Chile: órgano tendrá que informar los locales donde se cultivan semillas transgénicas
El Consejo para la Transparencia de Chile acató el pedido de la Alianza por una mejor Calidad de Vida (RAP-Chile) en lo que respeta a la divulgación pública sobre los lugares, propietarios o entidades que son autorizados a cultivar semillas transgénicas en el país
A partir de la decisión del consejo, con fecha 25 de junio, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) del Ministerio de Agricultura tendrá que poner a disposición las informaciones que antes eran secretas a pedido de empresas tales como la Monsanto.
El recurso fue presentado por la Alianza hace poco más de un año. En ese período el Consejo tomó en consideración muchas investigaciones y los argumentos de todas las partes. Por fin, resolvió por unanimidad que "mantener en reserva la ubicación de los lugares de cultivos transgénicos no traerá beneficios o ventajas; por el contrario, la publicidad de la información proveerá un mayor beneficio a la sociedad". Según el Consejo, después de hacerse pública la decisión, la SAG tendrá un plazo de 15 días para ofrecer todas las informaciones sobre los lugares donde se están cultivando las semillas transgénicas.
El hecho fue bastante festejado por las entidades y movimientos que componen la Alianza y representó una gran victoria contra la Monsanto, mayor símbolo de la expansión de la industria transgénica en todo el mundo. Para la Alianza, esto sucede "en un momento de claras señales sobre decisiones del gobierno que tienden a extender las semillas transgénicas hacia el mercado interno, lo que afectaría la biodiversidad, la salud de los chilenos, los intereses de todos los productores agrícolas -convencionales u orgánicos- y los derechos de los consumidores".
De acuerdo con la Alianza, a partir de ahora el momento será de fiscalización y atención a las informaciones que se divulguen. La propuesta es hacer que los productores agrícolas tengan una mejor oportunidad para ejercer acciones locales y regionales que protejan sus derechos y los libren de la contaminación genética por transgénicos, ya que este tipo de contaminación es real y ya fue científicamente comprobada.
Los agricultores, organizaciones sociales y ambientales, y los/las parlamentarios/as también serán convocados a defender la "semilla nativa, exigir moratoria a la introducción de transgénicos en el mercado y la fiscalización de los cultivos de exportación ya existentes".
Uno de los argumentos usados por la Monsanto para mantener las informaciones en secreto era el hecho de que la empresa fuera blanco de actos de vandalismo. Las acusaciones cayeron sobre la Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas (Anamuri), que desestimó las acusaciones, pero acentuó que, como integrante de Vía Campesina, está a favor de la vida, por lo que continuará en su lucha.
La empresa también argumentó que la información privada protegía la seguridad y los derechos comerciales y económicos de la empresa.
Traducción: moc.liamg@leinad.setnarrab