En una acción propia de Estados autoritarios, la Policía Nacional y el Ministerio Público detuvieron a tres de los principales dirigentes de la Coordinadora de Sin Tierras del Norte y emitieron órdenes de captura contra, al menos, otros cinco referentes. Les acusan de “apología a cometer hechos punibles”, en un evidente intento de criminalizar la lucha campesina por la recuperación de la Estancia Lucipar, un inmueble decomisado al narcotraficante Luiz Carlos da Rocha (Cabeza Branca) y actualmente administrado por la Secretaría Nacional de Bienes Incautados y Comisados (SENABICO).