Internacional

En las negociaciones de la ronda de Doha sobre comercio internacional se ha notado algo cruel. Mientras los países ricos se negaban a disminuir los subsidios agrícolas y a modificar otros renglones de la agenda comercial para preservar su alto nivel de consumo, otros luchaban, desesperadamente, para garantizar la supervivencia de sus pueblos. La visión de los países opulentos es miope, pues ya está instalada la crisis alimentaria, posiblemente de larga duración, que puede afectarlos a ellos, pero mucho más a millones y millones de personas, que se enfrentan no a la pobreza sino directamente a la muerte. Ya han estallado revueltas de hambrientos en cuarenta países sin que la prensa empresarial, comprometida con el orden imperante, haya hecho referencia alguna. Los hambrientos siempre dan miedo

¿Economía de revolución?

Las trasnacionales de los transgénicos pretenden hacernos creer que los transgénicos son solamente una opción de quien los elige. Debido a la inevitable contaminación –sea por polen en los campos, por mezcla en el almacenado, distribución o venta y hasta por granos que caen durante el transporte– los transgénicos son los cultivos más imperialistas de la historia. A la contaminación biológica, se suman los juicios por patentes que sufren los agricultores contaminados y la indefensión legal de los contaminados. Al contrario de lo que dicen las empresas, si hay transgénicos, todo el resto sufrirá.

Maíz transgénico termina con el maíz orgánico

La Plataforma Rural, el Observatorio de la Deuda en la Globalización y Ecologistas en Acción consideran la “muerte” de la Ronda de Doha una buena noticia para los países empobrecidos, la agricultura y el clima. Además reclaman al Gobierno español y la UE que cambien radicalmente sus políticas comerciales.

Fracaso de la Ronda de Doha de la OMC: bofetada contra las políticas comerciales internacionales

A crise dos alimentos está tão presente no noticiário como nas estratégias das multinacionais de biotecnologia. Mesmo contra todas as evidências mostrando que os transgênicos não são necessários para garantir a alimentação humana, as empresas vêm usando a alta do preço dos alimentos para renovar suas promessas e campanhas de propaganda.

Empresas de biotecnologia aproveitam a crise mundial de alimentos para renovar promessas e campanhas de publicidade

Por AS-PTA

Recientemente, en estas mismas páginas Johann Hari presentaba la historia del monocultivo del plátano como parábola del poder corporativo que se expande por todo el sector agrícola. Esta fruta nos permite conocer también el doble rasero con el que sus propietarias corporativas se manejan, en función de si operan en un país rico, o lo hacen en una –según ellas definen, visualizan y desprecian– república bananera.

Platanario

El Ayllu Jesús de Machaca presentó en el mes de abril una queja a la OPIC (Corporación Norteamericana de Inversión Privada para el Exterior por sus siglas en ingles), por la falta de cumplimiento a las normas y políticas de relacionamiento con pueblos indígena asumidas por la empresa minera Manquiri, subsidiaria de la empresa norteamericana Coeur d”Alene, a la hora de recibir un financiamiento de seguro de riesgo político de la OPIC por valor de USD 54 millones. La agencia internacional de inversión aceptó la queja y desde este 21 de julio se encuentran en la ciudad de Potosí sus representantes Jane Aden y Robert Wasserstrong visitando a las comunidades afectadas.

Organismo internacional inicia verificación de la queja del Ayllu Jesús de Machaca contra la minera Manquiri

Los grupos antiglobalización consideraron un triunfo para los agricultores, los trabajadores y los pobres de todo el mundo, y un golpe contra las “grandes empresas”, el colapso de las conversaciones para un nuevo acuerdo global de comercio.Incluso las grandes agrupaciones laborales y de campesinos sostuvieron que el acuerdo que se negociaba en la ronda de Doha de la OMC en los últimos días era tan malo que merecía haber fracasado.

El fracaso de la ronda de Doha, “respiro” para países pobres

Por Reuters

Cuarenta ministros de comercio preseleccionados, invitados a Ginebra, no tienen ningún tipo de mandato para decidir sobre el futuro de millones de personas. ¡La Via Campesina exige el abandono de las negociaciones de la OMC!

Un charlatán y sus falsas medicinas: para solucionar la crisis alimentaria, la OMC presiona por una mayor liberalización: ¡más aceite al fuego!