Patentes y semillas modificadas genéticamente, a juicio en Canadá

La multinacional Monsanto acusa a un agricultor canadiense de robo de semillas modificadas genéticamente. El agricultor alega que las semillas llegaron a sus campos de plantaciones vecinas

La batalla legal emprendida entre la multinacional estadounidense Monsanto y el agricultor canadiense Percy Schmeiser va camino de convertirse en un juicio sobre el futuro de la agricultura mundial, la biodiversidad y las patentes.

La denuncia parte de Monsanto. En 1997, esta compañía acusó al agricultor de haber robado semillas modificadas genéticamente de canola. Schmeiser asegura que estas semillas llegaron a sus campos (1.400 acres) sin su conocimiento, procedentes de plantaciones vecinas sembradas con la 'biosemilla' de Monsanto, seguramente por el polen.

En todo caso, Schmeiser asegura que debería ser él quien denunciara a la empresa dado que estas semillas han 'invadido' sus campos destruyendo la variedad que él había desarrollado mediante el cruce natural de semillas durante cincuenta años.

De esta forma, una simple denuncia de robo de semillas -Monsanto cobra habitualmente 12 dólares por acre (4.000 metros cuadrados) plantada- se ha convertido en un proceso judicial en el que la Corte Suprema de Canadá tendrá que considerar si la patente de Monsanto sobre una variedad transgénica del oleaginoso colza es válido.

Mientras que en Estados Unidos es posible patentar vegetales y animales, en Canadá la justicia se ha pronunciado en contra hasta ahora. Schmeiser se ha visto arropado por organizaciones campesinas y ecologistas que tratan de detener la actividad de esta compañía en Canadá.

El pasado martes, Monsanto y Schmeiser volvieron a enfrentarse ante el Tribunal Supremo canadiense, cuyos jueces pusieron en duda varias de las afirmaciones de la corporación, empezando por la alegación de que poseer la patente de la semilla da derechos sobre el conjunto de la planta. El Tribunal tampoco considera probado que Schmeiser comprara las semillas. La sentencia se hará pública en unos meses.

Según informa la prensa canadiense, en caso de que Schmeiser fuera absuelto, "supondría un tremendo espaldarazo para las fuerzas movilizadas contra la biotecnología". De hecho, las organizaciones que han respaldado al agricultor canadiense durante todo el proceso buscan ahora "un Schmeiser estadounidense para desafiar de nuevo a la compañía de Saint Louis".

90 agricultores denunciados por Monsanto en EEUU

Desde 1997, Monsanto ha denunciado a 90 agricultores en Estados Unidos. "Esto es mucho más grande que el caso Schmeiser ", asegura la portavoz del Consejo de Canadienses, Nadege Adam. Esta organización ha sido una de las implicadas en la defensa de Schmeiser, junto con el Sierra Club de Canadá y el Centro Internacional para Asesoramiento Tecnológico de Washington.

Pero son muchos más los agricultores amenazados por Monsanto, al menos 500 según estas organizaciones. En la mayoría de los casos, los agricultores pagan la cantidad que les exige la compañía y firman acuerdos de confidencialidad.

En Canadá, la mitad de los cultivos de canola proceden de la variedad de Monsanto, diseñada para resistir al herbicida 'Roundup', que ella misma ha desarrollado.

Más información:

Página de apoyo a Percy Schmeiser

Canal Solidario, Internet, 24-1-04

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