Militarización del campo preocupa a paraguayos
El presidente paraguayo Nicanor Duarte amenaza usar la fuerza militar para contener las ocupaciones campesinas que buscan promover un paro nacional el próximo 17 para denunciar el estado de violencia en que se encuentra el país
Los conflictos en el campo paraguayo entre agricultores, ganaderos y gobierno se intensifican tras la reciente muerte de un campesino la semana pasada en General Resquín, departamento de San Pedro, durante la serie de desalojos autorizados por el presidente Nicanor Duarte, atendiendo a pedidos de la Asociación Rural de Paraguay.
Pese a la iniciativa gubernamental de procesar a 1.500 campesinos y detener a 190, los trabajadores rurales prometen que las ocupaciones van a proseguir. En carta al Congreso Nacional, los trabajadores rurales repudian las declaraciones presidenciales de lanzar los militares a las calles y al campo para acabar con las ocupaciones.
Otra línea de acción de los campesinos será la denuncia de la militarización del campo paraguayo ante la comunidad internacional. La Frente Nacional de Lucha por la Soberanía y la Vida deberá presentar mañana, día 10, una denuncia por violación de los derechos humanos y la violencia en el campo ante el Parlatino (Parlamento Latinoamericano) y la Organización Interamericana de Derechos Humanos.
Sin embargo, la mayor iniciativa del Frente Nacional promete ser el paro general marcado para el próximo martes, día 17. En la ocasión debe haber cortes de rutas y movilizaciones en todo el país. De acuerdo a Luis Aguayo, dirigente de la Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas (MCNOC) e integrante del Frente Nacional, el paro es una necesidad urgente para contener la represión al movimiento campesino, evidenciada en caso ocurrido este final de semana, cuando organizadores del paro en el departamento de Guairá fueron hostilizados por militares.