Durante los últimos seis meses las Empresas de Palma Aceitera han deforestado 13,076 hectáreas de bosques tropicales primarios en las Regiones de Loreto y Ucayali para la instalación de este monocultivo. Los grupos empresariales con intereses e inversiones en los cultivos de palma aceitera vienen adquiriendo predios rurales mediante el ofrecimiento de incentivos económicos para el tráfico de tierras, la extorsión y amedrentamiento a los pequeños agricultores para obligarlos a vender sus predios, la invasión de áreas, y mediante trato directo con funcionarios públicos.