Mientras que las sociedades todavía se debaten tratando de entender la biotecnología y sus implicaciones, nuevas tecnologías aún más poderosas crecen sin ser detectadas por el radar público. Tal es el caso de la genómica humana, las neurociencias, la robótica, las tecnologías informáticas y la más significativa de todas: la nanotecnología, rebautizada "tecnología atómica" por el Grupo ETC