Los próximos 6 al 8 de julio nuevamente se convocan las asambleas de vecinos junto con organizaciones de distintos puntos del país para reforzar sus estrategias comunes para enfrentar los conflictos que son semejantes a la de otros pueblos latinoamericanos que padecen iguales efectos y el mismo enemigo: las transnacionales mineras del saqueo y de la contaminación, las pasteras de celulosa en la cuenca del río Uruguay, la depredación ictícola de los ríos de la mesopotamia, la devastación de represas como la de Yaciretá, el despojo de la biodiversidad y la frontera agrícola de los transgénicos y biocombustibles dictada por el Norte del ALCA, de la globalización y del IIRSA, por citar algunos ejemplos