El papel de las y los jóvenes estudiantes en los Institutos Agroecológicos Latinoamericanos IALA

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Este artículo tiene como propósito continuar describiendo la experiencia y la dinámica que se tiene en La Universidad Campesina Latinoamericana (IALA), de la CLOC-Vía Campesina. Destacamos la necesidad de seguirnos pensando y el papel relevante que ha asumido la juventud en las movilizaciones de la región en los últimos meses, donde ellos y ellas juegan un papel importante.

Para poder tener un panorama más claro podríamos empezar por recordar cómo fueron las cosas desde un inicio, pues el campesinado en general ha sufrido el impacto de la aplicación de modelos económicos mercantilistas a lo largo de la historia. El pedagogo y sociólogo Orlando Fals Borda que partió del análisis de la situación específica colombiana, coincide con la idea de que los problemas que ha tenido el campesinado son producto de la lógica de manejo extractivista de los recursos o riquezas que posee Latinoamérica enmarcados en un modelo de desarrollo mercantilista industrializado.

Este modelo productivo se contrapone a las visiones y cosmovisiones sostenibles de poblaciones vulnerables que trabajan la agricultura en armonía con los ecosistemas. Lo nombrado anteriormente, marca la pauta de un factor neurálgico en cuanto al uso y tenencia de la tierra, la disputa por los territorios y la aplicación de sistemas productivos. En un inicio la tierra se manejaba bajo formas de organización indígena. Posteriormente se pasó a la colonización europea que tomó las tierras y las convirtió en haciendas o fundos organizados socialmente para el acumulo de riqueza en pocas manos, generando el trabajo esclavo de comunidades indígenas y africanas. Luego surgió, producto de la historia, el mestizaje que también fue resultado de las relaciones económicas sobre el manejo de la tierra en Europa, que provocó la migración de comunidades españolas y portuguesas, ya que las mayoría de familias con tierras feudales heredaban sus tierras a los primogénitos, y los otros hijos tenían que enlistarse en el ejercito o emigrar a América en búsqueda de riqueza. Esto último ocasionó que en el continente empezara el acaparamiento de tierra por unos, la defensa de los territorios heredados por los ancestros de otros. De manera general y saltando muchos detalles, es así como empieza la lucha por la tierra.

Hoy en día el uso y tenencia de la tierra están condicionados por nuevas coyunturas que exigen el manejo sustentable de los mismos a causa de un deterioro acelerado de los ecosistemas que en las últimas décadas detonan en un cambio climático.

Las comunidades campesinas en la actualidad enfrentan esos nuevos desafíos que siguen siendo enmarcados en la tenencia y uso de la tierra; en la región se vive la paradoja de mucha gente en poca tierra y mucha tierra en pocas manos.

Tomando en cuenta la situación anterior, nos queda por pensar sobre los desafíos que tiene que enfrentar la juventud campesina que vive dentro de esta situación en diferentes contrastes, dependiendo de los territorios que habita y la biodiversidad o riqueza que allí se encuentra.

Continuemos pensando desde el sur. En los pueblos guaraníes, panches, campesinos sin tierra o con muy poca, enfrentándose a las dificultades que trae el monocultivo. Pensemos en la región andina, Centromérica y el Caribe, jóvenes campesinos y campesinas o sus comunidades en general resisten a los megaproyectos minero-energéticos, la estandarización de las semillas en la agricultura, los tratados del libre comercio, el bloqueo económico, los problemas que trae el narcotráfico dentro de la agricultura, la generación de dependencia a tecnologías desenfocadas, la geoingeniería, entre otros. Esto ultimo ha generado, en general, el envejecimiento del campesinado, el éxodo rural paulatino y el abandono del campo por parte de las políticas de los Estados.

¿Que tiene que hacer el joven campesino ante esta situación?

Uno de los factores iniciales es entender que la juventud campesina no tiene que pensar en un relevo generacional, como si alguien reemplazara a alguien, tenemos que pensar en acciones concretas que partan de la construcción colectiva marcada por el intercambio generacional constante. Esto permite identificar de manera colectiva cuales son las necesidades históricas que tiene la organización campesina y de esta manera construir planes estratégicos para salir del estado en el que se está a partir de la autodeterminación de los pueblos. Tales estrategias a su vez enmarcan los planes o programas de formación agroecológica de los IALAs, lo que se convierte en una responsabilidad, por parte de los jóvenes campesinos, para asumir de manera comprometida el proceso educativo, ya que éste se encuentra enmarcado en superar las necesidades que tienen las comunidades rurales y que se convierten en desafíos por superar como humanidad.

