Defensoría del Pueblo pidió revisar el permiso para investigación en Amazonas

Indígenas advierten que no fueron consultados

"Sigue la práctica de cambiar espejitos por oro, pero ahora quieren cambiar espejitos por conocimiento", explotó Guillermo Guevara, dirigente de la Organización de Pueblos Indígenas de Amazonas, ante el propósito de un grupo de científicos del IVIC de determinar los potenciales medicamentos que se pueden hallar en el bosque tropical (hogar de numerosas etnias).

El líder del proyecto, Fabián Michelangeli, argumentó que su trabajo fue paralizado por el Ministerio del Ambiente. La contraparte es que Orpia denunció ante la Defensoría del Pueblo que los investigadores "no consultaron a las comunidades autóctonas, aunque somos los poseedores de los componentes intangibles". Egildo Palau, director regional del Marnr, señaló que el pasado 10 de abril la Defensoría le pidió al despacho que explicara por qué se concedía un permiso sin haber oído a los habitantes primigenios de la zona.

"Cuando indagamos, encontramos que efectivamente no se había consultado a las comunidades, y así se lo hicimos saber a Michelangeli".

Las autorizaciones entregadas por Inparques, de acuerdo con Palau, presentaban "cosas extrañas": el contrato de acceso a los recursos genéticos "lo firmó el gobierno de Caldera, de manera inconsulta, en febrero de 1999"; y la permisología concedida el 4 de abril del 2000 permitía penetrar los cerros Yutajé, Yaví, Corocoro, Guanai, Morrocoy y Camani. El funcionario señala que el reclamo de Orpia "está bien fundamentado", y que el plan del IVIC, tal como lo pretendía llevar a cabo el equipo científico sin hablar antes con los indígenas, "viola los artículos 120 y 124 de la Constitución Nacional, el Acuerdo de Cartagena (norma 391) y los acuerdos de biodiversidad suscritos en la Cumbre de Río de 1992".

Aun cuando Michelangeli asegura que buscó el parecer de algunos pueblos, Palau informó que la metodología usada no se puede considerar válida, "porque estuvieron pocas horas en cada uno, y se encontraron con una negativa en Guanai, debido a que la etnia consideraba que en un día no podía revisar algo tan extenso". Para pulsar la opinión de los moradores del bosque de Amazonas, el despacho ambiental recalca que se debe visitar no menos de 40 comunidades durante varios días, efectuar un taller con sus líderes y darles tiempo para que lo discutan y respondan. "Lo único que se pide a los investigadores es que hagan una consulta amplia, y que no se repita la situación de años anteriores, cuando todo el mundo entraba y salía. Está demostrado que hubo comercio con la biodiversidad". La última palabra en lo que respecta al plan del IVIC, enfatizó el portavoz del Ministerio del Ambiente, la tienen los indígenas y nadie más.

El nacional, Venezuela
Viernes 28 de abril del 2000
Vanessa Davies

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