Soberanía alimentaria

"Es inaceptable para un país como el nuestro haber permitido la transferencia de nuestra soberanía alimentaria a manos privadas y trasnacionales. Hecho que no hicieron ni harán los países desarrollados y emergentes con proyecto nacional soberano como Brasil, India y China."

La Corporación Ecofondo, La Asociación Organización Quindiana de Ambientalistas – ORQUIDEA- , La Fundación Ecológica Reserva Las Mellizas y La Asociación de Desarrollo Comunitario en el Quindío - ADECOQUIN, tienen el gusto de invitarlo al Foro Regional “el campo le habla a la ciudad”. Por un país con diversidad y equidad.

Grupos y redes en defensa de la soberanía alimentaria de distintos territorios del Estado español se reunieron el 19 y 20 de febrero en Vinyols i els Arcs (Tarragona) para avanzar en la construcción de la Alianza por la Soberanía Alimentaria de los Pueblos.

Ante el intento gravísimo de la FAO de promover los intereses de unas pocas transnacionales en todos los sectores alimentarios y rurales, con la excusa de crisis que son reales, pero cuyas soluciones nada tienen que ver con el uso de tecnologías caras y patentadas controladas por unas cuantas empresas, poniendo en riesgo además la salud, el ambiente y la biodiversidad, la Red en Defensa del Maíz, la Vía Campesina Región América del Norte y la Asamblea Nacional de Afectados Ambientales convocan a las siguientes actividades.

Las voces de alerta se unen: si no hay cambio en la política agropecuaria para dejar de depender de Estados Unidos y reducir el control de las empresas trasnacionales en la comercialización de semillas y productos del campo, aumentará el número de personas en pobreza alimentaria.

"Para que todos y todas tengamos alimentos sanos, sabrosos y suficientes, alimentos de nuestra tierra, nuestro mar, nuestro manglar. Para que tengamos alimentos cultivados, recolectados y elaborados por nuestras familias de pequeños y medianos agricultores, pescadores artesanales y pueblos del manglar, hombres y mujeres campesinas, indígenas, cholas, mestizas, negras y montubias."

En Uruguay, una zafra excepcional en producción de durazno y la consiguiente destrucción de ese alimento, debería poner sobre la mesa la acuciante necesidad de adoptar medidas en torno a la soberanía alimentaria.

Los alimentos que consumimos recorren miles de kilómetros antes de llegar a nuestro plato con el consiguiente impacto ambiental y coste económico. Esther Vivas, miembro del Centro de Estudios sobre Movimientos Sociales de la Universitat Pompeu Fabra, defiende la soberanía alimentaria como un derecho.