Por las razones mencionadas los IALAs se convierten en una estrategia de la CLOC para formar jóvenes de familias campesinas y de organizaciones en agroecología con un perfil político-técnico; es un proceso continuo amplio y sistemático de reflexión sobre la práctica para la construcción de experiencias y saberes comunitarios o socialmente producidos desde las realidades y necesidades que se tienen desde los territorios.

¿Cómo pueden los jóvenes contribuir a impulsar procesos?

Como CLOC, nos ha resultado muy positivo el trabajo que se hace al implementar un diálogo de saberes entre comunidades a partir de la metodología de campesina a campesino. En este espacio también se prioriza la necesidad de promover la participación de las mujeres campesinas; construyendo organizadamente logramos entender que la agroecología no es un método estándar de producción; lo que se logra con agroecología es proteger la biodiversidad, el manejo participativo y sostenible del recurso hídrico.

Sumando todos estos métodos y saberes logramos enrutar la lucha contra los proyectos minero-energéticos corporativos que están acabando con nuestros recursos; por estos motivos sustentados es que enrutamos nuestro trabajo a la lucha por el reconocimiento de los derechos campesinos.

¿A que están llamados los egresados que terminan su proceso de formación agroecológica?

Como organización hemos llegado a la conclusión de que es indispensable que los egresados de los procesos de formación agroecológica de la CLOC, desarrollen junto a las comunidades trabajos agroecológicos dentro de organizaciones locales o de base, esto como estrategia para diversificar las experiencias y masificar la agroecología. Bajo este ritmo de trabajo se puede garantizar la lucha por la tenencia y uso agroecológico de la tierra, convirtiéndose de esta manera en la semilla de los procesos de formación agroecológica que es necesario esparcir para generar nuevas experiencias comprendiendo los aciertos y desaciertos que se han tenido. Esto para convertirlos en faros que iluminan nuestra Vía Campesina. Los egresados de los programas de formación están llamados a comprender que las problemáticas que viven los pueblos de nuestro Abya Yala son similares. Por otro lado, entender que los procesos formativos nunca terminan. Por tanto, es necesario estar dispuestos a compartir lo poco que se sabe y lo mucho que se tiene que aprender y desaprender a partir de la interacción socio-comunitaria. Esto es un mecanismo para seguir proyectando la esperanza y la articulación entre diferentes experiencias.

Por último podríamos compartir algunas proyecciones que como campesinos hemos construido:

* Sembramos la esperanza y esperamos seguirla cosechando.

* Luchamos por la tierra, la reforma agraria y la soberanía alimentaria a partir de la agroecología.

* Seguiremos luchando por el protagonismo de la mujer campesina.

* Seguiremos en contra del agronegocio y su paquete tecnológico.

* Tenemos que consolidar el movimiento campesino.

* Que los jóvenes egresados sigan haciendo las luchas en sus territorios.

* Seguiremos luchando por la unidad de los pueblos y que trabajemos como hermanos.

* Practiquemos la agroecología junto a la comunidad bajo valores humanistas.

* Tenemos que seguir implementando en los programas de estudio la investigación-acción participativa para masificar la agroecología desde herramientas innovadoras construidas en sociedad y para la sociedad.

* Mantendremos la virtud campesina de ser constantes en la siembra de la esperanza para cosechar buenos frutos.

* Seguiremos con el aprender haciendo y el educar produciendo.

* Seguiremos generando espacios para debatir e impulsar la reforma agraria.

* Tenemos que ser coherentes entre lo que decimos y lo que hacemos. No hay mayor verdad que la que está acompañada de una vivencia en la práctica.

*  La soberanía alimentaria se hace desde el contacto con la tierra hasta el consumo de los alimentos en nuestros hogares.

* Seguiremos luchando por el reconocimiento y la certificación del conocimiento campesino. Esto como estrategia para seguir impulsando modelos de producción agroecológica que ayudarán a reducir los impactos a la naturaleza y hacer que las comunidades campesinas puedan entrar a participar plenamente en espacios de debate en materia de políticas públicas para la agricultura.

Las dificultades son grandes pero los que han de vencerlas también…

José Martí.

¡Derechos campesinos YA!

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Temas: Agricultura campesina y prácticas tradicionales, Comunicación y Educación

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