Greeenpeace y caucheros crearán nuevas reservas extractivas en la Amazonía
Cercano al aniversario de la muerte del líder cauchero Chico Mendes (asesinado el día 22 de diciembre de 1988), un convenio firmado entre Greenpeace y el Consejo Nacional de Caucheros (CNS) permitirá la creación de nuevas reservas extractivas en la Amazonía, una de las principales luchas ambientales llevadas adelante por el ambientalista
17.diciembre/2003 - Brasil - Adital/Ambiente Brasil ? El principal objetivo de este convenio es desarrollar una campaña nacional e internacional por la creación de reservas extractivas en la Amazonía brasilera, en especial la Resex Verde para Siempre (en Porto de Moz), la Resex Renascer (en Prainha) y el Mosaico de áreas protegidas de la Terra do Meio, en el estado de Pará.
El CNS, con ayuda de Greenpeace, abrirá una oficina en Porto de Moz ? una de las áreas de mayor conflicto en la Amazonía. Idalino Nunes de Assis, del Sindicato de los Trabajadores Rurales (STR) de Porto de Moz, y también integrante de la coordinación estadual del CNS, agradeció el apoyo dado por Greenpeace.
"Hace tres años que trabajo con Greenpeace y nunca tuve dudas que iríamos a efectuar este acuerdo. El pueblo de Porto de Moz precisa de mucha ayuda", afirmó. El presidente del STR de Prainha, Delfem Ferreira, también consideró el convenio una victoria para las comunidades de la región.
Los objetivos del acuerdo son apoyar la realización de los levantamientos necesarios para crear estas Unidades de Conservación, conforme a las normas exigidas por el Gobierno Federal, e realizar acciones coordinadas de apoyo a las demandas de cooperación técnica y financiera de las poblaciones agro-extractivas de la Amazonía que luchan por la creación de Resex (Reservas extractivas). Las organizaciones también quieren fortalecer el trabajo de difundir y generar mecanismos de participación con relación a políticas, planes, programas y proyectos relacionados a la creación de estas unidades de conservación de uso sustentable.
Actualmente, la actividad maderera en la región es realizada en tierras ocupadas ilegalmente, sin el mínimo respeto a la legislación forestal brasilera y a los derechos de las comunidades locales que dependen de la floresta para su supervivencia.
ADITAL, Internet, 17-12-03