Manuel E. Yepe

Para los casi mil millones de hambrientos del planeta poco significa el Día Mundial de la Alimentación, porque no tienen tiempo ni fuerzas para exigir la solidaridad que la comunidad mundial ha acordado para ellos, sin que nada se mueva por culpa de un sistema socioeconómico global que descansa en el egoísmo

Día mundial de una alimentación en crisis

'Los seres humanos están destruyendo la naturaleza a un ritmo sin precedente y, en el año 2050, se necesitarán cada día los recursos naturales de dos planetas Tierra si las tendencias actuales continúan', decía el informe conjunto 2006 de las organizaciones no gubernamentales estadounidenses Fondo Mundial de la Naturaleza (World Wildlife Fund) y Red de Ruta Global (Global Footprint Network) en el que también destacaban la singularidad de Cuba como único país que ha alcanzado un alto nivel de desarrollo, incluyendo buenos sistemas de salud pública y educación, sin más recursos que los sustentables

El problema está en el modelo de desarrollo

La humanidad no fue capaz de valorar a tiempo, ni siquiera ha valorado bien aún, una amenaza para su propia supervivencia que ya ha dejado de ser perspectiva para convertirse en trágica actualidad

Los riesgos que corremos todos. El cambio climático ya comenzó