Argentina: unas tenazas por ahí: campesinos de Córdoba organizados

Cercados por alambre, los pequeños productores campesinos de La Rinconada, Dpto. Río Seco, Córdoba, buscan hacer escuchar su reclamo exigiendo que las autoridades políticas y judiciales de la provincia tomen cartas en el asunto. Marcos Vargas de la Unión Campesina del Noreste de Córdoba / UCAN nos cuenta la situación

¿Cuál es el conflicto en La Rinconada?

MV: Los compañeros del campo están sufriendo el alambre, producto del empresario René Fritzler. Son treinta familias que hoy están encerradas y no pueden llevar sus animales a tomar agua y todo lo que esto significa en la producción que venían haciendo ellos, son campos comunitarios. En todos los parajes hay 350 familias que llevan el agua del Río Dulce y también han sido afectadas.

¿Cómo se están organizando?

MV: Hace bastante que estamos en la zona con los compañeros campesinos organizados. En principio no podíamos entrar, por todo lo que demandaba políticamente, es una zona muy complicada para entrar, son como 200 km de tierra, de ruta, y hay que entrar a caballo. Se han organizado los compañeros y hoy venimos haciendo talleres, organizando la producción tradicional que se venía realizando desde hace años. Estamos yendo a la Fiscalía, haciendo la denuncia, viendo los expedientes, judicialmente estamos haciendo todo. Hay una ley provincial, la 9150, que es ley de poseedor. Aquel que tenga más de 20 años en una tierra que la está produciendo, es del poseedor y la familia por más que no tenga el título. La Provincia no hace nada. En la Fiscalía está parado el caso.

Todos comparten ese campo, así sea vecinos de otras comunidades, pasan por ese campo, hacen pastoreo, no es de uno o de otro dueño, es de todos. Han producido ancestralmente así y han mantenido esa lógica de vida tradicional que venía de sus abuelos, sus padres.

Estamos haciendo escuchar la voz del compañero del campo que no se escuchaba, que son estos atropellos del empresario, no dejar salir a los chicos que van a la escuela, tiene candados en los portones, hay seguridad, tiene todo alambrado. Con esto de la sequía, todos los compañeros del campo llevan sus animales, hay mucho vacuno y cría de cabras, al Río Dulce y ahí están dos o tres meses. Son campos comunitarios, nunca tuvieron el alambre. Significa muchas cosas para los compañeros del campo.

¿Cómo es el manejo comunitario?

MV: Ancestralmente estos compañeros nunca han tenido el alambre, todos comparten ese campo, así sea vecinos de otras comunidades, pasan por ese campo, hacen pastoreo, no es de uno o de otro dueño, es de todos. Han producido ancestralmente así y han mantenido esa lógica de vida tradicional que venía de sus abuelos, sus padres. Estamos hablando de 23.000 hectáreas, más de 15 km alambrado el Río Dulce. Es impresionante el alambrado que hay ahora. Hay compañeros que quedaron del otro lado y tienen que dar una vuelta tremenda, si eso demanda 2 horas y media para entrar a esos campos, hoy en día lo están haciendo en 5 horas. Muchos animales van cansados. Vienen de comunidades lejanas para llegar al Río Dulce.

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