Los Mercados de Carbono para la financiación climática : peligros y alternativas

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La delegación de la Unión Europea en las negociaciones de clima de la ONU en Cancún está presionando para que los mercados de carbono desempeñen un papel importante en generar financiación climática para los países empobrecidos.

La delegación de la UE afirmó que quiere que el Banco Mundial juegue un papel destacado en el Fondo Mundial para el Clima que debería asignar este dinero. Amigos de la Tierra Internacional discute los peligros de esta postura y explica fuentes disponibles más justas y efectivas de financiación para el clima en este informe .

El comercio de carbono no es fiable, sus beneficios no se han comprobado, y sobrecarga injustamente a los países empobrecidos con la responsabilidad de solucionar el cambio climático. Los obstáculos para una reforma del comercio de carbono son insalvables en la práctica en el contexto del tiempo que tenemos disponible para evitar un cambio climático catastrófco. Además, el mercado de compensaciones de carbono no constituye una fuente legítima de financiación para el clima, y no puede garantizar un flujo predecible de financiación para los países empobrecidos.

El informe demuestra que al menos 420 mil millones al año podrían generar un buen número de alternativas al comercio de carbono, que permitan proveer de financiación a los países empobrecidos para su adaptación al cambio climático. [1]

Amigos de la Tierra advierte sobre los peligros que conlleva el comercio de carbono y señala que existen mecanismos más efectivos para conseguir reducir las emisones de gases de efecto invernadero. El documento incluye varias propuestas que muestran la manera más efectiva para recortar las emisiones :

● Energía: un programa mundial de tarifas mínimas o primas, con una inversión anual de us$100 mil millones durante quince años, reduciría el costo de las tecnologías renovables tornándolas universalmente accesibles. Esto permitiría que la energía renovable se convierta en “la opción por defecto para el mundo entero”. Unas normativas más estrictas de eficiencia energética combinadas con un incremento de los impuestos al carbono y la energía, redundarían en mayores ahorros energéticos.

● Agricultura: la generalización de la agricultura a pequeña escala y sustentable puede desencadenar una reducción drástica de las emisiones globales de gases de efecto invernadero mediante un uso mucho menor de combustibles fósiles en la agricultura y por el almacenamiento de carbono en plantas y suelos. También es de importancia crítica frenar la demanda mundial de productos asociados a una agricultura intensiva dañina, entre ellos el consumo excesivo de carnes y productos lácteos.

● Bosques: resolver el problema de las emisiones derivadas de la deforestación y la degradación de los bosques requiere medidas que ataquen las principales fuerzas motrices causantes de la deforestación, en particular la demanda de agrocombustibles, carnes y productos forestales. Es también esencial lograr mejoras en la gobernanza de los bosques, entre ellas proteger efectivamente los derechos de los pueblos indígenas y las comunidades que habitan los bosques y expandir la gobernanza comunitaria de bosques. También es imprescindible proveer f inanciación para incentivar que se abandone progresivamente el desarrollo basado en la destrucción de los bosques.

● Industria: para impedir que las empresas contaminantes usen la amenaza de traslado y reubicación de sus operaciones, o la denominada ‘fuga de carbono’ para evitar emprender acciones, el punto de partida tiene que ser un acuerdo internacional sobre la aplicación de normas comunes relativas al uso de las mejores tecnologías disponibles. Esto permitirá reducir las fugas de carbono y las amenazas de reubicación, y contribuirá a impulsar la innovación. Pero eso a su vez exigirá flexibilizar los derechos de propiedad intelectual para garantizar el acceso a las mejores tecnologías disponibles.

Para más información:

Alejandro González, responsable del área de cambio climático de Amigos de la Tierra España, (0052 1) 998 108 02 74, gro.arreit@aigrene.amilc

Héctor de Prado, Coordinador de movilizaciones en Cancún de Amigos de la Tierra Internacional:, (0052 1) 998 108 01 99, gro.arreit@amilcsos

En España:

Teresa Rodríguez Pierrard, responsable de Prensa de Amigos de la Tierra: 91 306 9900 - 680 936 327, gro.arreit@asnerp

Liliane Spendeler, Directora Ambiental de Amigos de la Tierra, tel: 653 968 935

Nota

[1] El Informe sobre Mercados de Carbono: Despejando el Aire, está disponible aquí.

Temas: Crisis climática

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