Argentina: se profundizan las políticas represivas hacia los movimientos campesinos

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País Argentina

Brutal desalojo en Córdoba. “Este no es un caso aislado sino que representa un modelo de producción que viene desalojando a los pobladores ancestrales del monte dejándolos sin oportunidad de vida, sin sus recursos, sin sus medios de sustento"

Ayer por la mañana desalojaron a integrantes del Movimiento Campesino de Córdoba que vivían desde hace dieciocho años en un campo del paraje El Medanito, Departamento de Pocho, ubicado a 50 kilómetros para el norte de Villa Dolores.

Más de cincuenta policías se apostaron desde las nueve de la mañana alrededor de la propiedad e impidieron que los vecinos se acerquen a las familias para brindar su apoyo. Con un desmedido despliegue policial que incluyó efectivos de civil, los uniformados se dedicaron hasta última hora de la tarde a expulsar por completo a la familia Pirina Salas e Iván Calderón.

Carolina Moyano, integrante de la Unión Campesina Traslasierra detalló la violencia y la tensión que se vivió: “Los sacaron del predio de forma violenta. Sacaron a la dueña de casa de los pelos y a los chicos que todavía dormían. Fue un atropello tras otro, se tiraron todas las propiedades de la familia sobre un camino provincial de tierra y de ripio a mil metros de las viviendas. Se llevaron a los animales y los dejaron sueltos sobre el camino provincial. Todo esto fue un saqueo policial”. Los animales eran el único sustento de los campesinos para subsistir. Por último, la policía derribó el rancho y arrebató una cámara filmadora con la que estaban grabando lo que sucedía.

El Movimiento Campesino de Córdoba expresó su solidaridad con la familia Calderón y denunció la responsabilidad del empresario Manuel Aires Do Nacimiento en el desalojo, quien justificó la orden judicial negando el derecho ancestral de quienes habitan el campo hace tantos años. “Esto deja en evidencia el accionar de la justicia. Una vez más se avanza sobre una familia que trabaja día a día el campo y que produce y lo sostiene desde hace largos años. Este desalojo se enmarca dentro del accionar que se lleva adelante sobre los movimientos campesinos, como consecuencia del avance de la frontera agropecuario”, señalaron.

En la última década, las grandes producciones amenazaron con desalojar a las poblaciones ancestrales. Se extendió el cultivo de papa de forma industrial y esto produjo un avance en la frontera productiva con cultivos como soja y trigo.

“Este no es un caso aislado sino que representa un modelo de producción que viene desalojando a los pobladores ancestrales del monte dejándolos sin oportunidad de vida, sin sus recursos, sin sus medios de sustento, teniendo que integrar los barrios marginales de la grandes ciudades donde sabemos que no hay alternativas laborales. Además, genera desarraigo, se pierde el vínculo con la naturaleza, la tierra, la cultura y el trabajo que hay en cada familia”, declaró Carolina.

En la actualidad, la familia se encuentra en la calle y sin sus pertenencias. Ante la consulta de cómo responder a esto, Carolina afirmó: “La única posibilidad es resistir y para eso es necesario organizarse. Desde el Movimiento Campesino de Córdoba queremos mostrar que este modelo no da alternativas y por eso nos organizamos para luchar.”

Fuente: Prensa de Frente

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