México: Asamblea Nacional de UNORCA: Soberanía alimentaria para resolver la crisis climática

"La agricultura campesina sustentable y la agricultura familiar pueden alimentar el mundo"
Por la soberanía alimentaria para resolver la crisis climática.

16 Y 17 OCTUBRE 2010, PROGRESO, YUCATÁN, MÉXICO.
ASAMBLEA DE COORDINADORA NACIONAL
Día mundial de la soberanía alimentaria­
DECLARACIÓN DE PROGRESO, YUCATÁN, MEXICO.

Reunida en la Ciudad y Puerto de Progreso, Yucatán, con la presencia de sus integrantes venidos de todas las regiones del país, la Coordinadora Nacional de la UNORCA, tras haber analizado la coyuntura nacional y la situación de la agricultura en México y el mundo, y conmemorando el 16 de octubre Día Mundial de la Alimentación según la FAO y Día de la Soberanía Alimentaria para los campesinos del mundo, exponemos lo siguiente:

Declaración:
Vivimos una crisis económica, social, ambiental y climática expresada en la carencia de satisfactores de las necesidades más básicas del ser humano, como son los alimentos, padecemos el hambre. Actualmente más de mil millones de personas en el mundo viven con hambre, es decir, una de cada 6 personas. Pero el dato en México es alarmante: son ya 48 millones de mexicanos los que viven en la pobreza, existe un rezago alimentario y de bienes o capacidades. Esto es, uno de cada 2 mexicanos sufre carencias alimentaria y de bienes básicos.

Según los informes de la Auditoria Superior de la Federación, importamos el 42% de los alimentos que consumimos y el éxodo hacia el exterior sigue incrementándose: más de 6 millones de mexicanos han emigrado en los últimos años buscando una opción de vida que el país no les brinda; la inseguridad, la violencia y la confrontación son la modalidades que se imponen a la política, a las instituciones y a la convivencia social.

Las trasnacionales, expresión contemporánea del capitalismo neoliberal, se han apoderado de la economía y la agricultura en el país y en el mundo, y constituyen el principal enemigo de la humanidad. Son las beneficiarias de la crisis inducida en el campo y son las causantes principales del desastre ambiental que nos ha llevado a la crisis del clima.

Los países ricos, con su gran industria y enormes emisiones de tóxicos, son culpables por ser causantes de la crisis climática, y se niegan a asumir su responsabilidad. Por el contrario, impulsan e imponen falsas soluciones como la REDD (Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación Forestal), que no modifican el modelo vigente, y si mercantilizan y degradan los bienes naturales y no obligan a su industria a reducir sus emisiones.

Es necesario que los países ricos reduzcan su consumo y el despilfarro de energía, reduciendo las emisiones de gases, causantes del efecto de invernadero, en un 50 por ciento hacia la segunda década del siglo.
Así mismo, las políticas económicas impuestas por los países ricos, son una profundización de los procesos de privatización de los territorios, y pretenden incorporar los bosques y los ecosistemas a los mercados internacionales. Para ello eliminan y desconocen los derechos de los pueblos y comunidades sobre sus tierras y territorios, imposibilitando, con este hecho, la soberanía alimentaria y otros derechos colectivos.

El modelo neoliberal no se detiene. Impone leyes, regulaciones y programas que buscan privatizar la vida, las semillas y el conocimiento. La investigación científica y tecnológica, progresivamente, queda bajo dominio del capital, y en la agricultura, el modelo tecnológico impuesto fomenta la dependencia e ignora los saberes y técnicas populares y agroecológicas.

Y en nuestro país, México, este programa fraudulento, está siendo impulsado por el gobierno de Felipe Calderón, que tiene el cinismo de presentarse en foros internacionales como un gobierno comprometido con las acciones de combate a la crisis del clima.

En la conclusión de la Cumbre de los Pueblos en Cochabamba, se reafirma que las causas de la crisis climática, son las originadas en el sistema de producción capitalista (en el que lo que importa es la máxima ganancia), debido a las formas de producción y consumo que promueve y a que tiene como finalidad única el lucro, por encima del bienestar de las personas y de la Madre Tierra.

La Vía Campesina viene denunciando desde 2007, esta situación y demandando aplicación de medidas reductoras de emisiones de tóxicos. Afirma que el sistema agroindustrial y exportador en el mundo es una de las principales causas de contaminación que está trasformando el clima.

En la UNORCA, decimos también claramente que sólo la agricultura campesina puede enfriar al planeta.

Los campesinos, tenemos mucho que decir y aportar al respecto, porque somos los primeros afectados por los efectos del desastre ambiental y el cambio climático. Somos los que podemos aportar soluciones en el terreno de la agricultura campesina. Bastaría con que los gobiernos destinen y distribuyan apoyo suficiente y eficiente, y los campesinos y las campesinas podremos producir lo que consumen los habitantes del mundo, acabando con la dependencia alimentaria y contribuyendo a revertir el calentamiento global.

