Uruguay: Proclama de la 5ta. Marcha Nacional: en defensa de la tierra, el agua y los bienes naturales
Somos pueblo organizado en la Asamblea Nacional Permanente, venimos de todos los rincones del país, de Montevideo, de la costa, de todo el interior. Estamos defendiendo con firmeza y convicción nuestra soberanía y nuestro territorio con nuestra presencia en las calles. Por quinta vez marchamos en Montevideo y nuestra voz resuena cada día más fuerte.
A los largo de tres años nos hemos auto-convocado en defensa de la tierra, el agua y los bienes naturales. No respondemos ni somos la voz de ningún partido político, somos pueblo organizado.
Desde nuestra última Marcha Nacional, el 10 de mayo, el Poder político siguió afirmando su voluntad de regalar el país, la tierra, el agua, el aire, las vidas de productores, trabajadores y vecinos, condenando a nuestros hijos y a las futuras generaciones .
Por eso, nuevamente, al igual que el 10 de mayo, anunciamos:
No queremos a Aratiri en Cerro Chato,
No queremos el puerto de aguas profundas en Rocha
No queremos la regasificadora en Puntas de Sayago
Todo esto es parte de un mismo proyecto de saqueo y depredación de los bienes naturales, del agua, de la tierra, de la costa, del país.
No es negociable la instalación de Aratiri, un megaproyecto minero a cielo abierto en tierras fértiles y productivas.
No es negociable la instalación de minería de oro con cianuro en el centro de la cuenca lechera en San Jose, ni en cualquier otra zona.
No es negociable la vergonzante ley de minería de gran porte hecha a medida de Aratiri.
No es negociable la instalación de un Puerto de Aguas Profundas, innecesario para el país, en el corazón de la zona turística de Rocha, puerto destinado al embarque de minerales, al acopio y la distribución regional de petróleo y derivados,
No es negociable la instalación de una planta regasificadora en Puntas de Sayago, en una zona poblada del Oeste de Montevideo, con el único objetivo de darle energía barata a estos emprendimientos
No es negociable el puerto maderero en La Aguada, pegado a La Paloma.
No es negociable un mineroducto atravesando áreas protegidas, zonas con una enorme riqueza en biodiversidad.
No es negociable la instalación de una planta de aceites en plena playa de la Agraciada donde desembarcaron los Treinta y Tres orientales.
No son negociables los transgénicos, el uso descontrolado de agrotoxicos, los monocultivos y la forestación irrestricta.
No es negociable la contaminación de las fuentes de agua.
No son negociables las plantas de fabricación de pasta de celulosa, que contaminan, ni las campañas irresponsables que los gobiernos montan para enfrentar a nuestros pueblos.
No es negociable la introducción del fracking para la explotación de gas natural no convencional en todo el litoral y centro del país. No es negociable la contaminación con metano y químicos asociados al fracking de las aguas subterráneas.
No es negociable el aumento abusivo de la contribución inmobiliaria en la costa de Canelones que condena a las familias más humildes, ni la intención del gobierno municipal en Rocha de entregar a la inversión inmobiliaria de lujo grandes extensiones de tierra, con la consiguiente extranjerización, como es el caso del Padrón 1645, Parque Reserva Forestal ubicado entre Valizas y Aguas Dulces.
Nuestra lucha no es solo ambiental. Jamás aceptaremos un modelo de saqueo y contaminación. Porque no diversifica la producción, nos perpetua como exportadores de materias primas, vacía al campo y al contrario de lo que se dice elimina puestos de trabajo.
Estas empresas vienen a a buscar el máximo beneficio en el menor tiempo y a cualquier costo. Les resulta irrelevante preservar la tierra y los bienes naturales para nuestros hijos y las próximas generaciones.
El camino que se nos impone no lleva al desarrollo, solo aumenta la dependencia, y nos devuelve a la época de la colonia, este no es el país que queremos
DENUNCIAMOS
Denunciamos al plan IIRSA/Cociplan, plan continental que hace posible el saqueo de nuestros bienes naturales, así como a los diferentes gobiernos cómplices de empresas transnacionales que crean las leyes e infraestuctura necesaria para llevarlo a cabo.
