Bolivia: con empleo de elementos químicos

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País Bolivia

Producción de soya destruyó 600 mil hectáreas de tierra orgánica del Oriente

El ministro de Asuntos Campesinos, Desarrollo Rural y Agropecuario, Hugo Salvatierra, denunció ayer que más de 600 mil hectáreas de tierra orgánica han sido devastadas en el oriente boliviano en los últimos años, por parte de empresarios bolivianos y extranjeros para las plantaciones de soya.

Salvatierra explicó que la destrucción de los bosques con enorme potencial orgánico, se produjo especialmente en los departamentos de Santa Cruz, Pando y Beni. Ahora esas tierras producen soya, pero con elementos químicos, lamentó e informó que el 60 y 70 por ciento de esas tierras están en pocas manos.

La autoridad de Estado recordó que en los últimos 10 años hubo en Bolivia una danza de millones a nombre de la pobreza en el área rural. Los gobiernos neoliberales pedían recursos a países extranjeros con el pretexto de luchar contra la pobreza, pero cuando uno va al área rural, ahí se ve una pobreza centenaria, dijo Salvatierra.

Los recursos malgastados por el Instituto Nacional de Reforma Agraria (Inra) en los últimos 10 años fueron alrededor de 100 millones dólares y apenas se saneó el 17 por ciento de las tierras. En la actualidad, el gobierno del presidente Evo Morales Aima posee 20 millones de dólares para acelerar el proceso de saneamiento de tierras en un tiempo no mayor de seis meses.

Esos recursos fueron cedidos por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para este nuevo proceso de reforma agraria que emprenderá el Gobierno, conjuntamente con las universidades públicas, el Instituto Geográfico Militar y entidades especializadas.

No vamos a seguir con esa política que se nos impone: te doy un crédito, pero le das a mi empresa para que ella te haga el saneamiento de tierras, eso significa seguir explotando a este país y eso no es solidaridad, esos créditos no nos interesan, sentenció Salvatierra.

En cambio habló de los créditos provenientes de Cuba y Venezuela a Bolivia, se trata de ayuda de tipo social para reactivar el aparato productivo y reparar los daños que ha ocasionado a la naturaleza en el área rural, en el último tiempo.

Asimismo, Salvatierra reivindicó el consumo de lo que Bolivia produce y apeló al ejemplo de los agricultores soyeros de San Julián, San Pedro y Cuatro Cañadas, en Santa Cruz, cuyo producto lo venden sin haberlo probado siquiera.

"Esos campesinos, nunca, jamás han comido su producto y tienen las más altas tasas de desnutrición, de anemia", expresó.

El Diario, Bolivia, 20-5-06

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