Boletín N° 429 de la RALLT

CAMBIOS DE PRECIOS DE LOS ALIMENTOS PIDE REFORMAS AL SISTEMA DE BIOCOMBUSTIBLES

Bridges Trade BioRes • Volume 11 • Number 9 • 16th May 2011

Varios productos agrícolas, especialmente el azúcar, comenzaron con una fuerte corrección de precios a la baja recientemente, lo que sorprendió a los analistas. El trigo, el maíz y la soja, también tuvieron descensos moderados. Sin embargo, los precios se mantienen en niveles altos en términos históricos. Estas oscilaciones en los precios de los productos básicos agrícolas son el resultado de la conversión de Brasil, el mayor productor mundial de etanol, en un gran importador de combustible.

Los precios del azúcar tuvieron un récords en febrero, aunque desde entonces han disminuido un poco. El Mamoun Amrouk, un experto de azúcar en la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), considera que "los precios han subido mucho más alto que lo que la teoría pudiera sugerir," lo que implica que los factores de los mercados financieros podrían haber desempeñado un papel importante.

Las estimaciones de una buena cosecha en Tailandia y la recuperación de la producción en Brasil, los dos mayores productores de azúcar, pudieron ayudar a satisfacer la demanda en los mercados internacionales. Funcionarios tailandeses están especulando con la producción en el país, y los output del país podrían ser un tercio más altos que la prevista en diciembre, dice Amrouk. Agregó que es probable que la reposición de los stocks domésticos nacionales sean el primer paso para los grandes productores, con las exportaciones a los mercados extranjeros en segundo lugar.

PRECIOS DE LOS ALIMENTOS

Un nuevo informe de la ONU describe los precios de los productos agrícolas como esencialmente estables en abril. El índice de la FAO de precios de los alimentos, una canasta compuesta de precios de las commodities agrícolas, ahora está a sólo cinco puntos por debajo de su pico de 2010, y muy por encima de los niveles alcanzados durante la subida de los precios a principios de 2008.

Tomando nota de que era importante para entender las "causas reales" de las fluctuaciones recientes de los precios, Concepción Calpe de la FAO explica que la volatilidad actual puede estar relacionada con grandes actores financieros en movimiento "dentro y fuera" del mercado de los productos básicos.

Hizo hincapié en que no había información nueva para muchos de los cultivos que experimentan cambios en los precios. La situación para el trigo y el maíz sigue siendo "apretado", dijo. Sin embargo, los precios de los productos básicos han fluctuado en los últimos días. Informes del Financial Times indica que la cosecha de trigo del hemisferio norte todavía no ha recibido lluvias suficientes.

Incluso una caída sustancial en los precios del azúcar es probable que mejore el índice de la FAO de precios de los alimentos hacia abajo, si los precios de otras materias primas siguen siendo altos, de acuerdo a Calpe. El producto representa sólo el siete por ciento del índice total, mientras que la carne, lácteos y cereales, representan casi las tres cuartas partes.

El Banco Mundial, la FAO y otros han advertido que los precios de los alimentos tienden a conducir a millones más en el hambre.

LAS POLITICAS DEL ETANOL DE ESTADOS UNIDOS

En los EE.UU., los biocombustibles - etanol, principalmente a base de maíz - están fuertemente subvencionados, protegido por altos aranceles, y se benefician de los mandatos federales de mezclas. Las recientes propuestas en el Congreso de los EE.UU. tratar de vincular la producción de biocombustibles a los precios del petróleo, la concesión de subvenciones del etanol sólo cuando el precio del combustible fósil por debajo de un umbral determinado. Bruce Babcock de la Universidad Estatal de Iowa lo describió como "una forma potencialmente políticamente viable de eliminar" el programa de subsidio al etanol.

Babcock y Brian Wright, de la Universidad de California han argumentado de manera independiente que los mandatos que requieren el uso de un porcentaje mínimo de biocarburantes en el combustible del automóvil, tales como las de los EE.UU. para el etanol, ayudan a subir el precio de los alimentos, particularmente para el maíz.

