Familias campesinas sin tierra organizadas fuimos desalojados por treinta efectivos del cuerpo de infantería armados y un fiscal, de una propiedad improductiva y abandonada que había sido ocupada pacíficamente. Queremos tener acceso a la tierra y al agua para poder desarrollar proyectos productivos sustentables, para poder vivir de la producción propia, de nuestro trabajo digno, para poder darles una oportunidad a nuestros hijos de quedarse en el campo