Denunciamos los Tratados de Protección de Inversiones, firmados por el gobierno.
Denunciamos la firma de contratos secretos con las empresas que pretenden desarrollar este tipo de proyectos, a las que se les otorgan beneficios que se le niegan a los uruguayos.
Denunciamos la presión del uso de suelo para el acopio de las industrias, que han convertido zonas rurales en depósitos de contenedores en Montevideo Oeste.
Denunciamos la criminalización de quienes protestamos y luchamos, en pleno uso de nuestros derechos, como se hizo en La Paloma y en la Suprema Corte de Justicia.
Denunciamos las presiones del gobierno y las empresas, que le exigen a la DINAMA la inmediata aprobación de esos proyectos. Y respaldamos a los funcionarios de DINAMA y del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento territorial y Medio Ambiente, a quienes se les impide realizar los estudios serios que esos proyectos requerirían.
Se pretende instalar la regasificadora muy cerca de zonas densamente pobladas, de rica bio-diversidad marina. Se destruiría y contaminaría afectando los recursos pesqueros, las playas y la salud de la población.
No se respetan las normas internacionales de seguridad que establecen un mínimo de 6.5 kilómetros de distancia a zonas pobladas. Los barcos metaneros transitarían a 900 metros de la costa, de zonas pobladas y la regasificadora se instalaría igualmente a solo 2,5 kilómetros de las mismas, ignorando las pautas mínimas de seguridad, agravado esto por el hecho de estar a pocos kilómetros de la refinería de Ancap. No existen protocolos de seguridad en el proyecto.
Se nos oculta el informe de una consultora de prestigio internacional que rechazo la instalación de la regasificadora en Puntas de Sayago por motivos de impacto ambiental, económico y de seguridad.
Esto enmarcado en un mega proyecto para el Oeste :
Gasoducto, puerto zona franca, puerto libre, rutas vías férreas y toda una infraestructura que cambiaría radicalmente el territorio, sin una planificación estratégica que tenga en cuenta el ambiente, la realidad social, las zonas productivas y las comunidades que allí habitan.
El proyecto de Aratiri pretende instalar una mega explotación minera en el centro del país. No existen ejemplos en el mundo de explotaciones de este tipo en zonas fértiles y productivas.
La misma empresa ha reconocido en su informe de impacto ambiental que contaminará, de forma grave e irreversible, el agua, el aire y la tierra tanto en las zonas de las minas como en las aledañas.
Se trata de un proyecto a solo 12 años, sin valor agregado. El hierro se exportará en bruto, sin generar empleos adicionales a los que hoy ya existen en la zona, y como regalo quedarían 5 enormes cráteres llenándose de agua contaminada durante 80 años.
No existen razones genuinas que ameriten un Puerto de Aguas Profundas en la Costa de Rocha.
El Puerto sería una infraestructura gigantesca, con una ciudad detrás, un área industrial y logística a pocos kilómetros tierra adentro, un aeropuerto, carreteras, vías férreas y un mineroducto.
Todo esto en medio de áreas protegidas, reservas naturales, santuarios de ballenas y delfines. En una región emblema del Uruguay Natural donde durante generaciones la población local está esforzadamente abocada al desarrollo del turismo.
Es inconcebible sacrificar uno de los pilares turísticos del país, sacrificar su rica naturaleza agreste y la identidad cultural de esa región en nombre y beneficio de Aratirí.
La instalación de la Regasificadora, el Puerto de Aguas
Profundas y la mega-minería a cielo abierto operarían como un pulpo succionando nuestros bienes naturales. Dejando a su paso suelo infértil, fuentes de agua y costas contaminadas, agricultores, productores, trabajadores, pescadores y medianos y pequeños operadores del turismo excluidos.
