Osvaldo Bayer

Cuando uno viaja por este increíble país queda anonadado por sus bellezas y por sus problemas. Pareciera que estamos peleados definitivamente con la palabra racionalidad. “Todo se vende, nada se conserva”, podría ser nuestro lema. Pero hay algo diferente: los pueblos no se rinden. De Esquel a Chilecito, por ejemplo, se pelea firme contra las mineras envenenadoras de aguas y tierras

Argentina: “Leleque no pagar”. Territorio Mapuche recuperado

"Tú, indio del Ande, mestizo de la Puna, huésped de Buenos Aires, fuiste echado a patadas. Roto quedó tu erkencho. Destrozado tu bombo. Con las hilachas de tu pobre poncho enjugaste tu llanto. Tu llanto, hermano kolla. ¡Cómo me duele tu llanto que es el mío y el de todos los que animamos nuestro corazón para mostrar la injusticia de tu voz! Ahora marcharás camino del regreso, que son para tu pueblo caminos de derrota. Allá conversarás, superada tu angustia, con tono más altivo. ¡Supay Huarkanka Huachaska!"

Argentina: las vaquitas son ajenas... Homenaje vivo para Atahualpa Yupanqui

Aprendamos de nuestros niños que, contra el hambre y la miseria vienen marchando desde Misiones, llevando adelante el lema: “Ni un pibe menos, el hambre es un crimen"

Argentina: las vaquitas son ajenas, las penas son de nosotros

El periodista y escritor Osvaldo Bayer, entrevistó a los seis campesinos paraguayos presos en la cárcel de Marcos Paz. "Seis paraguayos que luchan para que la tierra sea de los que trabajan o de la acción mancomunada de la cooperativa. En Paraguay, que siempre lleva el signo de Stroessner. Ahora seguridad de Duarte Frutos y Bush. La mescolanza que da la seguridad de que nada va a cambiar. El agua, ahora, como antes el oro y el petróleo. El agua, señores, hay que asegurar su futuro. Y los fuertes asegurarse el agua de los débiles dependientes"

Campesinos Paraguayos presos y la sombra del Cóndor - Argentina

En épocas donde todo se vende y se arrasan los bosques milenarios y las pampas llenas de pájaros, los pueblos que viven de hace siglos y que siempre cuidaron la naturaleza como si fuese el único paraíso –y esto lo dijo Humboldt y no yo–, siguen incansablemente luchando –poniendo el cuerpo y no las armas– por el derecho a vivir en sus tierras

Argentina: los indios extranjeros del general Harguindeguy

Las bombas siguen cayendo en el mundo, ahora, al parecer, hasta se forman en la leche de las mamaderas de los bebés que suben a los aviones

Argentina: los indios extranjeros del general Harguindeguy

He estado en Quimilí. Sí, Santiago del Estero. Tierra de los colores pintados de la belleza. Y de la música de montes y decires. Tierra para pensar en siglos, en silencios, en palabras cantadas. Bien, allí, la tremenda injusticia de la sociedad argentina, a través de décadas interminables. La gente de la tierra sin tierra. La tierra es de los especuladores

Argentina: Quimilí. ¿Llegarán ellos a tener tierra para sembrar semillas y poder continuar cantando esas melodías del pueblo?

Ya no caben aquí las ironías ni el “lo habíamos dicho”. Aquí cabe sólo el inmenso dolor por el mundo que vivimos, pensando en los que hoy son niños y les tocará vivir tiempos cada vez más difíciles, fundados en el egoísmo y la estupidez de los poderosos

El color de la pobreza