Naciones del G8 no entienden que crisis ambiental es consecuencia de su estilo de vida
El grupo compuesto por Canadá, Francia, Alemania, Unión Europea, Italia, Japón, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos se reunió en Alemania con algunos países invitados, los llamados “emergentes”: Brasil, China, India, Sudáfrica y México. También tuvieron como invitados a algunos países africanos. Al analizar su Declaración del 7 de junio se observan las preocupaciones y desafíos
Esta cumbre llamada “Crecimiento y Responsabilidad” se enfocó principalmente establecer las tareas inmediatas y de mediano plazo para preservar su modelo económico, para lo cual han decido sumar a sus iniciativas a los países llamados “emergentes”, para fortalecer y expandir su modelo económico mundial, para lo cual además delegaron una serie de tareas a la OECD, ONU, FMI, BM, y otras conexas a estos organismos.
A pesar de los rimbombantes titulares de su gran preocupación por el cambio climático, en realidad el trasfondo de la reunión fue la preocupación que tienen sobre los “escollos” que tienen para seguir con su modelo de desarrollo y crecimiento, porque para esto necesitan fuentes de energía y materia prima “estables y seguras”.
Reconocen que esas fuentes se encuentran en áreas que no son tan “amigables” o identificadas con sus intereses, y por ello recurren a varios mecanismos como las alianzas estratégicas con las “economías emergentes”; ofrecen dinero a África; refuerzan su compromiso de promover y fortalecer el libre comercio; ponen a trabajar en Planes y programas a Instituciones Internacionales para garantizar la libre inversión y luchar contra la piratería; ofrecen colaboración y transferencia tecnológica de modo de contar con aliados que les ayuden a reducir los puntos de resistencia en el mundo.
Consideran que la principal fuente de energía los próximos 25 años son los fósiles y por ello hay que asegurarlos. Asimismo, dan la tarea urgente de diversificar las fuentes de energía, incluyendo la atómica.
Este documento establece claramente que la Tecnología es una herramienta fundamental del modelo neoliberal, (que, además de generar dependencia en los países en vías de desarrollo, es una forma de penetración y adopción del estilo de desarrollo que ellos promueven). Es así que definen que la solución fundamental para enfrentar el cambio climático es la tecnología, su tecnología, producida por sus empresas. Por lo expuesto en el documento, se concluye que para estos países el cambio climático no otra cosa que un negocio más al que hay que sacar todos los réditos posibles.
Al respecto es importante anotar a las potencias mundiales que la crisis climática no se resuelve aplicando “tecnologías”, que son solo herramientas, sino básicamente reduciendo el consumismo de sus sociedades, de su estilo de vida y modelos económicos de desarrollo, porque al final quienes pagamos esa factura somos países como Bolivia, con inundaciones, sequías, heladas que derivan en problemas socioeconómicos serios, cuya consecuencia directa es una la PROFUNDIZACION DELA DESIGUALDAD YLA POBREZA.
Estos desastres no son “naturales”, pero no somos todos los habitantes del planeta los responsables, sino en gran medida ese pequeño porcentaje de población (menos del 15%) al que representa el G8. Son los países llamados “desarrollados”, los poderosos económica y militarmente, los que tienen que asumir esa responsabilidad, esa Deuda Ambiental, Económica y Social con nosotros. Esa deuda, que según estimaciones de varias instituciones (entre ellas el mismo Banco Mundial) puede alcanzar al año entre 10 mil a 40 mil millones de dólares.
La Declaración del G8 también hace referencia a las Materias Primas y define una serie de tareas a sus Instituciones de modo de asegurar el abastecimiento de las mismas desde los países en vías de desarrollo.
Por otro lado, las potencias expresan su gran preocupación por la “piratería y la falsificación” que fundamentalmente se da en los países en vías de desarrollo, para lo cual dieron a sus Instituciones la tarea de reforzar sus derechos de propiedad privada.
No hay que olvidar que en los países que ellos llaman "emergentes" existen sectores productivos y de servicios que se hacen "competitivos" en términos de reducción de costos pues logran burlar el actual sistema de propiedad intectual y no pagan patentes o regalías a las transnacionales dueñas de marcas y patentes. En tal sentido las naciones del G8 han definido agudizar la lucha contra la piratería y la falsificación, así como trabajar en el reforzamiento de su sistema de propiedad intelectual.
A modo de conclusión, es importante notar que el tema de fondo de la Cumbre del G8 es que ésta es la reunión donde se definen las líneas políticas del neoliberalismo colonialista. Los gobiernos del G8 han definido su agenda de trabajo para preservar los intereses de sus transnacionales en el mundo.
Bolivia Soberana, Internet, 13-06-07