De África para AL: cultivos modificados genéticamente

Por Umoya
Idioma Español
País África

Los cultivos MG (modificados genéticamente) no tienen cabida en la agricultura africana (2). África corre el riesgo de convertirse en el vertedero de la industria de los cultivos MG. Los defensores de la tecnología MG venden un mensaje atractivo según el cual los cultivos MG traerán una nueva revolución verde y la solución para la hambruna que padece el continente africano. Sin embargo, si se estudia la situación detenidamente, queda claro que los cultivos MG no tienen cabida en la agricultura africana

Este documento presenta doce razones para ello:

1. Los cultivos MG contaminan los cultivos no-MG.

La coexistencia no es posible. Los cultivos MG son plantas y no se pueden controlar fácilmente. El polen puede recorrer largas distancias por medio del viento y los insectos. Esta contaminación tiene graves consecuencias para los pequeños agricultores. Por ejemplo, pone en peligro las semillas autóctonas que esos agricultores han desarrollado durante siglos y que son las que conocen bien.

2. Los cultivos MG fomentan la dependencia del suministro de semillas de las multinacionales.

La mayoría de las empresas que producen semillas MG, prohíben a los agricultores que guarden las semillas para utilizarlas al año siguiente. Esto se hace mediante complicados contratos, acuerdos y condiciones, que imponen las multinacionales. Más del 80% de los pequeños agricultores guardan en la actualidad las semillas que ellos mismos producen para utilizarlas en la siguiente temporada. Compartir las semillas es una norma cultural en muchas comunidades africanas.

3. Los cultivos MG introducen el uso de tecnologías ‘Terminator’ y ‘Traitor’.

Las semillas ‘Terminator’ son modificadas genéticamente de modo que las plantas en las que se convierten producen semillas estériles; la tecnología ‘Traitor’ produce cultivos MG que tienen que ser rociados con productos químicos para activar o desactivar algunos aspectos del crecimiento: la germinación, el florecimiento, la maduración de los frutos, etc. Las tecnologías prometen cuantiosas recompensas para las multinacionales pero condenan al fracaso a los pequeños agricultores de África.

4. Los cultivos MG aumentan el uso de productos químicos.

Más del 70 % de todos los cultivos MG que crecen actualmente en el mundo han sido modificados genéticamente para resistir a algunos herbicidas. Los agricultores que cultivan esas plantas MG tienen que utilizar herbicidas vendidos exclusivamente por las compañías que les venden las semillas MG.

5. Los cultivos MG están patentados.

Las empresas transnacionales poseen casi el 100% de las patentes de biotecnología agrícola y la mayoría de esas patentes están controladas por un puñado de empresas productoras de pesticidas. Estas empresas utilizan sus patentes para bloquear las investigaciones que no les convengan y para obligar a los agricultores a pagarles derechos de uso cada año por las semillas y por los productos químicos de los que van a depender siempre.

6. Los cultivos MG favorecen los sistemas agrícolas industriales.

Están diseñados para sistemas agrícolas caracterizados por:

Grandes granjas: En África, el 80% de la población son pequeños agricultores.
Monocultivo: Debido al pequeño tamaño de sus campos y a las difíciles condiciones medioambientales, el monocultivo no es favorable para la agricultura africana.
Subsidios: Aunque los agricultores de occidente reciben muchos subsidios, los africanos no obtienen ninguno y ni si quiera pueden recuperar el coste de su producción.
Mecanización: La agricultura de los países desarrollados está muy mecanizada pero la mayoría de los agricultores africanos dependen de la potencia de los hombres y los animales.

Dependencia de productos externos: Los agricultores africanos no pueden permitirse pagar los altos precios de los productos necesarios para el crecimiento de los cultivos transgénicos. Esta es una de las razones del fracaso de la revolución verde en África.

7. Los cultivos MG son una amenaza para la agricultura orgánica y sostenible.

La mayoría de los agricultores practican la agricultura orgánica. Por ejemplo los agricultores orgánicos practican el cultivo mixto y la rotación de cultivos. Estas prácticas se ven amenazadas por los herbicidas de amplio espectro que matan a todas las plantas, no sólo las malas yerbas. La fertilidad natural es un factor clave de la agricultura orgánica/ sostenible. Los herbicidas matan hongos y bacterias fundamentales para la fertilidad del suelo.