Propuestas por los senadores Chuck Grassley (republicano por Iowa) y Kent Conrad (demócrata por Dakota del Norte) de cortar los créditos fiscales a la industria de los biocombustibles en los próximos dos años e introducir gradualmente un enlace con los precios del petróleo. Una propuesta que compiten otra presentada por los senadores Dianne Feinstein (Demócrata por California) y Tom Coburn (republicano, Oklahoma) que propone eliminar completamente a los impuestos de créditos y aranceles a la importación, la apertura del mercado a la competencia internacional a finales de año.

IMPORTACIONES BRASILEÑAS DE ETANOL

Brasil, una potencia agrícola, durante la crisis del petróleo de la década de 1970 se propuso producir la sufiente cantidad de etanol basado en caña de azúcar para ejecutar una transformación importante en parte de su economía, la institución de los mandatos de mezclas de gasolina con etanol. Aunque la política farfulló a veces, con escasez en el suministro en la década de 1980, en los últimos años el país es descrito como la "Arabia Saudita de los biocombustibles." A medida que el precio del petróleo ha aumentado en los últimos diez años, el etanol se ha convertido en una alternativa cada vez más viable.

Tierra abundante, agua y mano de obra que permite al país cultivar caña de azúcar barata que se considera que generan menos emisiones de gases de efecto invernadero durante su ciclo de vida que el etanol a base de granos producidos en otros lugares. Aunque el gobierno brasileño no provee subsidios para el etanol, un mandato de mezcla ayuda a asegurar una fuerte demanda para el combustible.

Las importaciones brasileñas de etanol se han disparado debido a una combinación de malas cosechas de caña de azúcar, los altos precios mundiales del azúcar fomentan las fábricas nacionales para convertir la caña en azúcar en lugar de etanol, y la considerable valoración del real brasileño frente al dólar. Según el Financial Times Brasil importó 70 millones de litros de etanol a los EE.UU., frente a 1 millón de litros en 2009.

El real brasileño se ha disparado en un 50 por ciento frente al dólar en los últimos dos años, debido a que el capital extranjero ha aumentado en el país asociado con un mercado interior en auge, y de algunas de las más altas tasas de interés reales en el mundo. Mientras tanto, la política monetaria ultraflexible en los EE.UU., dirigidas a estimular el crecimiento y el empleo, ha debilitado al dólar. El resultado ha sido que las exportaciones de etanol de EE.UU. sea mucho más barato en Brasil de lo que solía ser.

Expertos como Marcelo Moreira del Instituto de Estudos do Comércio e Negociações Internacionais (Icone) argumentan que el crecimiento de las importaciones de etanol en Brasil no se debe sólo a la valoración de la moneda o a los cambios en los precios de los productos básicos solamente. También culpó a la falta de inversión en este cultivo que está hambriento de, así como a un récord en las ventas de vehículos flex-fuel que han impulsado un aumento de la demanda. Según Moreira, el etanol no ha sido competitivo con la gasolina en gran parte del país durante los últimos dos meses debido a esto. Añadió que una oscilación estacional de la oferta, junto con las bajas existencias, "ha dado lugar a un auge de los precios en lugar de una escasez" y espera que los precios bajen pronto ya que la zafra recién ha comenzado en algunas partes del país.

Es revelador que las importaciones de etanol de los EE.UU. van en gran medida a la parte noreste de Brasil. Moreira explica que se debe en gran parte a diferencias estacionales y climáticas. El país no tiene un régimen de existencias o reservas que puedan suministrar la enorme demanda. El gobierno se está moviendo para crear un sistema de informes, propuestas y ha llenado a las exportaciones de azúcar de impuestos.

El Ministerio de Energía ha establecido objetivos para aumentar la participación de Petrobras en la producción y distribución de etanol. Los objetivos no tienen carácter vinculante, sino simplemente una dirección en las políticas. Actualmente la empresa produce aproximadamente el cinco por ciento de etanol del país, una cifra que el gobierno desea que aumente a 50 por ciento, según Moreira.

En declaraciones a Puentes, David Laborde del International Food Policy Research Institute, sugiere que los bajos márgenes de ganancias para el azúcar atrajo relativamente menos inversión extranjera directa que las que hubo en otros sectores agrícolas, como la soja y la ganadería. Además, señaló que la fuerte rentabilidad a corto plazo de otros segmentos de la economía brasileña hicieron que el sector de la agricultura no sea el destino preferido para la inversión, de lo que de otro modo podría haber sido.

