Venezuela: comunidades siguen lucha contra la contaminación

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País Venezuela

Vecinos anuncian cierre de vías y protestas si aprueban permiso para Saint Gobain

Aunque la pelea no parece ser pareja, las comunidades de San Jacinto y La Ceiba están dispuestas a exigir, tal como lo plantea la Constitución de la República, el derecho a vivir en un ambiente sano. Los vecinos advierten que si el Ministerio del Ambiente llega a aprobar la ampliación de la capacidad de producción de Saint Gobain Materiales Cerámicos de Venezuela, sin antes obligarlos a adecuarse ambientalmente, realizarán protestas y el cierre de la autopista.

Los especialistas sugieren realizar estudios de suelo para determinar el nivel de PH de los suelosAhora sí se colmó la paciencia de los vecinos de San Jacinto y La Ceiba. Estas comunidades se cansaron del "silencio cómplice" del Ministerio del Ambiente y están dispuestos a cerrar la autopista y exigir un referéndum para evitar que los gases contaminantes generados por el proceso productivo de la empresa Saint Gobain Materiales Cerámicos de Venezuela, los continúe sentenciando a la muerte.

Los residentes de San Jacinto y La Ceiba aseguraron que seguirán levantando sus voces de protesta contra la ampliación de la planta de producción de carburo de silicio de la empresa Saint Gobain Materiales Cerámicos de Venezuela. Exigen la realización de un referéndum en las comunidades afectadas para decidir si la empresa se queda o se va.

Máxima Blanco, vecina de San Jacinto asegura que la consulta que se realizó el pasado viernes para conocer el plan de ampliación de la empresa fue "un engaño, porque este es un monstruo que está acabando con todo, con los animales, con las plantas... entonces ¿cómo estaremos por dentro los seres humanos que vivimos allí? Esa empresa se instaló después de que San Jacinto estaba poblado y nosotros no podemos permitir esta canallada, porque esa contaminación está acabando con nuestros niños y jóvenes".

El sentir de la señora Blanco es el mismo de más de 4 mil personas que viven en los asentamientos campesinos La Ceiba y San Jacinto. Todos exigen una respuesta definitiva a la grave situación que están viviendo desde hace muchos años y que les ha ocasionado un sinfín de enfermedades respiratorias, alérgicas y de la piel y grandes pérdidas por la muerte de animales de corral y daños considerables en los cultivos.

A pesar de las constantes denuncias que ha realizado la comunidad y de las reiteradas comunicaciones que han enviado a la dirección regional del Ministerio del Ambiente, no han obtenido respuesta. Los vecinos del sector de San Jacinto refirieron que el domingo antes de la consulta fue el único día en el que la comunidad recibió a los representantes del Ministerio del Ambiente, con ellos se hizo una asamblea pero al final no hubo ninguna solución definitiva para su problema.

Sin apoyo
Blanco es enfática al advertir que a partir de las 12 de la noche "se siente un olor terrible. Con esa empresa allí tenemos la muerte cada vez más cerca, esa planta es un monstruo".

"El Ministerio del Ambiente no está apoyando a la comunidad, ellos están apoyando a la empresa, y es muy lamentable decir que el Ministerio del Ambiente en lugar de estar al lado del pueblo y a favor de la comunidad está a favor de un monstruo, continuó. El Ministerio del Ambiente no está escuchando la petición de unas comunidades que están hablando, y es muy lamentable", dijo.

La señora Blanco advirtió que la lucha de la comunidad contra la empresa Saint Gobain Materiales Cerámicos de Venezuela irá más allá. "Si es necesario que tranquemos la autopista, lo vamos a hacer, porque no se puede aupar esto que están haciendo con nosotros. La prioridad debemos ser los seres humanos no una empresa que está contaminando todo".

"Ya cuando Sidor estaba instalada y funcionando en San Jacinto se cosechaba y habían buenas crías, los animales no se nos morían, nadie sufría de problemas respiratorios. Entonces no pueden decir que la culpa es de Sidor o de Alcasa... no, nosotros estamos bien conscientes de las cosas que están pasando en este país y nos hemos capacitado. Quienes hayan pensado que en San Jacinto iban a encontrar burros e ignorantes que no sabían de ambiente están muy equivocados, porque nosotros sí sabemos. Nosotros somos pobres pero capacitados", dijo.

"Algo está pasando"
El ingeniero agrónomo Oswaldo Fuentes, aprovechó la consulta pública que se hizo este viernes para plantear su preocupación por la situación que viven las comunidades de San Jacinto y La Ceiba.

El especialista considera que en estas comunidades se están presentando indicios suficientes como para iniciar un proceso de investigación para determinar qué es lo que está ocurriendo.

Apuntó que hacia la zona sur-oeste de San Jacinto los vecinos están enfrentando una serie de problemas tales como los altos niveles de corrosión de todos los enseres domésticos y estructuras metálicas, repunte de las enfermedades respiratorias y dermatológicas en la población y la afectación de los ecosistemas.

"En materia de salud humana se ha podido verificar el auge de enfermedades respiratorias como sinusitis; en lo que se refiere a la salud animal hay una alta incidencia de enfermedades sobre todo en aves de corral y en gallinas ponedoras, lo que imposibilita la producción sustentable en esta zona", dijo.

El ingeniero precisó que en la vegetación se han detectado manchas y áreas quemadas en especies sensibles como la sábila y enfermedades foliares en los cultivos y hay "otras afectaciones que nos dicen que está pasando algo".

Fuentes considera que "si la contaminación está generando todas estas afecciones en las plantas y los animales es necesario investigar para detectar qué es lo que está pasando".

