Autoridades Kaqchikel se organizan ante las agresiones del Estado contra los pueblos originarios

Con una invocación al creador este pasado 31 de mayo y 1 de junio, más de 100 líderes, entre autoridades indígenas de los 5 pueblos de Chimaltenango, San Juan Comalapa, San José Poaquil, Tecpán Guatemala, Patzún, Zaragoza, organizaciones sociales del departamento y cofradías, comenzaron el encuentro en la cabecera departamental.

Uno de los objetivos del 1° Encuentro de Autoridades y Organizaciones Comunitarias del territorio Kaqchikel de B’oko’ del departamento de Chimaltenanango se centró en discutir cómo responder a esa estrategia de cooptación y agresión de un Estado al que atribuyen rasgos coloniales, que tiene como una de sus expresiones recientes la criminalización de dos líderes indígenas Luis Pacheco y Héctor Chaclan, exdirectivos de los 48 cantones de Totonicapán. 

También se busca mantener el espacio de gobierno autónomo de las comunidades y defender sus derechos como pueblos indígenas. 

Una de las reflexiones de quienes participaron señala que, si bien durante la dominación colonial los tratos que recibieron los pueblos originarios fueron de indios tributarios, jornaleros y sirvientes ahora se les denomina como terroristas. 

El encuentro de líderes indígenas responde a un proceso que busca entender la historia colonial, que vivieron los pueblos durante la conquista española, donde se sufrió violencia, despojo, discriminación y racismo en contra de los pueblos, ahora su carácter más visible es la violencia en forma de penalización, persecución y encarcelamiento de lideres por defender el ejercicio de los derechos y de la voluntad popular en los territorios.  

Racismo despoja de poder político a los indígenas

Edgar Esquit, educador en la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), antropólogo e historiador dice que los vínculos y las alianzas entre las autoridades es importante, también lo es, agregó, conocer la historia de los Kaqchikel y las comunidades, pero por el racismo que hay en Guatemala, se limita el reconocer el pasado y la historia. 

Para Esquit enfrentar el racismo es importante, para que las familias reconozcan su pasado y no lo vean como folclor o tradiciones sin importancia. 

Para el educador, uno de los impactos de los despojos de tierra es que los pueblos indígenas no son considerados ciudadanos del país. Si bien existe una formalidad de ciudadanía en realidad a los indígenas se les pone en segundo plano y eso es despojo, “como decimos en Kaqchikel ¨Q´ais que significa monte¨, es una forma de minimizar o despreciar a los pueblos originario o, en otras palabras, que los indígenas no valen para ellos, eso limita la vida de la gente, despojarla de la fuerza, despojarla del Kux o centro que cada persona tiene, las ideas de despojo como una noción, a través de la cual vamos viendo nuestra condición y las relaciones que establecemos es algo importante.   

El racismo que se ejerce contra los pueblos indígenas los considera sin poder político, sin identidad política, únicamente les asigna una identidad cultural, como las tradiciones, indicó el educador. Para él los mayas Kaqchikel tienen una fuerza política en las comunidades y esa hay que respetarla si se quiere construir convivencias y otro tipo de sociedad, en tanto, “si se quiere seguir con la forma que se ha vivido se va reprimir esas formas de organización política”. 

Acciones del MP amenazan a la autoridad indígena

Tata Luis Majtzul, autoridad ancestral de Patzún, Chimaltenango, dijo que, para reestructurarse mejor, considerando que la organización es la fuerza de los pueblos ante la coyuntura que se está manipulando por sectores que no les gusta la democracia y que quieren afectar a las autoridades indígenas, se realizó el encuentro. Para que Chimaltenango incida en lo político a nivel departamental y nacional. 

Majtzul indicó que las formas que prohíben que los pueblos indígenas se organicen tienen que ver con el “Pacto de corruptos”, y eso se sabe a nivel nacional e internacional, que son los enemigos del desarrollo de los pueblos, “son quienes nos han invisibilizado, minimizado, piensan que no tenemos derechos por no aparecer en la ley, la ley ancestral existía antes de la invasión española hace 500 años, por ello nadie lo puede prohibir”.