A pesar de que las políticas comerciales juegan un papel importante en la elaboración de incentivos para la producción de etanol, el azúcar y otros productos agrícolas, Babcock supune que los cambios propuestos en la política de EE.UU. "no va a ayudar mucho a Brasil" sobre el etanol si los precios siguen siendo altos.

Otros, como Amrouk, sugieren que el "mercado de los biocombustibles es un mercado distorsionado", uno donde "se amplifica ley de la oferta y la demanda por la intervención pública."

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ALGAS TRANSGÉNICAS. ¿SON UNA AMENAZA?

Los buscadores de nuevas fuentes de energía han identificado que las algas pueden ser usadas para la producción de biodiesel. Ya se han hecho algunas pruebas de vuelos que han usado combustible a partir de algas, puro o en mezclas.

Con el uso de algas como fuente de agrocombustibles, surge también el interés de manipularlas genéticamente ya sea para que crezcan más rápido, para que produzcan más lípidos (que es la materia prima del biodiesel), para que produzcan genes suicidas y otras características que en definitiva ayudará a incrementar las ganancias de las empresas que están en el negocio de los agrocombustibles.

Algunos críticos, aun aquellos que apoyan el desarrollo de algas transgénicas, temen por la manera como se está desarrollando esta nueva industria, porque podría ir en detrimento de la salud ecológica.

Por ejemplo, de acuerdo a David Haberman, experto en bioenergía y el consultor, no está plenamente conocido el papel de las algas en la salud del ecosistema, por lo que la creación de algas genéticamente modificadas - que están a punto de salir del laboratorio hacia el medio natural – se ha hecho sin mucho conocimiento de las consecuencias que tendrá esta liberación, lo que es una idea de miedo, dice.

"La realidad es que nadie tiene una comprensión clara de las interacciones", dice Haberman. "La falta de estudios de los peligros potenciales es de gran preocupación."

Haberman llamadas algas "el hidrógeno del mundo de las plantas." El organismo entero puede ser fácilmente un aerosol y recidir en la ropa, en el pelo, en los pulmones y por lo tanto puede escapar de un ambiente controlado. Si eso ocurre con las cepa transgénicas se teme que estas podrían competir con cepas naturales y causar un crecimiento descontrolado.

Tom Allnut, el vicepresidente señor de investigación y desarrollo de una empresa que trabaja con algas, Phycal; cree que algunas de las preocupaciones acerca de las algas transgénicas son válidos. Dado que las algas son organismos "cosmopolitas", le preocupa la transferencia de genes horizontal sobre la creación de resistencia a los antibióticos en las cepas silvestres de algas y el hecho de que podría aumentar las tasas de crecimiento en todo el mundo.

Otras compañías están experimentando también con algas de similar manera.

Sapphire Energy, que firmó un acuerdo de investigación de varios años con Monsanto a principios de este mes, dice que sus algas - ellos han creado miles de nuevas cepas - están diseñados para ser competitivas con las cepas silvestres. Al igual que un animal domesticado en libertad en la naturaleza, Zafiro dice que sus algas serán equipadas para vivir fuera de un ambiente controlado.

Investigadores de Synthetic Genomics, dirigida por el famoso biólogo Craig Venter y fuertemente financiado por Exxon, han aludido a la creación de un gen "suicidia" que matará a una alga si escapa al laboratorio. Sin embargo, la empresa dice que no está desarrollando actualmente el rasgo.

Y la compañía israelí TransAlgae está “creando” algas con las características que les paraliza en la naturaleza – como quitarles su capacidad de nadar o de absorber CO2 en ciertos ambientes. La compañía también dice trabaja en el desarrollo de un gen autodestructivo.

Tanto el Departamento de Energía como el Departamento de Agricultura de EE.UU han invertido decenas de millones de dólares en proyectos con diferentes algas sin embargo, Haberman dice que esos organismos han dejado a un lado explícitamente los requerimientos ambientales que exigen las normas federales, a fin de acelerar la investigación y probar las tecnologías. Él cree que es irresponsable no obligar la realización de Evaluaciones de Impacto Ambiental. integrales.

