Urge reformar las políticas europeas de agrocombustibles para reducir sus impactos sociales, climáticos y ambientales

¿Proteger las inversiones de la industria o garantizar que los combustibles no compitan con la alimentación humana? El debate sobre los agrocombustibles alcanza la próxima semana un momento clave. La Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo deberá decidir sobre una política de transporte más sostenible, en la que los carburantes reduzcan su impacto social y ambiental. Coalición Clima, la Coordinadora de ONGD-España y Plataforma Rural han enviado una carta a los miembros de esa comisión reclamando valentía frente a las presiones.

Los agrocombustibles son biocarburantes producidos con materias primas de origen agrario. Tienen impactos negativos sobre el cambio climático, la seguridad alimentaria, y el acceso a recursos imprescindibles como el agua o la tierra. Sin embargo, persisten los sectores que los defienden como energías renovables y limpias.

Se habla de agrocombustibles de primera generación, los que proceden de cultivos alimentarios, y de segunda generación, cuya materia prima no son alimentos. Estos últimos pueden provocar igualmente impactos sobre el territorio y el medio ambiente.
Y es que cuando la tierra se usa para la fabricación de carburantes, desaparece la posibilidad de que ésta sea empleada para cosechar alimentos e, indirectamente, se fomenta la deforestación en otros territorios.

Para acceder a la carta (PDF) haga clic en el enlace a continuación y descargue el archivo:

Temas: Agrocombustibles

Comentarios