Así mismo señaló que quienes prohíben el derecho a la organización son actores de algunas instituciones de justicia que están siendo manipulados por personas antidemocráticas, “la mayoría sabemos quiénes son y quién lo encabeza a nivel de justicia”. 

Este encuentro se realizó en un contexto de criminalización contra autoridades indígenas por parte del sistema de justicia. Como las detenciones de Pacheco y Chaclán, quienes fueron parte de la Junta Directiva de los 48 Cantones de Totonicapán. 

Calista Gabriel Ajq’ij (guía espiritual maya), vicealcaldesa y asesora de la alcaldía indígena de San José Poaquil, dijo que las acciones del MP que las amenazas de las autoridades indígenas responden al miedo al pueblo que se levanta y que han surgido en las comunidades y departamentos de Guatemala. 

En el caso de Totonicapán, la criminalización con sus dirigentes como Pacheco y Chaclán, es una forma de cómo el sistema de justicia no respeta y discrimina a la organización de los pueblos indígenas y sus autoridades, que han estado desde hace miles de años. 

Ante la coyuntura en el país proponen la resistencia desde lo cultural, político y espiritual desde los pueblos indígenas y no tolerar la discriminación y el racismo en pleno siglo XXI. 

Por ello aseguran que van a continuar la lucha, como en los 106 días de resistencia, -en la que los pueblos se unieron para defender la democracia ante las agresiones del Ministerio Público, -para poder defender sus derechos y que se les respete como pueblos, como seres humanos “no somos corruptos y lo que hacemos son esfuerzos de nuestras comunidades” dijo. 

El reto de la unión entre los pueblos

Marlon Son, abogado del equipo técnico de la alcaldía indígena de Comalapa, señaló que las formas de agresiones estructurales contra los pueblos se pueden enfrentar desde el ejercicio de los derechos colectivos como pueblos indígenas. 

Este es el proceso que estamos dialogando hoy, estas conversaciones de la historia de las dinámicas territoriales Kaqchikel de Chimaltenango, nos muestra el devenir histórico y la resistencia histórica del pueblo, se ven las formas de opresión de sometimiento y dominación colonial que existe, es un sistema que ha agredido y a despojado tierras, ha asesinado y ejecutado a líderes históricos, el horizonte es el ejercicio de nuestro derechos para resquebrajar el sistema de dominación colonial plantado desde hace siglos en el país, dijo. 

Al mismo tiempo Son añadió que la unidad de los pueblos, en el paro de los 106 días como ocurrió en el 2023, es compleja. Históricamente se ha tenido un sistema de alianza y de fragmentación en los distintos pueblos. 

Agregó que, en Chimaltenango, con los aprendizajes del 2023, se ha hecho un esfuerzo de caminar entre las autoridades ancestrales que se han conformado en cinco municipios.

Está ese reto de poder caminar juntas todas las autoridades a nivel nacional, hay que construir y en Chimaltenango hay una disposición de avanzar, tejer ese esfuerzo colectivo de unir fuerza entre organizaciones sociales y autoridades, dijo. 

Por su parte nana Emiliana Catú, autoridad ancestral de San Juan Comalapa, indica que estas acciones del MP en el caso de Pacheco y Chaclán hace que ellos a través de este encuentro traten de enviar un mensaje a esos poderes que han cooptado el estado.

Hacemos énfasis en lo que está pasando y al mismo tiempo es decirles a los compañeros privados de libertad que estamos con ellos, no solo Comalapa si no que todo el departamento esta con ellos, indicó.

Con este encuentro, las autoridades indígenas y organizaciones sociales buscan unirse mejor, desde el conocimiento de su historia ya que por muchos años se les ha discriminado y actualmente son señalados de terroristas por el actual sistema de justicia, que amenaza en seguir criminalizando a quienes han defendido sus derechos como lo sucedido en 2023, cuando diferentes pueblos se unieron para la defensa de la democracia. 

Fuente: Prensa Comunitaria