"Yo responsabilizar al gobierno por esto", dice Haberman. "Hay poca supervisión, ningún régimen de reglamentación y las empresas no tienen que rendir cuentas a nadie. La realidad es que estamos sólo en un juego de confianza. "

Estos son solo los primeros pasos que se dan en el campo de la ingeniería de algas; la mayoría de empresas están trabajando a la escala de laboratorio o en fases piloto. Hasta el momento, no ha habido problemas ambientales o de salud asociados con algas genéticamente modificadas. Pero con una mayor acumulación de instalaciones de producción y el uso de cepas de algas con más modificados genéticamente, incrementarán las posibilidades de que surjan problemas.

Fuente: Stephen Lacey

Renewable Energy Network for News & Information. 1 de abril de 2011

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SONORA ALBERGARÁ MEGAPLANTA DE ETANOL A PARTIR DE ALGAS DE LA EMPRESA BIOFIELDS

La mexicana BioFields invierte 850 mdd en uno de los proyectos más grandes del mundo a base de alga; planea contratar a 1,850 empleados y producir 250 millones de galones del combustible para 2013.

En 2005, Alejandro González decidió apostar por los combustibles alternos. Antes trabajó para Grupo Gondi. El desafío será escalar la tecnología que desarrolló la empresa Algenol y que está a prueba en Florida, EU.

Enclavados en una zona desértica e inhóspita, unos 5,000 habitantes de Puerto Libertad, Sonora, recibieron en agosto de 2007 la noticia de que ahí se establecerá una gran planta de bioetanol, que ofrece cambiar su entorno y sus condiciones de vida.

Este pueblo de unas 1,200 casas no tiene drenaje, y el calor aviva el olor hediondo que escapa de las fosas sépticas. Cuando no sopla el viento, el aire irrita los ojos; la causa es el humo que lanza la planta termoeléctrica que tiene ahí la Comisión Federal de Electricidad (CFE), y que es la séptima más contaminante del país.

Pero justo estas calamidades permitieron cuadrar el negocio de la empresa mexicana BioFields, de Alejandro González Cimadevilla, un capitalino de 35 años. Las algas verdeazuladas que se cultivarán ahí a partir de 2010 y que emiten naturalmente el etanol, requieren ese sol y CO2. El de BioFields será el primer proyecto en el mundo que producirá etanol a partir de algas -otras iniciativas elaboran con ellas biodiesel.

Según los planes de González, BioFields producirá 2,000 millones de galones de etanol en 2020. Una meta ambiciosa, si se considera que Brasil produce 3,000 millones, a base de caña de azúcar, y eso luego de una política de incentivos iniciada en 1975.

“Hemos sido escépticos, con tantas cosas malas que pasan, pero ahora tenemos esperanza”, dice Gumercindo Ruiz, alcalde de Pitiquito, el municipio donde se ubica Puerto Libertad. Los habitantes han escuchado promesas de cambio desde que el pueblo se fundó en 1861.

Para enfrentar las suspicacias de los habitantes, González presentó el proyecto a unas 500 personas en lo que llamó ‘Talleres de consenso’ en Puerto Libertad, Hermosillo, Guaymas, La Paz y Tijuana.

Para elegir este lugar, BioFields ponderó otras 15 opciones en Mauritania, Argelia, España, California, Florida y Arizona. Pero Puerto Libertad ganó por tres razones: tiene 328 días de sol al año, 3.75 millones de toneladas de CO2 que cada año emite al aire la planta de CFE, y tiene agua de mar a fácil alcance.

BioFields compró 22,000 hectáreas de tierras no productivas. Ahí instalará los estanques herméticos donde las algas crecerán en agua bombeada desde el Mar de Cortés.

La tecnología aún no ha sido utilizada en gran escala.

Se trata de un desarrollo de Paul Woods, un ex empresario del gas estadounidense que tras 20 años de investigación, creó la empresa Algenol en 2006 para producir etanol a partir de una variedad de alga que desarrolló.

La tecnología de Algenol consiste en conducir el CO2 de la termoeléctrica e inyectarlo en las piscinas de manera que las algas conviertan el gas en vapor de etanol.

