Alianza Biodiversidad

Alianza Biodiversidad

La Alianza Biodiversidad es una plataforma colectiva latinoamericana que reúne a 12 organizaciones y movimientos clave de la región que trabajan en defensa de la biodiversidad. Es el resultado consolidado más de 20 años de cooperación, que incluye la producción de la revista trimestral "Biodiversidad, sustento y culturas", así como el sitio Web "Biodiversidad en América Latina"

La Alianza Biodiversidad dirige fundamentalmente sus acciones hacia los movimientos sociales que protagonizan las luchas en defensa de sus territorios y por la construcción de un modelo agroecológico de base campesina de producción de alimentos en América Latina.  Todas las actividades que realizamos se enmarcan en estrategias de comunicación, de formación/educación, y de análisis crítico, y tienden a generar impactos positivos en el desarrollo de capacidades y participación en instancias concretas de defensa de los bienes comunes y los territorios.

Más información sobre la Alianza Biodiversidad

- Francisco Vásquez Guzmán. Foto: JOMS
Las semillas son la dignidad de los pueblos: “acá luchar es volver a casa”

Esta vez compartimos con ustedes historias de entendimiento nuevo: de lo necesario y urgente que es recuperar y defender nuestras semillas, los modos en que esas semillas, tales cultivos, pueden amigarse con las comunidades y hacerlas crecer al igual que las plantas y los árboles crecen y dan frutos de donde nos alimentamos, pero también de donde nos volvemos más dignas, más dignos, al emprender y ejercer nuestros cuidados, nuestra cotidianidad, nuestros quehaceres como personas enlazadas que ejercemos una mutualidad equitativa, respetuosa y plena de cariño. Sin que esto nos desmerezca la defensa frontal que también tenemos que ejercer para abrirle espacios a nuestra casa común.

De un vistazo y muchas aristas #109

La pandemia, pretexto para consolidar el agronegocio, las actividades extractivas y el debilitamiento del Estado

Después del golpe inesperado que el mundo recibió con la expansión y posterior declaratoria del COVID-19 como pandemia universal, hubo un sentimiento inicial de abatimiento e incertidumbre resurgiendo con frecuencia, hasta en los medios de comunicación, el pensamiento: “Comer es primero”. Incluso quienes votaron por el TLC EUCARD (Estados Unidos, Centro América y República Dominicana) parecieron aceptar la idea del fomentar la agricultura campesina local y los huertos urbanos. Después de todo, la piña, las flores y demás productos de agro exportación no nos dan de comer. Poco después de este primer round, la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Privado (UCCAEP), se enderezó y se reorganizó cambiando las cosas de manera tajante a su favor, incluyendo la presión para que Costa Rica termine privatizando las pocas instituciones que todavía hacen fuerte la seguridad social y proveen de recursos al Estado.

La pandemia, pretexto para consolidar el agronegocio, las actividades extractivas y el debilitamiento del Estado

Foto de Nathalia Bonilla

"En los últimos meses, pero especialmente a partir del 2020, se ha desatado una fiebre de tala de balsa en el Ecuador. En todos los rincones del país donde crece este árbol, se está acabando con las poblaciones de balsa; y su destino final es China. La madera de balsa es un importante insumo de los molinos de viento generadores de energía eólica, por ser la más ligera de las maderas comerciales, inclusive más que el corcho, y por su gran resistencia. Entre enero y noviembre de 2020 las exportaciones de la industria forestal de Ecuador ascendieron a 784 millones de dólares, es decir 53% más en comparación con 2019; y casi el 70% de las exportaciones ecuatorianas de madera de balsa se destinaban a la energía eólica a China, y se ha convertido en el tercer producto de exportación al mercado chino, después del camarón y banano".

Ataques, políticas, resistencias, relatos #109

Foto: Mario Olarte

"El paradigma de la Revolución Verde se impone y prevalece en los centros de “investigación” y la academia. Su enfoque reduccionista, desconoce o ignora la existencia de modos de producción ancestrales, que persisten y son consustanciales a la vida campesina e indígena; desconoce sus aportes a la producción de alimentos, su adaptación al cambio climático, la conservación de la biodiversidad, la cultura y la vida. Estos sistemas agroecológicos diversificados, complejos, dependen de los saberes que los pueblos han compartido, enriquecido y desarrollado por miles de años".

