Acaparamiento de tierras

Desde el GAJAT expresamos nuestra preocupación y repudio por el reciente Decreto del Poder Ejecutivo, que bajo el ropaje de reglamentar la ley de extranjerización de tierras -la que vino a poner límites su compra por extranjeros- y en términos sumamente difíciles de comprensión, impone controles tan laxos que modifica y transforma en letra muerta dicha norma de limitación.

"El CAMP al haber elegido a un personaje político que públicamente pregona el racismo y se encuentra afiliada a un partido que indudablemente tiene sus raíces nazis, fomenta la desconfianza del pueblo Garífuna en las ZEDES, las que abarcan más de 20 de nuestras 47 comunidades en Honduras".

Las ZIDRES son el reencauche de una modalidad fundamentada en los beneficios para las transnacionales del agro, que en múltiples países con problemas de desnutrición, como Colombia, ha demostrado ser insuficiente y contraria a la necesidad de superar el hambre y la desnutrición de sus ciudadanos.

No Mato Grosso do Sul, no meio de uma plantação de cana, vive um grupo de famílias Guarani e Kaiowá. Para eles, aquela terra se chama Apyka'i, e é onde estão enterrados os seus antepassados. E eles estão ameaçados de despejo.

"Las Zonas de Interés de Desarrollo Económico y Social (Zidres) corresponden a la lógica del desarrollo capitalista, el cual se caracteriza, entre otras cosas, por despojar a los campesinos de su tierra y transformarlos en pobres asalariados o, en el peor de los casos, en lumpen que pulula en las grandes urbes."

Se cumplen 4 años del infame episodio conocido como la Masacre de Curuguaty, ocurrido el 15 de junio de 2012 en el departamento de Canindeyú, Paraguay. Una vez más, nos juntamos a recordar ese nesfasto día en el que las mafias sellaron con sangre el destino del país. La Masacre de Curuguaty demuestra el poder y los pocos escrúpulos que tiene la oligarquía terrateniente, que actúa en articulación con las transnacionales y ocupa todos los poderes del Estado Paraguayo.

"También el Perú está de socio asociado pero de empresas, a las que no solo les hace leyes a pedido y les dicta las políticas que mejor respondan a sus intereses, sino que también las atiende con gestos serviciales."

Os direitos constitucionais dos povos indígenas do Brasil estão sob sério risco de retrocesso. O governo interino de Michel Temer, sob pressão da bancada ruralista – interessada em permitir a exploração econômica das terras tradicionais dos povos – sinalizou que pode, a qualquer momento, revisar e até revogar os relatórios, as portarias declaratórias e as homologações de terras indígenas publicados recentemente pelo governo de Dilma Rousseff. Essa indicação, além de perpetuar a dívida histórica do Estado brasileiro com os povos indígenas, é flagrantemente inconstitucional.