Según González, en un escenario conservador, BioFields estará produciendo 250 millones de galones del combustible en 2013. El empresario invertirá en la primera etapa 850 mdd. Él tiene 85% de la propiedad y 5% está en manos de Algenol; el otro 10% pertenece a ejecutivos empleados y accionistas minoritarios.

“Éste es un proyecto de energía alternativa que podría permitir a México prepararse en la prefase de la culminación de la era del petróleo”, dice Víctor Manuel Villalobos, coordinador de Asuntos Internacionales de la Secretaría de Agricultura.

Plan de negocios

Alejandro González sigue los pasos de su padre. Luis González Díez decidió salirse de Grupo Modelo, hace cuatro décadas, para emprender un negocio entonces incipiente y riesgoso. Fundó Grupo Gondi, que, al paso de los años, se convirtió en la tercera fabricante de cartón reciclado del país. Ahora, el fondeo para el proyecto del etanol proviene, básicamente, de la riqueza que esa compañía creó.

“El día que mi esposa y yo nos embarazamos, decidí heredarle a mi hijo un mejor futuro”, dice González, que en el año 2005 era vicepresidente de Planeación en Gondi. Este ingeniero capitalino y MBA dedicó seis meses a buscar alternativas de combustibles limpios. Fue su corredor financiero quien le habló de Algenol, que en ese tiempo buscaba inversionistas.

“Alejandro es un tipo que pudo haber invertido en lo que él hubiera querido, en cualquier inversión segura, y decidió jugársela en un proyecto que en 2006 estaba con las primeras pruebas de laboratorio”, comenta Sergio Ramírez, director de Asuntos Públicos de BioFields. “De eso, a lo que hoy existe, que prácticamente estamos a punto de producir, hay un abismo”.

González reclutó a Mateo López, ejecutivo que dirigió la construcción de la planta regasificadora de Shell en Altamira y ex ejecutivo de Mobil Petrochemicals en México. Y a Eduardo González, ex ejecutivo de Southern Copper Corporation y de Grupo México.

Hasta finales de 2008, había invertido 30 mdd en la compra de terrenos, estudios y personal. El contrato con Algenol establece que no podrá dar una segunda licencia para utilizar la tecnología Direct to Ethanol, hasta que BioFields produzca de manera comercial 250 millones de galones en 2013.

Esa proyección la catapultaría a estar entre los gigantes del sector, liderados ahora por Archer Daniels Midland (ADM), el mayor productor de etanol en EU y uno de los más grandes procesadores agrícolas del mundo, y a Cosan, la líder en Brasil.

BioFields parte de las estimaciones que indican que Estados Unidos importará cerca de 4,000 millones de galones de etanol para el año 2013, y que requerirá hasta 21,000 millones de galones en 2022, según la Renewable Fuels Association (RFA).

La demanda de etanol en México podría llegar a 800 millones de galones en 2010 y a más de 3,000 millones en 2022, señala Pemex. Según el plan de negocios de BioFields, de los 850 mdd que pide el proyecto, 350 millones serán inversión directa y los otros 500 millones serán producto de la reinversión de las utilidades -las que esperan obtener a partir del año 2010. González confía en recuperar la inversión en 2015.

“Los directivos de BioFields han hecho una investigación exhaustiva. Lo han hecho paso a paso, y eso está bien, porque es un excelente proyecto para Sonora y para el mundo”, dice Francisco Díaz, secretario de Desarrollo Económico de ese estado.

Contexto global

La Agencia Internacional de Energía estima que los precios del petróleo estarán fluctuando entre 48 y 62 dólares el barril hasta el año 2030. Esto hará que muchos diversifiquen sus fuentes de energía.

Una de esas fuentes es el etanol, que hasta ahora se obtiene principalmente de productos agrícolas. En 2006, se produjeron 51,000 millones de litros de etanol (36% a partir de maíz en EU y 33% a base de caña de azúcar en Brasil).

En un estudio sobre los bioenergéticos, la Secretaría de Agricultura destaca que el efecto que pueden alcanzar los biocombustibles sobre los sistemas de producción agrícola requiere un cuidadoso análisis. “México ya ha resentido los desbalances en el precio de los alimentos”, agrega.

