Iain Bruce

Una de las muchas protestas masivas en Glasgow para demandar acciones climáticas urgentes durante la COP26. (Foto vía NYT)

El acuerdo final de la COP26, apodado la «Evasión de Glasgow», es una obra de humo y espejos laboriosamente construida que carece casi totalmente de detalles: no especifica prácticamente nada sobre quién hará exactamente qué y cuándo, ni cómo se podrá verificar, mucho menos hacer que se cumpla.

Más allá de Glasgow