EE.UU. no financiará la lucha contra la pobreza
Brasil, en nombre de los países en desarrollo, y la ONU llamaron a una alianza global para combatir la pobreza en el mundo, pero Estados Unidos se opuso a las propuestas para financiar esa batalla, entre ellas un impuesto al comercio de armas
SAO PAULO, 15 (Reuters y EFE). El secretario general de la ONU, Kofi Annan, y el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se estrechan la mano ante la presencia del canciller brasileño, Celso Amorim. (AFP).
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en un discurso en la XI Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) que se realiza en Sao Paulo, insistió en propuestas como un impuesto al comercio de armas o la creación de una tasa a transacciones financieras para financiar el desarrollo y combatir el hambre.
Lula dijo que un grupo técnico integrado por la ONU, Brasil, Chile y Francia tiene hasta julio para proponer "mecanismos viables" dirigidos al "financiamiento al desarrollo".
Entre las propuestas consideradas, agregó, se incluyen la de un "impuesto a las transacciones financieras, especialmente las originadas en los paraísos fiscales", además de una tasa sobre el comercio de armamentos.
El presidente, quien declaró el combate al hambre en Brasil como una de las prioridades de su Gobierno, dijo que era mejor invertir en la lucha contra la pobreza que gastar el dinero en "guerras innecesarias", en una aparente referencia a la campaña militar encabezada por EE.UU. en Irak.
Además, indicó que el dinero necesario para combatir la pobreza en todo el planeta, unos 54.000 millones de dólares al año, representa menos de los gastos militares que se hacen en todo el mundo en tres semanas.
El hambre, y las enfermedades relacionadas con la pobreza, mata 25.000 personas cada día y a seis millones de niños cada año, muchas más que las guerras, según datos de ActionAid International.
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, indicó por su lado que el combate al hambre requiere acciones urgentes y llamó a aumentar la ayuda de los países ricos al mundo en desarrollo.
Annan, ante delegados de 178 países, dijo que la ayuda no puede ser vista como "caridad" y que las naciones ricas tenían que considerar las propuestas de los países pobres mientras se buscan soluciones financieras para el mundo en desarrollo.
Los esfuerzos para luchar contra la miseria en los países en desarrollo e impulsar el crecimiento de sus economías pueden quedar en palabras si no hay acciones concretas y urgentes, coincidieron hoy representantes internacionales.
Las Naciones Unidas se trazaron hace cinco años las llamadas "Metas del Milenio", con el compromiso de mejorar las condiciones de los países más pobres para el año 2025 y en adelante.
Diario ABC, Paraguay, 15-6-04