Firma en defensa del derecho a rechazar ayuda alimentaria genéticamente modificada
Carta para el embajador de Estados Unidos en la FAO
Para: Tony Hall
Embajador de los Estados Unidos en las FAO
Estimado Embajador Hall,
Los ciudadanos de muchos países de cada continente que firman abajo, desaprueban sus exaltantes comentarios (Reuter News Service, 9 de diciembre) sugiriendo que los líderes africanos que rechazan ayuda alimentaria manipulada genéticamente deberían ser juzgados "por los mayores crímenes contra la humanidad en los tribunales superiores del mundo". Este imprudente comentario huele a hipocresía y a deficiente juicio político y no tiene base legal en la legislación internacional. Sirve solamente para fomentar el deterioro que el gobierno de los Estados Unidos ya sufre a causa de su política exterior unilateral, agresiva y abusiva.
Los Estados Unidos jamás han respaldado al tribunal superior internacional, la Corte Internacional en lo Criminal, patrocinada por las Naciones Unidas,
Por el contrario, pretende impedir su existencia y, desde su establecimiento en julio de 2002, los Estados Unidos han empleado intensas presiones diplomáticas para debilitar su implementación por parte de otros países.
Es absolutamente deshonesto invocar ahora esta institución para cuestionar a Zambia y otros países africanos en relación al derecho soberano a rechazar alimentos que los países europeos y muchos otros han rechazado ya de igual manera.
En realidad, el único país que priva a los africanos de la tan necesitada ayuda alimenaria son los Estados Unidos, cuando insiste en que su donación de 51 millones de dólares sea gastada solamente en granos de origen estadounidense. La compra de alimentos no GM a otros países africanos, Brasil, China, Hungría, Rusia y otras regiones aún libres de contaminación genética aliviaría rápidamente las hambrunas inminentes y, al mismo tiempo, estimularía la productividad agrícola y el desarrollo económico en esas regiones. De hecho, alrededor del 70% de todo el maíz producido en los Estados Unidos no está aún manipulado genéticamente, por lo que podríamos suministrar lo que los africanos prefiriesen de nuestros agricultores.
Usted critica a los líderes africanos por proteger a su gente, mientras nuestro gobierno envía ayuda alimentaria que contiene StarLinkTM, una variedad de maíz genéticamente manipulado que la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) no ha aprobado para consumo humano en este país. Quizás los Estados Unidos deberían ser enjuiciados por crímenes contra la humanidad.
¿Porqué deberíamos esperar que los zambianos comieran alimentos que los norteamericanos, europeos y otros no comerían? ¿Porqué debería esperarse que cualquier persona ingiriera alimentos cuya seguridad para los humanos no ha sido adecuadamente comprobada por los fabricantes o el gobierno de los Estados Unidos, especialmente si estos alimentos no testeados consistirán en los dos tercios de la ingesta calórica diaria de esa persona? ¿Porqué deberían los zambianos ingerir maíz genéticamente manipulado que podría afectar su recubrimiento estomacal, causar alergias y contener un gen con resistencia a antibióticos, cuando su sistema inmune está ya debilitado por la malnutrición?
Su crudo comentario parece destinado a desviar la atención de un asunto mucho más preocupante: las razones políticas por las cuáles el gobierno de Estados Unidos está imponiendo maíz genéticamente modificado a gente necesitada alrededor del mundo, no sólo en el África golpeada por la sequía, cuando hay en realidad disponibles stocks de granos convencionales. Estados Unidos tiene un excedente de maíz aquí porque los alimentos genéticamente manipulados son rechazados en muchos mercados. ¿Propone usted también que los líderes de estos países sean enjuiciados por altos crímenes contra los Estados Unidos?
Una cínica estrategia de ayuda alimentaria que descargue en comunidades vulnerables maíz invendible, libera a los Estados Unidos de estos gravosos stocks mientras da a Monsanto y a otras compañías biotecnológicas un estímulo al eliminar las fuentes competitivas de granos no-GM del mercado mundial.
Sr. Hall, usted ha sacrificado una buena reputación como defensor de los hambrientos para servir a Monsanto y al resto de la industria biotecnológica que ha capturado la voz de la la Casa Blanca de la administración Bush.
El presidente de Zambia, Levy Patrick Mwanawasa, ha invocado los derechos soberanos de los gobiernos a proteger a sus ciudadanos Mwanawasa dijo que los alimentos no probados para consumo humano planteaban "un peligro para la vida de los ciudadanos" y que la importación representaba una posible amenaza inmediata de "contaminación de los stocks de semillas autóctonas e híbridas" necesarios para reconstruir la capacidad agrícola de la región y la seguridad alimentaria.
Su punto de vista es compartido por los más de 100 gobiernos de todo el mundo que han firmado el Protocolo de Cartagena sobre Bioseguridad y la Convensión sobre Diversidad Biológica, ambos tratados internacionales negociados bajo el auspicio de las Naciones Unidas.
Su punto de vista también es compartido por quienes firman a continuación esta carta. ¿Seremos también enjuiciados por altos crímenes?
Sinceramente;
Cc: U.S. Secretary of State Colin Powell
U.S. Undersecretary of State Alan Larson
U.S. Agency for International Development Administrator Andrew Natios
U.N. Food and Agriculture Organization Director-General Jacques Diouf
U.N. High Commissioner for Human Rights Jaime Mello Viera
U.N. High Commissioner's Office Special Advisor on Food Jean Ziegler
Los firmantes deben enviar el nombre y país de sus organizaciones a la siguiente dirección de correo electrónico: gro.ptai@snikwadk