Soberanía alimentaria y organización popular en la agenda de la Escuela Nacional de Activistas del MPA
Entre el 17 y el 20 de agosto , campesinos del Movimiento de Pequeños Agricultores (MPA) se reunieron en Brasilia para la Escuela Nacional de Activistas , un espacio de formación, reflexión y fortalecimiento de la lucha campesina en Brasil.
Con participantes de diferentes estados, la Escuela Nacional se caracterizó por debates sobre soberanía alimentaria, agroecología, el Plan Campesino y la organización popular como herramientas para abordar las crisis sociales y ambientales. Las actividades combinaron estudios teóricos, experiencias culturales y momentos de misticismo, reafirmando la unidad entre la práctica de la producción alimentaria saludable y la construcción de un proyecto de país desde la base.
“La transformación radical es la transformación que atiende las necesidades reales de los pueblos. El activismo es quien teje esta lucha, teje historias y memorias en los territorios, y activa los sueños de una nueva sociedad”, enfatizó Marcelo Leal, uno de los asesores de la formación, junto a Anderson Amaro y Rafaela Alves .
La escuela también sirvió como espacio para el intercambio de experiencias entre diferentes generaciones de campesinos, conectando las memorias de las luchas pasadas con los desafíos del presente. Durante cuatro días, los activistas reflexionaron sobre el papel histórico de los campesinos en la defensa de la vida y sobre cómo fortalecer la solidaridad entre las zonas rurales y urbanas frente al hambre y la desigualdad.

Imagen: Colectivo de Comunicaciones del MPA
Además de las capacitaciones, la escuela albergó la Ciranda Camponesa (Círculo Campesino), un espacio político para niños que participaron en actividades educativas y culturales. La ceremonia de clausura incluyó una exposición de arte y una función de teatro de títeres, reafirmando que la identidad y la lucha campesina también se construyen en la infancia.
La actividad se enmarca en el proceso de formación permanente del MPA y reafirma la centralidad de la educación popular en la formación de sujetos políticos críticos, creativos y comprometidos con la transformación de la sociedad capitalista.