Frente a ese desafío, el Congreso de la Unión aprobó en 2008 la Ley de Promoción y Desarrollo de los Bioenergéticos. Esta ley permite producir biocombustibles a base de algas, lo que da certeza a BioFields.

Además tiene varios candados, como permitir la producción de etanol a base de maíz siempre que haya excedentes de ese grano, o dar subsidios sólo a la producción a base de palma, sorgo dulce, jatropha y remolacha.

BioFields tiene la ventaja de ser más eficiente, aseguran sus directivos: esta tecnología produce mínimo 15,000 galones de etanol por hectárea al año, mientras que el máximo de producción en el caso de la caña de azúcar es de 8,000 galones y 3,000 en el del maíz.

“La tecnología de BioFields es un caso de éxito, porque no depende de insumos agrícolas, por contar con un balance energético positivo, ya que la energía que genera es superior a la que requiere, y por utilizar una menor superficie”, dice Jordy Herrera, subsecretario de Planeación Energética y Desarrollo Tecnológico de la Secretaría de Energía.

González espera venderle a Pemex, que incorporará 6% de etanol a sus gasolinas, en sustitución de algunos aditivos como el éter, para hacerlas menos contaminantes. La paraestatal comenzará en Guadalajara en 2010. BioFields tiene la mira puesta en Estados Unidos y Japón.

En el plano internacional y tecnológico, en EU tiene como sus competidores directos a Sapphire Energy, en San Diego -con un proyecto para producir gasolina a partir de algas- y a PetroAlgae, en Florida, que planea producir biodiesel con algas transgénicas.

BioFields tendrá sus propios desafíos, comenzando por replicar, a gran escala, la granja de demostración que Algenol opera en Florida y que tiene el tamaño de una alberca. La de Sonora cubrirá 22,000 hectáreas de desierto.

También deberá hacerse de otras fuentes de CO2, y dependerá de los precios del etanol. Hace un año, el galón costaba más de 3 dólares y el precio bajó a cerca de 1.40. Su costo de producción es de 1.10 en Brasil y de 1.30 en EU, donde se otorgan subsidios de 0.51 dólares por galón.

“Nuestro costo de producción será al menos la mitad frente al de las tecnologías tradicionales”, augura Ramírez, de BioFields.

El proyecto apenas arranca, pero Puerto Libertad ya comenzó a cosechar frutos. La empresa está en el proceso de contratar a los 1,500 empleados temporales que construirán la planta y a los 350 permanentes. Picos y palas marcaron el inicio, el 9 de diciembre pasado, de las obras para el drenaje. “Ésa es una petición -dice, con entusiasmo, el alcalde Ruiz- que llevábamos gestionando 20 años”.

Fuente: Ver aquí

Martes 24 Febrero 2009

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Chile:

EN PUERTO VARAS INICIARÁ CULTIVO DE ALGAS PARA UTILIZARLO COMO BIOCOMBUSTIBLE

Miércoles 15 junio 2011 | 1:00

En Puerto Varas se lanzará oficialmente la rama chilena de un consorcio que iniciara el cultivo de algas para su utilización como biocombustible.

Se proyecta que en 5 años este tipo de energía natural generada en la región podría ser comercializada. Benjamín González gerente de BAL Biofuel, indicó que este viernes se presentará la rama chilena de esta empresa internacional que busca generar combustible a través de recursos renovables. En el caso de la

región de los Lagos se ocupará el alga conocida como Huiro, la cual se tratará con un sistema similar al de la acuicultura.

El proyecto que cuenta con aportes de la Universidad de Los Lagos y InnovaChile Corfo incluye la extracción de esta alga parda, y también la fermentación en centros ubicados en la región de los Lagos, por lo tanto existe un impulso comercial que se dará en la zona costera, indicó Gonzalez.

Por su parte Alex Buschmann, investigadores del centro I-Mar de la Universidad de los Lagos, el cultivo de algas podría reemplazar el 5 por ciento del consumo de combustible fósil que se da en el país.

Según los reportes de la empresa, se han puesto metas de trabajo para el cultivo de estas algas, ya que se proyecta que en 5 años se puede generar el flujo de biocombustible necesario para poder exportarlo a mercados que ya lo utilizan en sus vehículos

Fuente: Ver aquí