El especialista considera que es necesario determinar la acidificación de los suelos, por cuanto allí podría estar la clave del problema. Además de que en esta comunidad, las fuentes de agua se encuentran en el subsuelo, pues son los acuíferos los que los proveen del vital líquido.

"Si hay lluvia ácida, la alta permeabilidad podría generar la contaminación de los acuíferos, y eso incide en la producción agrícola y también en los acuíferos", dijo.

Otro indicador, que a juicio del especialista no hay que perder de vista, son los altos niveles de oxidación que se presentan en el área, sobre todo en el sector vientos abajo de la empresa. "A las estructuras metálicas, los techos y todos los enseres hay que hacerle un permanente mantenimiento. Aquí hay que investigar, si esas emisiones están por debajo de los niveles permitidos, entonces creo que hay que profundizar esa metodología y tiene que ser incorporadas a la investigación las comunidades que están en la zona".

"Todos los estudios que se han hecho en San Jacinto parecen revelar que la planta está en los niveles, pero en la práctica tenemos que estar conscientes de que hay una situación real en las comunidades aledañas que están afectadas mayormente -según mi opinión- por la actividad industrial de esta planta. Es posible que haya que hacerse estudios atmosféricos más detallados, pero he podido percibir la afectación que hay en la zona por las emisiones de la empresa en la salud, en las actividades agropecuarias y cultivas, y también sobre las infraestructuras".

El ingeniero considera que en los cultivos "hay indicadores de una sensibilidad en algunos tipos de plantas, tales como la sábila que se ven manchadas y se ve la película de las emisiones directamente. A pesar de que nuestros suelos son de naturaleza ácida, los componentes contaminantes como el azufre potencian la acidez, potencian la corrosión, entonces es absolutamente necesario hacer un estudio inmediato del suelo y los acuíferos, porque el agua que consumen estas comunidades viene del subsuelo".

Referéndum urgente
Juan Blanco, representante del sindicato agrario de La Ceiba, considera que la única vía para solventar el problema que enfrentan las comunidades de San Jacinto y La Ceiba es hacer un referéndum para consultar la opinión de los vecinos, y "si se hace esa consulta el 99% de la población no está de acuerdo con que la empresa se quede allí".

"Vamos a hacer un referéndum para ver si la empresa se queda o se va... y si lo hacemos, estoy seguro que el 99% no quiere que la empresa se quede. ¿Por qué no convocan un referéndum o una consulta popular?", dijo.

Blanco aseguró que con el caso de Saint Gobain ha habido un "quiquiriguiqui entre los que dan los permisos violando las leyes. ¿Por qué se tienen que violar los decretos y las leyes, ¿cómo es posible que se esté consultando a la comunidad cuando los trabajos de construcción ya están hechos?... esto es una burla", dijo.

"Yo creo que el Ministerio del Ambiente ahora sí tiene que ponerse fuerte, porque nosotros vamos a hacer si es necesario una huelga, o el cierre de la autopista si les dan ese permiso. Si no nos paran vamos a utilizar todos los medios necesarios para evitar que ese proyecto de ampliación se dé, lo que tienen que hacer es mejorar las fallas que nos tienen a nosotros sometidos a enfermedades", dijo.

El líder sindical está convencido de que si las comunidades hacen una manifestación exigiendo un "alto a la contaminación" conseguirán el apoyo "de todo el mundo a nivel nacional e internacional.

En esta oportunidad los vecinos de San Jacinto y La Ceiba están dispuestos a hacer todo lo que sea necesario para evitar que la contaminación los siga afectando como hasta ahora. Insistieron en que si el Ministerio del Ambiente otorga la permisología la alternativa que les quedará será la protesta de calle.

"Informe deficiente"
Francisco Delascio, presidente de la Fundación Jardín Botánico del Orinoco, considerado una autoridad en temas de botánica, fue enfático al rechazar el informe presentado en la consulta pública de la empresa Saint Gobain Materiales Cerámicos de Venezuela por considerarlo "deficiente" y lleno de inexactitudes.

"Nadie es dueño de su ambiente, todos somos integrantes de un ambiente y hay normas que hay que respetar. La empresa Saint Gobain presentó en la consulta pública un informe de vegetación, pero a mi juicio ese informe es muy deficiente".

- ¿Por qué es deficiente?
- Porque ahí falta realmente un inventario en diferentes épocas del año, falta la toma de muestras... tan es así, que la deficiencia se ve en los listados que ponen nombres de plantas que están mal escritos. No estoy atacando ni a la empresa consultora, ni a la empresa, sencillamente estoy emitiendo un juicio profesional.

El único centro de investigación botánica que existe en la región Guayana está en la Fundación Jardín Botánico del Orinoco que es el Herbario Nacional de Guayana. "En este centro nosotros podemos sugerirle a la empresa y a la consultora un análisis".

Precisó además que si la empresa habla de utilizar "cortinas vegetales" para que recojan el polvo, tiene que explicar "qué tipo de cortinas son, porque puede ser que estén utilizando árboles que no son propios para esa función. Es mejor asesorarse con las personas que sí tenemos conocimientos en esa área".

Delascio explicó que la lluvia ácida está arriba y cae sobre las hojas de los árboles y el suelo, "entonces a mi juicio es necesario profundizar la investigación. Nosotros podemos ayudar a esas empresas sean privadas o del Estado para darles una asesoría. Nosotros somos un organismo de investigación del Gobierno que tiene un reconocimiento a nivel nacional e internacional en todo lo que tiene que ver con el levantamiento florístico, reconocimiento ecológico".

Correo de Caroní, Venezuela, 11-10-05

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