En México, el proyecto de gobierno favorece a los grandes capitales y a las trasnacionales. La agricultura, abandonada por el estado, es el medio ideal para reproducir su modelo e incrementar sus ganancias. Poco o nada importa el empobrecimiento de los campesinos y la destrucción de la economía nacional.

El presupuesto enviado a la Cámara de Diputados por el ejecutivo federal mexicano está enfocado a favorecer los intereses de las empresas trasnacionales y de los grandes agricultores, que seguirán beneficiándose del dinero público.

Ante esta situación, los que conformamos UNORCA, como parte de la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo, que acaba de realizar su V Congreso en Quito, Ecuador. Y que también somos integrantes de la Vía Campesina, asumimos totalmente las campañas de información y movilización que planea esta última organización internacional (Vía Campesina) y las organizaciones aliadas que culminarán con el Campamento Alternativo Global “Por la Vida, la Justicia Ambiental y Social”, simultáneo a la realización de la Conferencia de las Partes COP16, en Cancún. Por todo lo anterior, para rescatar la economía mexicana, principalmente de las clases populares:

Proponemos:
- Un presupuesto rural para 2011 que fomente el empleo, reduzca la dependencia alimentaria y alivie la pobreza en el campo. Un presupuesto rural que se incremente en un 10% para llegar a 295,000 millones de pesos en el conjunto de programas que corresponden al campo.

- Creación del un Programa Nacional Alimentario conjuntando los programas relacionados, reagrupando y reorientando el gasto alimentario, fomentando la producción social de alimentos para reducir la dependencia alimentaria.

- La constitución de la Comisión Nacional de Alimentación como eje central de una profunda reforma rural en el campo. El establecimiento de esta instancia para procurar el derecho a la alimentación como un derecho fundamental y humano para una alimentación sana y suficiente. Esta instancia será la responsable de transformar la actual política asistencialista en una estrategia de fomento productivo para sacar a la mitad de los mexicanos de esa situación de pobreza alimentaria y de desnutrición. Esta instancia será la responsable de evitar el uso electoral de los recursos públicos destinados a atender los problemas del hambre.

- Demandamos que en el presupuesto rural se considere establecer un Fondo para la Recuperación de Tierras rentadas en Ejidos y Comunidades.

- Que se incluya la creación de una Reserva Estratégica de alimentos y granos y se fomente el gasto productivo.

- Se eliminen las acciones asistenciales y se incluyan medidas para mitigar los efectos del cambio climático.

- Exigimos la participación real de las organizaciones campesinas en la integración de las Reglas de Operación.

Llamamos:
A participar activamente, en la medida de nuestras condiciones y posibilidades, en las Caravanas Internacionales y Nacionales rumbo a Cancún. Las bases campesinas, MUJERES, JOVENES Y HOMBRES, DEL CAMPO Y LA CIUDAD, de las organizaciones regionales de la UNORCA estarán presentes en esta movilización nacional.

Debemos crear miles de Cancún, manifestándonos en todos los lugares donde nos encontremos durante las jornadas de repudio a la falta de compromiso de los países ricos en la lucha contra la crisis climática y a favor del Acuerdo de los Pueblos signado en Cochabamba.

Insistiremos en nuestra lucha por el derecho constitucional a la alimentación y demandamos ahora al Senado de la República que apruebe este derecho plasmándolo en nuestra Carta Magna.

Continuaremos nuestra campaña contra las trasnacionales y particularmente contra Monsanto y su pretensión, que con la complicidad del gobierno federal, de sembrar comercialmente maíz transgénico en México y de acabar con la riqueza genética representada por mas 60 razas nativas de maíz mexicano.

Seguiremos defendiendo nuestras semillas contra la privatización y la destrucción, y las multiplicaremos para que circulen libremente y sirvan de base para la Soberanía Alimentaria.

Por todo lo anterior, desde este rincón de la patria, convocamos a las fuerzas políticas y sociales a desplegar todo su potencial como organizaciones sociales y de masas para la transformación de la situación política y económica del país, como el paso necesario hacia la transformación de este modelo económico explotador.

SOBERANÍA ALIMENTARIA, DEMOCRACIA Y JUSTICIA PARA UNA VIDA DIGNA
¡JUSTICIA CLIMÁTICA, YA!

Progreso, Yucatán, México a 17 de octubre de 2010.

POR LA COMISION EJECUTIVA NACIONAL
OLEGARIO CARRILLO MEZA
POR LA COMISION EJECUTIVA ESTATAL
PABLO EFREN DUARTE SANCHEZ.

Fuente: CLOC