Xun Sero

Foto: Raúl Ortega

Entre la violencia crecieron las niñas y niños tsotsiles que hoy tienen menos de 30 años. Y, aunque no han vivido otra cosa, no la normalizan. De la precarización que llegó con la guerra contrainsurgente en 1997 y del desplazamiento posterior, el bordado vino no sólo como sustento económico, sino también como forma de organización entre mujeres. Para juntarse entre ellas.

Tejiendo la memoria