendo a una gran diversidad genética y criados al aire libre, estos últimos producen aves mucho más sólidas y más resistentes que los de las ganaderías industriales. La CPE pide que estas pequeñas ganaderías sean apoyadas, puesto que van a ser las primeras víctimas de la crisis.
Ahora, algunos Estados miembros proponen destruir las existencias de aves sanas con el fin de controlar la oferta de aves. Ciertamente, el retroceso coyuntural del consumo en Europa penaliza a los productores. Pero los avicultores más industriales ya tienen una parte de su actividad deslocalizada en Brasil. Esperan una cosa: la destrucción por la Unión Europea de sus existencias para que puedan volver a copar el mercado europeo a partir de sus ganaderías intensivas brasileñas. Mientras no se active una cláusula de salvaguardia contra las importaciones de aves industriales procedentes de Brasil, estas medidas de destrucción servirán esencialmente a las multinacionales del sector avícola. El reglamento de la oferta debe hacerse a cambio de una limitación inmediata de las importaciones procedentes de la cría industrial de aves y un descenso de la intensificación del sector avícola en Europa hacia una producción de aves de calidad.
Las organizaciones campesinas de la CPE piden a las autoridades públicas que no se equivoquen de objetivo estableciendo ayudas que beneficien esencialmente al sector industrial. La Unión Europea debe en primer lugar apoyar la agricultura campesina ya suficientemente amenazada. La agricultura es la encargada de alimentar al pueblo. Es una actividad demasiado frágil para dejársela a las normas actuales del comercio internacional.
[1] Grain,, El papel central de la industria avícola en la crisis de la gripe aviaria, febrero 2006.
CPE - Coordination Paysanne Européenne
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