Nuevas leyes de semillas en Honduras. Mecanismo de despojo y violación de derechos a campesinos e indígenas

Cuando la industrialización toca a la semilla es tiempo de actuar

La agricultura “protegida” de invernaderos instala un paisaje industrial donde antes había diversidad biológica, pueblos, cultivos, vida silvestre y mantos acuíferos. Llega a las regiones a privatizar, es decir, a aislar de la integralidad o de lo colectivo: el suelo, el clima, el agua, el trabajo y el entorno. Lo convierte todo en mercancía. Impone de forma irreversible plástico, cemento y metal.

Cuando la industrialización toca a la semilla es tiempo de actuar

Huerta agroecológica de guardianas y custodios de semillas de la casa comunitaria de semillas de Riosucio, Caldas, Colombia. Foto: Viviana Sánchez-Prada

Ésta es la historia de dos micro-historias que se cuelan en un informe de avance, de ésos que se presentan rutinariamente para reportar el cumplimiento de actividades encomendadas en lo que se llama asistencia técnica. Me pregunto cuántas veces ocurrirán estos intentos de contar algo más que la tarea, si acaso son tomadas en cuenta por quien supervisa y se encarga de aprobar los documentos. El caso es que, así como el orden impuesto en la cadena de “transferencia tecnológica” está poblado por gente que al ejecutar los programas garantiza la imposición en campo de tecnologías traídas, compradas, pensadas para crear dependencia, de vez en cuando hay profesionales jóvenes y sensibles que se preguntan, que reconocen en la producción seres con saber y con historia, que merecen tener voz y presencia en el hacer. El autor es Ronald Herrera, un agrónomo convencido del diálogo de saberes, del poder transformador del saber local que habita en cada rincón, y así es vivencia su trabajo.

Historias agazapadas

- Foto de Andrés Pasquis
Comunicación en defensa de la agrobiodiversidad

Cada historia es una semilla y cada semilla tiene una historia. ¿Qué semilla siembras? ¿Qué historia cultivas? A partir de estas preguntas, el Premio #LaHistoriaQueCultivo, concebido por el Grupo de Trabajo (GT) Biodiversidad de la Articulación Nacional de Agroecología (ANA), se dirigió a quienes desarrollan acciones y multiplican conocimientos sobre la recuperación, la conservación y el uso de la agrobiodiversidad en Brasil. El concurso incentivó a guardianas y guardianes de semillas a contar sus historias en videos caseros de hasta cinco minutos, grabados con un celular o cámara. Pese al escenario pandémico, con tanto dolor y muerte, la iniciativa se extendió por todo el país y recogió informes de esperanza.

La historia que cultivo

La Troja. Granero campesino en Manabí. 2021. Fotos: Diana Cabascango

La agrobiodiversidad de la provincia de Manabí es muy importante pues posiblemente ahí se desarrolló uno de los centros de origen de la agricultura. Lamentablemente, es la segunda zona con maíz industrial del Ecuador con el 24.9% de la producción. Esta provincia se caracteriza por ser campesina por excelencia. En Manabí se concentra la mayor cantidad de fincas dedicadas a la siembra de maíz duro. La historia del maíz en la provincia es de larga data y una condición importante es que procuran asociarlos con frejol, zapallo o maní, con ello enriquecen el suelo y se proveen de insumos para su gastronomía local. Tras la promoción de los “kits” de cultivos de maíz duro en la provincia, muchos campesinos han sustituido sus chacras diversificadas por el monocultivo, aunque dado el apego a sus tradiciones, a modo de resistencia cultural, algunas de las plantaciones de maíz duro son combinadas con cultivos asociados.

Importante labor en la conservación y sobrevivencia de las semillas campesinas en Manabí

Foto de Viviana Sánchez Prada.

No hay símbolo más florecido y refulgente de la vida que viene, del pasado remoto que nos acompaña siempre, que las semillas: germen del futuro, legado común que los pueblos brindan vez tras vez, en su amorosa y profunda relación con la Naturaleza.

Editorial #109 - Biodiversidad, sustento y culturas

Biodiversidad, sustento y culturas  #109

No hay símbolo más florecido y refulgente de la vida que viene, del pasado remoto que nos acompaña siempre, que las semillas: germen del futuro, legado común que los pueblos brindan vez tras vez, en su amorosa y profunda relación con la Naturaleza. 

Biodiversidad, sustento y culturas #109