Movilización nacional en Bolivia contra el ajuste y el aumento a los combustibles
El lunes 22 de diciembre desde la Central Obrera Boliviana, sindicatos fabriles y mineros, magisterio, juntas vecinales y otros sectores sociales se ha convocado a una movilización nacional contra el decreto que elimina la subvención a los hidrocarburos entre otros ataques al pueblo.
Este lunes miles de mineros paralizaron el centro de La Paz, en el marco de la jornada nacional de protestas convocada para rechazar la eliminación del subsidio a los combustibles establecida por el nuevo gobierno del presidente Rodrigo Paz. La medida de fuerza incluyó además protestas en otras ciudades del país.
Rechazaron la eliminación del subsidio a los combustibles, que forma parte de un paquete de ajustes económicos que liberalizan las exportaciones, facilitan el ingreso de capitales transnacionales a sectores estratégicos (fast track), modifican el sistema tributario y otros ajustes que clasifica de "emergencia".
En Cochabamba, la tercera ciudad del país, sindicatos protagonizaron una marcha y bloquearon dos rutas troncales que conectan con el oriente boliviano.
La Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) informó al menos 20 puntos de bloqueos. En seis de los nueve departamentos del país, se registran los bloqueos en rutas y calles, la mayoría de ellos concentrados en La Paz, Oruro, Cochabamba y Chuquisaca.
El presidente Rodrigo Paz promulgó el decreto 5503 que provocó el aumento de casi 100% de los combustibles, la gasolina especial (la de uso más común) aumenta en 86% y el diesel en un 163%, que es clave para la industria y transporte. Las protestas de diversos sectores de trabajadores y el pueblo pobre no se hicieron esperar y hubo paro de transportistas y bloqueos de rutas.
El decreto no solo implica un aumento sideral de combustibles que impacta directamente sobre los sectores populares con un golpe inflacionario, sino que impone la liberación de exportaciones (que también redunda en aumentos de precios internos), y una mayor carga impositiva sobre pequeños emprendimientos, al tiempo que beneficia al gran empresariado y a los capitales extranjeros con exenciones impositivas y privatizaciones para entregar el control de los bienes comunes naturales y estratégicos del país a intereses privados.
El jueves pasado gremios claves como la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), el Magisterio Urbano, y La Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSMTB) organizaron las primeras manifestaciones en contra del "gasolinazo".
El gobierno de Rodrigo Paz buscó durante la jornada negociar con diferentes sectores para quitarle contundencia al paro. Convocó a negociar a los transportistas y los mineros con el objetivo de entablar mesas de negociación que le quiten contundencia a las protestas.
El actual gobierno justifica el ajuste por la crisis que dejó el gobierno del MAS y manifiesta que son medidas “dolorosas pero necesarias”. El MAS gobernó durante años administrando el capitalismo dependiente boliviano, sosteniendo un modelo extractivista basado en hidrocarburos y minería, sin romper con la lógica de subordinación al capital transnacional ni transformar la estructura económica del país. Ese modelo se agotó y la subordinación de años al capital extranjero sentó las bases de la crisis actual, pero el gobierno de Rodrigo Paz utiliza ese balance no para salir de la crisis, sino para profundizarla y descargarla sobre los hombros del pueblo trabajador.
Fuente: La Izquierda Diario