8. Los sistemas de seguridad de la biotecnología son difíciles de aplicar en los países africanos.

Las naciones africanas carecen de la experiencia, los equipos, la infraestructura, la legislación y los sistemas reguladores para aplicar medidas de seguridad de biotecnología eficaces para los cultivos MG. También carecen de los fondos para crearlos y se verán obligados a buscar una financiación extranjera, que aumentará aún más su ya importante deuda exterior.

9. Los cultivos MG no reducen el hambre en África.

El hambre en África no se debe a la falta de alimentos; hay suficientes alimentos para todos. El principal problema es el bajo poder adquisitivo de la población debido a la pobreza. Esta pobreza se agrava con el libre comercio dentro de un contexto de profunda desigualdad global. Con el libre comercio, los agricultores africanos tienen que competir directamente con los productos agrícolas de occidente, que reciben muchos subsidios y son comercializados. Es como un partido de fútbol en el que los pequeños agricultores jugasen cuesta arriba.

10. Los cultivos MG no resuelven los problemas de las plagas.

Los cultivos MG fomentan el uso prolongado y continuo de herbicidas y pesticidas. Como consecuencia, las plagas y las malas yerbas desarrollan inevitablemente una resistencia, obligando a los agricultores a utilizar más pesticidas y más mezclas tóxicas.

11. Los cultivos MG fomentan la destrucción arbitraria de la biodiversidad.

La biodiversidad africana es rica y compleja pero también es frágil. Los cultivos MG podrían romper fácilmente el equilibrio ecológico, lo que tendría serias repercusiones para la agricultura y todo lo que gira a su alrededor.

12. Los cultivos MG son una amenaza para la salud de las personas.

Se sabe poco de las repercusiones de los cultivos MG en la salud humana, no se han realizado estudios extensos e independientes. Pero los riesgos sí son reales, especialmente en África, donde proliferan enfermedades que en occidente han sido controladas con eficacia. El SIDA se descubrió en occidente pero actualmente está diezmando la población africana, y pocos africanos pueden permitirse comprar los fármacos retrovirales que pueden alargar la vida de los infectados.

¿Qué hay que hacer?

África tiene que aplicar el principio preventivo que aconseja no hacer nada cuando no hay garantía de seguridad para la salud y el medio ambiente. Debido a las limitaciones del continente africano, la única posición práctica y apropiada para los gobiernos africanos es declarar una moratoria para la comercialización de cultivos MG. Deberá ser así hasta que se realicen las investigaciones adecuadas sobre las cuestiones socioeconómicas, medioambientales y agrícolas referentes a los cultivos MG, y hasta que la población esté lo suficientemente informada como para llevar a cabo las consultas públicas apropiadas. El derecho de los gobiernos africanos a tomar sus propias decisiones debería ser respetado por los demás países.

Los países africanos deben invertir más en la investigación agrícola, pero tendría que ser conducida por los agricultores y centrarse en los problemas locales y específicos que afectan a sus comunidades. Ya es hora de que los gobiernos africanos y sus socios se enfrenten a las verdaderas causas de la pobreza y la inseguridad alimentaria. Se puede hacer mucho más para apoyar los siguientes aspectos:

Comercio justo y mejor procesamiento de los alimentos, sistemas de mejora de la infraestructura rural, planes de crédito que favorezcan a los agricultores, fomento de sistemas de riego y gestión de los campos de bajo coste y formación rural para mejorar las aptitudes de los agricultores locales, la producción de alimentos y el procesamientos de alimentos.

Sólo los africanos podemos aportar soluciones africanas a los problemas de África. Los demás podrán ayudar, pero los africanos, los afectados por el problema, son quienes tienen que hacer el trabajo. La mejor manera de conseguir un desarrollo sostenible es reforzar los sistemas de producción locales existentes, protegiéndolos de amenazas como los cultivos MG.

Notas:

(1) Tomado del boletín Foro Rural Mundial de julio 2007.
(2) Enviado por Umoya y A Fondo - Información Alternativa África Central.

Por Zachary Makanya (1)
Asociación PELUM - Kenya
Umoya, Federación de Comités de Solidaridad con África Negra

Adital, Internet, 14-09-07

 

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