HOY Y AQUÍ EXIGIMOS
Que se haga efectiva la aplicación del artículo 47 de la Constitución que declara: “Los habitantes de la República tienen el derecho a ser protegidos en el goce de un ambiente sano y equilibrado. Las personas físicas y jurídicas, públicas y privadas, tienen el deber de abstenerse de cualquier acto que cause depredación, destrucción o contaminación graves del medio ambiente”.
Que no se firme el contrato con Aratirí, ni se le otorgue la habilitación ambiental al proyecto.
Que no se continúe con el innecesario proyecto de Puerto de Aguas Profundas, el puerto Aratirí, que no se insista con el inoperante Puerto Maderero de La Paloma.
Que no se otorgue la habilitación ambiental a la planta Regasificadora.
Que se libere inmediatamente los informes sobre la Regasificadora, solicitados por los vecinos de la Costa Oeste y negados por el Ministerio y la Justicia.
Que la Corte Electoral respete la legítima voluntad de 13.000 ciudadanos y realice de inmediato el llamado a plebiscito departamental en Tacuarembó donde sus habitantes decidirán si aceptan o prohíben la mega-minería en el departamento.
Que se habilite la radio La Kandela FM de Tacuarembó, acallada por el solo hecho de haber apoyado la recolección de firmas para el plebiscito departamental y que se devuelvan los equipos que le fueron secuestrados.
Que se respete el resultado del plebiscito constitucional por el agua, aprobado por el 64.7% de la población, que declaró al agua un derecho humano fundamental, “anteponiéndose razones de orden social al orden económico”.
Que se modifique radicalmente la normativa vigente que nos hace víctimas del envenenamiento con agrotóxicos y se castigue a los contaminadores. No se hizo nada efectivo para subsanar la contaminación de ríos y arroyos y ya sufriremos nuevamente las consecuencias este verano en Montevideo y Canelones.
Que el estado uruguayo ratifique a la brevedad el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo sobre Pueblos Indígenas y Tribales.
Que las comunidades afectadas, así como todos nosotros el pueblo, seamos informados sobre los alcances actuales y futuros de todos los proyectos que afectarían de modo irreversible nuestro modo de vida, para que así resolver en qué país queremos vivir y qué país le dejaremos a las generaciones futuras.
A quienes buscan descalificarnos, diciendo que nos oponemos a todo, les decimos que nos oponemos a este tipo de proyectos depredadores que comprometen de forma irreversible el país en el que vivimos y que le dejaremos a nuestros hijos.
La Asamblea Nacional Permanente quiere informar con enorme alegría que el Compañero Ney Thedy, presente en las 5 marchas, hoy y gracias a su lucha y a la nuestra tiene nuevamente un pedazo de tierra para trabajar y vivir dignamente, como todo oriental debe vivir.
El Compañeros Ney Thedy, hoy aquí presente, sigue luchando por tierra pal que la trabaja. La lucha paga, pues la única lucha que se pierde es la que se abandona.
POR ESO LE DECIMOS SÍ:
¡Si a la resistencia organizada y al derecho inalienable de hacer nuestro destino!
¡Si a las iniciativas populares para decidir en plebiscitos departamentales la prohibición de minería metalífera a cielo abierto organizadas en Tacuarembó, Treinta y Tres, Lavalleja y Rivera y las que seguirán.
¡Si al desarrollo responsable en equilibrio con los bienes naturales!
¡Si a la protección y el desarrollo de la pesca artesanal y al desarrollo del turismo en la costa oceánica !
¡Si a la producción sustentable de alimentos !
¡Si a los trabajadores rurales, los productores familiares, a los pescadores artesanales, si a la permanencia de las familias en su medio y cada vez con mejores condiciones de vida!
¡Continuaremos en la lucha y no nos dejaremos robar nuestro destino, no venderemos el rico patrimonio de los orientales al bajo precio de la necesidad!
¡Comunidad somos nosotros! ¡Pueblo somos nosotros!
Nuestra es la iniciativa, pues como dijo Artigas, “NADA DEBEMOS ESPERAR SINO DE NOSOTROS MISMOS.”
EL AGUA Y LA TIERRA NO SE VENDEN, SE DEFIENDEN