Bolivia: Aymaras despiden con ofrendas el mes de la tierra
Los Achachilas, dioses que moran en los nevados, anuncian que habrá buena siembra en las comunidades
El cielo del altiplano fue invadido por el aroma de la khoa e incienso por más de 30 días. El hambre de la madre tierra fue satisfecha con las ofrendas, la ch?alla con alcohol y vino dulce
Con ceremonias solemnes que se realizaron en las apachetas (cumbres) y donde se ejecutaron los ritos de las wilanchas donde se ch?alla con la sangre de llamas sacrificadas y las wajt?as (ofrendas) que se otorgan a los dioses tutelares que moran los altos nevados, se despidió al mes de la Pachamama (madre tierra) en la jurisdicción del municipio alteño.
Agosto que se constituye en un mes de transición entre el crudo invierno del altiplano y la primavera, está considerado como una época en que la Pachamama tiene bastante hambre y abre su boca para recibir las ofrendas de los descendientes de los pueblos originarios. A diferencia del machaq mara (año nuevo aymara de los pueblos originarios), las ofrendas que son familiares no se otorgan en las apachetas, sino en las propias viviendas y chacras, sin embargo, las ofrendas comunitarias se siguen cumpliendo en las apachetas.
Los más de 30 días del mes de la Pachamama, por las ofrendas que se otorgaron en las más modestas viviendas de las villas de la periferia y la proliferación de los puestos de venta de las tradicionales mesas (ofrendas) que están elaborados en base a azúcar, hierbas aromáticas (khoa), lanas color arco iris, fetos de llamas y ovejas, grasa de vaca y cerdo, nuez, incienso y copal, demuestran que las tradiciones y ritos de los pueblos originarios tienen una plena vigencia en El Alto. Estos ritos que se ejecutan, Todos Santos, la Jach?a y Jisk?a Anata, el Machaq Mara y el laq?an paxi (el mes de hambre de la Pachamama), justifican de que El Alto es la nueva capital de los pueblos andinos.
RESPUESTA DE LOS ACHACHILAS
Los amautas y sacerdotes aymaras que predicen el futuro en base a las señales de la naturaleza, aseguraron que los Achachilas (dioses tutelares que moran los nevados) con la nevada que cayó en pasado días, anunciaron que la Pachamama ha satisfecho su hambre con las ofrendas que le dieron en las comunidades y las villas de El Alto.
La satisfacción del hambre de la madre tierra, según los amautas y dirigentes de la Federación de Comunidades Agrarias del Radio Urbano y Sub Urbano de El Alto, se traducirá en un buen tiempo que permitirá que la siembra será propicia. Aseguraron que comienza a restablecerse la relación entre el hombre y la naturaleza.
La buena cosecha no sólo beneficia a los campesinos, sino a los que viven en las villas alteñas quienes pueden comprar la papa, oca, quinua y habas a un reducido precio.
Recordaron que el año pasado, no hubo un tiempo propicio en vista a que no llovió lo suficiente y se precipitó la helada, lo que arruinó toda la siembra. Hasta ahora se vive las consecuencias de la mala cosecha, porque el precio de la papa se elevó considerablemente en los mercados.
RUPTURA DEL EQUILIBRIO
Los amautas que están congregados en el Consejo de Amautas Indígenas de Tawantinsuyu (CAIT) y los Maestros Amautas y Proveedores de Misterios en Warakho (Asepita) consideran que a partir de la invasión de 1532 se destruyó el equilibrio y la armonía social comunitaria, que se tradujo en la ruptura de la relación del hombre con la naturaleza.
Para ellos la Pachamama es la madre del hombre. Por esa situación desde hace 169 años los pueblos originarios, exigen el retorno a la Pachamama, a la comunidad comunitaria del ayllu.
Los amautas invocaron a los habitantes del mundo a cuidar a la madre tierra y no contaminarla ni destruirla. "Los amautas invocamos el mes de agosto, a todas las fuerzas cósmicas telúricas, a la Pachamama y al Tata Inti para que nos guíen en el camino de la vida, la verdad, paz, amor y libertad", manifestaron los guías espirituales de los pueblos originarios, quienes se congregaron ayer en la cumbre de Warakho Achachila, donde sacrificaron una llama blanca, para que los dioses tutelares sigan teniendo sus poderes cósmicos.
Apa, especial para Econoticiasbolivia.com
El Alto, agosto 31, 2004.
Fuente: EcoNoticiasbolivia.com