Europa

A pesar de las crecientes pruebas de que la producción de combustibles orgánicos es responsable de la inseguridad alimentaria, el nuevo proyecto de la Unión Europea (UE) sobre energías renovables ignora las consecuencias sociales de esta actividad agrícola.

Más de 135.000 personas exigieron al Consejo Federal y al Parlamento de Suiza, a través de la campaña "Derecho sin Fronteras", que obliguen a las multinacionales con matriz en ese país a respetar los derechos humanos y el ambiente en el mundo.

Con ocasión de la cumbre Río+20 presentan en Madrid el informe “Globalizar el hambre” que expone las consecuencias devastadoras de las políticas agrícolas y comerciales de la UE para los países del Sur.

"A dos semanas de la Conferencia de la ONU sobre Desarrollo Sostenible (Río+20), reporte revela el rol del Estado español en el mercado de carbono y cómo las industrias contaminantes españolas han sido financiadas con fondos públicos tan necesarios."

La ministra gala de Ecología, Nicole Bricq, subrayó que el Gobierno francés "reafirma su oposición" a los OGM y está organizando el bloqueo del proyecto de directiva sobre los transgénicos que debía permitir la autorización país por país para salvar las resistencias.

La crítica a las falsas salidas que se perfilan en la Cumbre oficial de Río + 20 y la demostración de alternativas existentes y válidas se plasmarán en unas jornadas en Barcelona del 1 al 3 de junio.

Cientos de manifestantes se han congregado en las últimas horas ante el centro Rothamsted Research, en el Reino Unido, pidiendo el fin de los experimentos con trigo transgénico, aprobados por el Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales (Defra).

A tomada de consciência dos efeitos dos agrotóxicos sobre a saúde dos agricultores - em que reinava até agora a lei do silêncio - está apenas começando a emergir e a dar os seus frutos.